En mis ojos tengo antojo
de tus labios y ganas de ti!
Mi deseo de ti ya no cabe
en mi alma, ni en mi cuerpo,
ni en mi sentir, pero mi corazón
caprichoso se enamoró de vos,
de tus letras profanas,
irreverentes, sacrílegas a la
hora de amarnos.
Con tus ojos melancólicos
aprendí a soñarte y son mis
besos los que te necesitan
hoy dime; amor hermoso
¿Tú vienes o voy?
Pues soñé que te besaba
y ahora traigo un sabor
a ternura pues de la soledad
de tu risa; tengo ganas
de amarte tu eliges si lo
hago a besos deliciosos,
a versos llenos de pasión,
o desde el punto "G" del alma
En tus ojos miro deseos
incontenibles donde un nosotros
se convierte en poema,
en una caricia y cada verso en
una flor, porque escribirte es la
delicia, de hacerte el amor en letras.
¡Ahh en mis ojos tengo antojo
de tus labios y ganas de ti.!
Sandra Mendoza Amante de la poesía
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