Pàgina principal  |  Contacte  

Correu electrònic:

Contrasenya:

Inscriviu-vos ara!

Heu oblidat la vostra contrasenya?

El poder de la Mujer que Ora
 
Novetats
  Afegeix-te ara
  Plafó de missatges 
  Galeria d’imatges 
 Arxius i documents 
 Enquestes i Tests 
  Llistat de Participants
 Alumbrando Tu Corazòn.... 
 Pide Aqui Tu Oraciòn 
 VARIOS MODELOS DE ORACION 
 Promesas de Dios para Ti.. 
 Recurso La Biblia en Lìnea 
 Devocionales 
 Reflexiones 
 Reflexiones Dr. Josè Luis Gònzalez 
 Mensajes para alentar tu vida 
 Mensajes para la mujer 
 Mensajes Para la Familia 
 Estudios Bìblicos 
 Testimonios 
 Deja Versìculos Bìblicos 
 Sòlo Postales Bìblicas 
 Sòlo Mensajes de Alabanza y Adoracion 
 Poemas Cristianos 
 Hogar-Cocina-Belleza-Tips 
 Sòlo Mùsica Cristiana 
 NUESTRO REGLAMENTO. 
 DECLARACIÓN DE FE 
 HAS PACTO DE AMOR CON EL SEÑOR. 
 CARTA DE UN NIÑO. 
 
 
  Eines
 
Mensajes Para la Familia: Un padre que enseña
Triar un altre plafó de missatges
Tema anterior  Tema següent
Resposta  Missatge 1 de 1 del tema 
De: maritza  (Missatge original) Enviat: 14/06/2009 04:05
 
Un padre que enseña
 
Se puede decir que ser padre es una “oportunidad de invertir”. El líder espiritual del hogar vierte enseñanza y disciplina sobre sus hijos para que maduren y se conviertan en hombres y mujeres conformes al corazón de Dios. Cuando un hijo ve a su padre de rodillas, aprende la importancia de confesar el fracaso, de servir con humildad y de vivir de acuerdo con las normas bíblicas.
Enseñar requiere de instrucción con el razonamiento correcto. Es fácil decir: “Haz lo que te digo, porque yo soy tu padre”. Pero no se engañe pensando que dar órdenes es lo mismo que enseñar. Los hijos necesitan comprender el porqué deben comportarse de cierta manera. El apartar tiempo para explicar las razones que hay detrás de una petición o un castigo, crea un verdadero respeto a la autoridad y desarrolla en el hijo el reconocimiento de lo bueno y de lo malo.
Los hijos llegarán a los límites que les hemos fijado, y muchas veces lo harán deliberadamente sólo para ver nuestra reacción. También actuarán con obediencia y buscarán nuestro apoyo y reconocimiento. Desde muy pequeños debemos enseñarles a esperar premios por su obediencia y consecuencias disciplinarias por su desobediencia. Esto puede hacerse fácilmente hablando de las decisiones que tomaron hombres y mujeres de la Biblia o usando como ejemplo las acciones diarias del hijo: “Ya que arreglaste tu habitación tan pronto como te lo pedí, tendremos tiempo para jugar un poco de baloncesto”.
Enseñar toma tiempo e involucra fidelidad a los principios de santidad. La recompensa bien vale la inversión que se hace en una enseñanza consecuente, y así los hijos no se apartarán de los caminos del Señor. 
Min. En Contacto



Primer  Anterior  Sense resposta  Següent   Darrer  

 
©2024 - Gabitos - Tots els drets reservats