Muralla Plagada

Te engalanas cuando oyes los poemas
que tu bardo inspirado te recita
y juega tu mirada cuando incita
que se unan tu armonía con los temas.

Ya sea que camines como emblema
de sonrisa en malvón y margarita
o de unción cuando rezas en la ermita
siempre opacas su lustre a las diademas.

No habrás de conocer jamás ocasos
pues tu espíritu es dulce pero duro
y por ello retuerces los escollos

que el destino coloca a cada paso
y fácil los doblega tu conjuro
de muralla plagada por pimpollos.

Juan Carlos Achiary