¿Qué es la hiperplasia  suprarrenal congénita?
Es una condición causada por un  defecto  heredado en una de las enzimas de las glándulas suprarrenales. Las   glándulas suprarrenales producen cortisol y aldosterona a partir de la  grasa  llamada colesterol. El proceso para producir cortisol o  aldosterona a partir  del colesterol requiere cinco pasos controlados  por al menos una proteína que  se denomina enzima. La hiperplasia  suprarrenal congénita está provocada por un  fallo en una de estas  enzimas que funciona lentamente. La consecuencia de este  fallo es que  no se produce la cantidad suficiente de cortisol o de aldosterona,  o de  ambas hormonas.
¿Cómo me afecta?
Si no produces la cantidad  suficiente de  aldosterona, entonces tu organismo es incapaz de retener la sal y  la  pierdes a través de la orina. A esta condición se le suele llamar  “perdedora  de sal”. No le sucede a todo el mundo, pero a quien le pasa  puede manifestarse desde  algo leve hasta algo severo.
El cortisol, conocido también  como  hidrocortisona, mantiene el buen funcionamiento de muchos de los  sistemas  del cuerpo, especialmente la circulación, y evita que la  glucosa en sangre sea  demasiado baja entre las comidas. Sin cortisol,  te sentirás cansado/a, sin  ánimo, con falta de apetito y mal de salud.  Tendrás un tensión arterial baja,  te sentirás mareado/a y con falta de  concentración. Tu glucosa en sangre, en  ocasiones, estará baja, por lo  que sentirás síntomas de hipoglucemia, temblores  en las piernas, frío y  sudores, visión borrosa, dolor de cabeza y necesidad de  azúcar. El  cortisol ayuda especialmente a superar el estrés causado por una   enfermedad o herida. Sin la cantidad suficiente de cortisol te sentirás  muy  enfermo/a y necesitarás ingresar en un hospital incluso en caso de  infecciones que  son consideradas leves para otras personas sin  Hiperplasia Suprarrenal  Congénita, por ejemplo, gripe, un resfriado,  etc. 
Cuando los niveles de cortisol  están bajos,  la glándula principal que controla esta hormona, la pituitaria,  libera  una señal a las glándulas suprarrenales para acelerar la producción de   cortisol poniendo en marcha todos los pasos de las enzimas. Sin  embargo, la  persona con hiperplasia suprarrenal congénita tiene una  enzima defectuosa por  lo que la cascada de producción no funciona  correctamente. En este caso, las  suprarrenales trabajan hacia otra ruta  permitiendo que las hormonas se  conviertan en hormonas masculinas;  andrógenos. Estos andrógenos se acumulan en  la sangre y causan muchos  problemas, especialmente en las mujeres. A lo largo  de la vida de estas  personas, si este problema no se soluciona, pueden tener un  aspecto  más varonil, tener más vello y no ser fértiles.
¿Cuáles son los tipos de  hiperplasia suprarrenal congénita?
Hay muchos tipos de hiperplasia  suprarrenal  congénita en el momento del nacimiento o en los niños, y son  tratados  de forma temprana.
También hay otro tipo en que la  enzima  defectuosa es leve y sólo se observa en la pubertad, que es cuando tiene   que trabajar más y su inhabilidad ya es detectable. A este tipo se le  denomina  hiperplasia suprarrenal congénita “no clásica o criptogénica”.  Otros suelen  llamarla hiperplasia suprarrenal congénita en el adulto,  que es precisamente de  lo que hablamos a continuación.
¿Cuáles son los síntomas de  una persona que desarrolla hiperplasia suprarrenal congénita como adulto?
Su desarrollo es mucho menos  severo que en  la niñez, y por lo general, casi no suele venir acompañado de la   condición de “perdedora de sal”. En ocasiones, la producción de cortisol  sólo  se ve reducida levemente y sólo es motivo de preocupación en caso  de estrés,  como en el caso de una herida o enfermedad. No obstante,  las personas que lo  padecen se sienten cansadas y sin ánimos. El  verdadero problema surge de la  sobreproducción del andrógeno. En los  hombres es más difícil de apreciar, pero  las mujeres notan un cambio.  Suelen tener rasgos masculinos:
- Desarrollan más vello en la cara, cuello, pechos y       en otras zonas del cuerpo, especialmente en el abdomen.
 
- La voz se hace más grave.
 
- Aparece acné.
 
- La menstruación puede ser irregular, detenerse o no       desarrollar. 
 
- Infertilidad.
 
