Y el Señor me librará de toda obra mala, y me preservará para su reino celestial. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén. - 2 Timoteo 4:18

¿Te sientes seguro cuando sales de tu casa? Cada vez más la violencia es parte de la rutina diaria de nuestras vidas, y las inversiones en seguridad siguen en constante aumento.

En tu vida espiritual, ¿estás invirtiendo en seguridad? Para protegerte de la muerte eterna, Dios invirtió lo más valioso que tenía: la vida de Jesucristo, su único hijo. Gracias a la muerte de Cristo en la cruz podemos estar seguros que nuestros pecados son perdonados, y que nos aguarda la vida eterna. Pero no sólo eso. Porque a través de la cruz de su Hijo Dios también nos cuida y protege cada día. Por eso, recuerda pedir la protección de Dios todos los días.

ORACIÓN: Gracias, Señor Dios, porque me proteges diariamente. Líbrame de todo peligro, especialmente de los peligros que enfrento en mi vida espiritual, y ayúdame a tener sed de tu Palabra, pues es en ella que encuentro la seguridad que necesito. En Jesucristo. Amén.

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