Un sencillo test te permitirá descubrirlo.

 En el listado que te ofrecemos, señala las cosas que te ocurren durante los últimos días

y extrae tu diagnóstico.

 

Pon una cruz al lado de cada situación con la que te veas identificada:

1.- Tengo dificultades para conciliar el sueño

2.- Me siento impaciente. En el supermercado, en una cafetería, en el banco...

3.- Suelo despertarme por las noches

4.- A menudo, siento la boca seca

5.- Tengo problemas con mi piel (acné, erupciones, granos, urticarias...)

6.- Me siento muy activa. No puedo estarme quieta

7.- Estoy agresiva y con ganas de rabiar. Salto por todo

8.- Siento tensión muscular (espalda, cervicales, hombros...)

9.- Me siento inquieta por nada

10.- Tengo una bola en la garganta

11.- Siento palpitaciones de vez en cuando

12.- Tengo problemas digestivos (gases, diarreas, estreñimiento...)

13.- Me olvido de las cosas

14.- Tengo dificultades para concentrarme

15.- Me siento cansada


Resultados del test

Cuenta las frases a las que has contestado afirmativamente

y comprueba si tu grado de estrés es preocupante:

Una o ninguna: Si te ocurre una o ninguna de las situaciones descritas,

no padeces en absoluto un problema de estrés.

Eres una mujer que sabe tomarse la vida con calma, sin nerviosismos

ni tensiones, lo cual es un seguro para tu salud.

De dos a tres: Si padeces dos o tres de las situaciones

despcritas tienes riesgo de padecer estrés.

Sin embargo, estás a tiempo de remediarlo y corregir la situación.

Más de tres: Si te suceden más de tres de las situaciones descritas,

eres una mujer verdaderamente estresada y tu salud

corre riesgos. Debes adoptar medidas urgentes para erradicarlo.

Fines de semana anti-estrés

Si nuestro test te ha diagnosticado que padeces estrés,

aprovecha los fines de semana (o cógete algún día de vacaciones si puedes)

para quitártelo de encima de una vez por todas.

Si puedes, escápate a la playa, aunque no haga demasiado calor,

estar cerca del mar te ralajará. Pasea por la montaña o

por la ciudad a las horas en las que haya poca gente

(temprano por la mañana o por la noche).

Haz excursiones y organiza comidas con los amigos.

Si puedes haz que te den un buen masaje, practica sexo,

sal de vez en cuando a bailar y haz algo de ejercicio...

Éstas son algunas de las cosas que tienes a tu alcance

para recuperar energías y poder afrontar la temporada con fuerzas y sin nerviosismos.


Fuente: Salud.com