¿Cómo se diagnostica la  hiperplasia suprarrenal congénita en la mujer adulta?
El médico analizará el nivel de  andrógenos  en la sangre y verá que hay un número mucho más elevado de lo  esperado  para una mujer. Entonces se hará una analítica para las hormonas   parcialmente procesadas.
Por lo general, la enzima que  suele ser  defectuosa en más del 95% de las personas es la 21-hidroxilasa. En  este  caso, la hormona parcialmente procesada que será analizada en esta  clase  de hiperplasia suprarrenal congénita es la  17-hidroxiprogesterona. Si está  elevada, entonces la persona padece  hiperplasia suprarrenal congénita.
Otra hormona que suele analizarse  en  algunas ocasiones es la ACTH,  cuya sobreproducción por la pituitaria  indica la misma enfermedad.
Para verificar si existe “pérdida  de sal”, se analiza la hormona renina.
En ocasiones, hará falta llevar a  cabo una  prueba de synacthen (prueba de estimulación de ACTH). En esta prueba,   se inyecta ACTH y el médico analiza el aumento en la  17-hidroxiprogesterona.  Suele ser necesario en los casos que no  confirman del todo si la enzima  defectuosa sólo está afectada de forma  leve y es necesario comprobar la sobreproducción  para confirmar el  defecto.
¿Cómo se trata?
El problema en la hiperplasia  suprarrenal  congénita es la baja producción de cortisol. Esto se reemplaza   fácilmente mediante la administración de hidrocortisona. Suele  administrarse en  varias tomas a lo largo del día, según las necesidades  de la persona. 
 En ocasiones, como medicamentos  de reemplazo se utilizan la  prednisolona o la dexametasona, debido a que son de  larga duración y  pueden administrarse una vez al día. Sin embargo, cada persona   reacciona de forma distinta ante los diferentes medicamentos,  especialmente la  dexametasona. Algunas personas ganan peso al tomarla y  prefieren tomar  hidrocortisona. 
 También puede pasar que el  especialista recomiende tomar más  hidrocortisona por la noche que en la mañana.  Esto suele hacerse para  suprimir la producción del andrógeno por la noche, que  es el momento  pico. 
 En algunos pacientes, la pérdida  de sal puede requerir el  tratamiento de reemplazo con la hormona  fludrocortisona, aunque no  suele ser el caso en el adulto con hiperplasia  suprarrenal congénita.
¿Qué hago si desarrollo alguna  enfermedad, un resfriado, gripe…?
En momentos de estrés tales como  una  enfermedad o herida, tienes que doblar la dosis del esteroide hasta que  te  sientas mejor. En el caso de que tengas vómitos, diarrea, fiebre,  etcétera,  será necesario modificar la dosis.
Es importante llevar una chapa de  identificación, así como una tarjeta médica de emergencias.
¿El especialista cómo hará el  seguimiento de mi hiperplasia suprarrenal congénita?
En los adultos se lleva a cabo  mediante un  análisis de la hormona 17-hidroxiprogesterona, conocida como 17OHP.  En  ocasiones, también se comprueban los niveles de andrógenos.
¿Hay alguna prueba genética?
La hiperplasia suprarrenal  congénita es un desorden heredado que transmiten ambos padres a través de los  genes.
Cada célula contiene varias  instrucciones  llamadas genes que se almacenan en la célula como estructuras   denominadas cromosomas. Cada persona tiene 23 pares de cromosomas, uno  de su  padre y otro de su madre. Cada cromosoma contiene miles de genes  que controlan  algunos de los procesos que necesita el cuerpo. En el  tipo de hiperplasia  suprarrenal congénita más común, resulta ser la  enzima 21-hidroxilasa la que  está defectuosa. Esto es debido a un fallo  en sólo un gen, el cromosoma número  6. El paciente tiene un gen  defectuoso en cada uno de los dos cromosomas número  6 heredados de  ambos padres, madre y padre. La razón por la que los padres no  parecen  haber desarrollado esta misma condición es que cada uno de ellos sólo   tiene un gen defectuoso, mientras que el otro gen que está saludable  compensa  el fallo. Por otro lado, la persona que padece la hiperplasia  suprarrenal  congénita tiene ambos genes defectuosos.
En este caso se dice que los  padres son  portadores y que tuvieron 1 de 4 posibilidades de transmitir la   condición a uno de sus hijos.
Los estudios genéticos en la  persona que  padece la hiperplasia suprarrenal congénita y su familia,  identificarán  el gen y permitirán al médico determinar quién de la familia es   portador.
¿Transmitiré mi condición a mi  familia?
Para responder esta pregunta es  necesario comprobar los genes  también de tu pareja. Si tu pareja es portadora,  entonces existe 1 de 4  probabilidades de que uno de vuestros hijos desarrolle  la hiperplasia  suprarrenal congénita. Si tu pareja tiene los genes saludables,  ninguno  de vuestros hijos desarrollará la condición, aunque algunos pueden   llegar a ser portadores.
Adisen dispone de guías para  pacientes y familiares afectados, así como de guías para profesionales. 
 Consultar listado de guías para socios y profesionales.
http://www.adisen.es/hiperplasia%20suprarrenal%20congenita.htm