En la suave medianoche del escribidor
Una luna despejado brilló´
A través de nuestra fantasía
Y los sueños bañados en caricias
Me duermo en la reflexión silenciosa;
El verso suave agitó mi amor
Me dijo que cielo era un destello,
Y la luna durmiente, desvelo
Sólo necesité sus fantasías
Para alimentar estos pensamientos;
Así y todo susurró, diciendo,
"¡Cuán oscuros serían los sueños!"
"Las letras de tristezas en mi murmullo
Suenan como en un sueño,
Y de sus incontables voces es dueño
Un instinto que parece arrullo".
Ve, apacible murmurante,
Tu hermosa melodía es única:
Pero no pienses que su música
Tiene el poder de alcanzar mi mente."
"Sueña con la flor perfumada,
La Palabra tierna del escribidor
Y deja mis sentimientos humanos
En su propio cauce inquieto."
oye mi amor de ausencia
Su beso se entibió cálidamente:
"¡Musa Ven!" suspiró dulcemente;
"Seré yo contra tu caricia
"¿No fuimos amigos en la infancia?
¿No te he amado hace mucho tiempo?
Mientras tú, la noche solemne,
Mi canto despertabas con tu silencio."
"Que cuando repose tu corazón
Bajo la fría lápida de cemento,
Yo tendré tiempo para el lamento,
Y tú para estar sola y o sin razón.