Ya no fue Sabio cuando el Ignorante decidio que ya no fuera batallando con fiereza a la Oscuridad sacandola de las entrañas sin piedad. Nadie llego y regreso sin ser Nadie, le colocaron la corona de la nada y siguio siendo el Rey de la ignorancia caminando libre bajo el Sol, danzando al ritmo del Viento, Sordo y Ciego al ruido y al oro ilusorio de la Bestia Mundana.
Marita
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