Hace unas semanas compartí un post acerca de los diferentes tipos de harina de trigo y sus usos. Ahí les comentaba que el usar la harina que es hecha específicamente para algo puede dar mejores resultados. Nuevamente, quisiera reiterar que yo ya he comprobado que en algunos casos sí es súper importante usar la harina especial para dicho postre o pan, aunque otras veces puede dar lo mismo usar la harina regular o harina para todos los usos.

Como sé que muchos de ustedes viven en lugares donde estas harinas de trigo especiales no están disponibles comercialmente (y si lo están, sus costos son muy elevados), quiero enseñarles hoy cómo preparar ustedes mismos una de ellas: la harina para repostería (Cake Flour). 

Cuando descubrí la harina para repostería fue cuando hice el pastel para el primer cumpleaños de mi hija mayor. Cómo no tenía ni idea si me iba a salir la receta si lo hacía con harina regular, decidí comprar una cajita de harina para repostería (Cake Flour) y me fui al súper bien decidida. Cuando vi el precio casi me voy para atrás, pero aún así la compré pues no me quería arriesgar a que no me saliera este pastel que quería que fuera memorable.

Yo que ya he hecho muchísimos pasteles de todo tipo, en seguida me pude percatar de la gran diferencia que hizo utilizar harina para repostería en lugar de harina para todos los usos. El pastel quedo con una consistencia exquisita, esponjoso pero parejito (no tuve que rebanarle ni una migaja a la superficie), y la textura espectacular. Así que a partir de ese momento decidí probar con otras recetas. En algunas noté bastante la diferencia, en otras no tanto y da igual usar la harina regular. En The Sweet Molcajete sólo encontrarán que se pide esta harina de repostería si es extremadamente necesario, pero no quisiera que se quedaran con ganas de preparar algo solamente porque no tienen esta en su alacena ¡Así que aquí les explico cómo pueden hacerla ustedes mimos!

Solo necesitan dos ingredientes que seguro tienen en su alacena y algunos utensilios de cocina. Yo ya no he vuelto a comprar harina de repostería en la tienda, me sale más barato hacerla yo misma y además es lo más fácil en el mundo ¿Listos?

necesitas:

• harina para todos los usos

• fécula de maíz (maizena)

• tazas medidoras

• cucharas medidoras

• batidor de globo

• cernedor de harina

• 2 tazones medianos

procedimiento:

• Primeramente, decidan la cantidad de harina que prepararán. Si solamente preparan para una receta en específico será la cantidad de harina para repostería que pide la receta. Si quieren preparar más para reservarla para otras ocasiones, simplemente preparen más midiendo por tazas.

• Ahora, utilicen este radio para prepararla: por cada taza de harina para todos los usos necesitan 2 cucharadas de fécula de maíz.

• Midan la taza (o tazas) de harina para todos los usos y pónganla en uno de los tazones. Asegúrense de medir la harina correctamente, si tienen dudas de cómo hacerlo, visiten este post.

• Ahora, por cada taza que hayan medido, quítenle dos cucharadas y reemplácenlas con dos cucharadas de fécula de maíz. Es decir, si preparan una taza, quítenle 2 cucharadas a la harina y pónganle 2 cucharadas de fécula de maíz. Si hacen 3 tazas, le quitan 6 cucharadas de harina y le ponen 6 cucharadas de fécula de maíz.

• Con el batidor de globo, mézclalo muy bien, simplemente para que se incorporen la harina y la fécula de maíz.

• Ahora cierne una y otra vez, por lo menos 5 veces. Para esto es el segundo tazón, para que lo ciernan de uno a otro sin problema.

¡Y listo! ¡Ya tienen su propia harina para repostería! Recuerden que esta es buenísima para pasteles de textura fina, muffins, cupcakes, panes esponjosos y galletas. Así que ahora ¡manos a la obra!

Nota: Utilicen un cernedor de harina grande, yo solo utilicé ese pequeñito para la foto; si usan uno igual, les tomará todo el día cerner la harina jaja.