CONFUSIÓN DE IDEAS

Siempre somos más de lo que aparentamos,
incluso ante nosotros mismos  

La confusión de identidades siempre ha sido un tema recurrente
en la literatura y el cine. Se confunde al héroe con otra persona y,
a partir de ese momento, se producen todo tipo de aventuras y
maniobras fantásticas.
Durante el proceso, se produce un cambio en la vida de todos los

personajes, cuando alguien se enamora de quien no es lo que parece
o cuando el héroe consigue llevar a cabo hazañas que nunca habría
sido capaz de realizar con su auténtica identidad. La mayoría vive en
un estado de permanente confusión de identidades, poniendo a buen recaudo su

“auténtica” naturaleza.
El esfuerzo de mantener la imagen que creemos más conveniente no
permite que los demás nos vean como realmente somos. El problema es
que tener una doble vida supone un enorme esfuerzo. Después de todo,
si Superman no hubiera pretendido ser Clark Kent, ¡habría ahorrado tiempo

y energía para dedicarlos a búsquedas más provechosas!
Las personas nos conocen y nos aman tal como somos, con todas nuestras

Personalidades y posibilidades y nos animan a hacer lo mismo,

a no tener miedo a revelar a los demás y a nosotros mismos,

Cómo somos en realidad.

Detente a reflexionar sobre las diferentes personalidades que forman tu ser.

¿Tienes miedo de revelar alguna?
¿Te avergüenzas de ella?

Si es así, tienes que intentar tolerar su existencia sin juzgarlas; no
intentes esconderlas o negarlas, limítate a observar su comportamiento
y a comprobar si tienes algo que decirte.

Reconozco la complejidad y el misterio
de mi naturaleza humana