Joven,
siento el alma de la tierra
en tu corazón saltando.
Y un amanecer despierta
como un volcán enfurecido.
Tu sueño lleno de fantasías,
estalla en un grito de alegría
en el cielo jugando.
Sin alas… Volando
Joven,
el futuro está en tus manos.
Puedes cambiar lo que quieras,
puedes llevar el pan a todas las bocas
y no a una pocas.
Pintar el color del Arco Iris.
Quitarle el amarillo a la naranja mecánica.
Puedes construir un castillo tan grande como la esperanza,
Subirte a la torre más alta,
acabar con el yo solitario,
formar un yo con el otro,
en un diálogo universal.
Hay tiempo aún,
está todo acumulado.
Puedes hacer lo que quieras.
Rompe el cascarón de la rabia
e inventa caminos.
Aprovecha ahora que es primavera
y todavía en las mariposas
se ve el color del día
inventando una canción.
Y todavía el mundo está en tus manos,
como un astro brillando,
con el azul ternura de tu sol.
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