Cuba, 27 ene. 2004 (AP).-
Pese a que el comercio entre Cuba y Estados Unidos comenzó hace sólo dos años, la vecina nación norteamericana se convirtió en el séptimo socio de la isla, dijeron fuentes oficiales.
Según el ministro del Comercio Exterior, Raúl de la Nuez, el intercambio total de este país caribeño con el mundo creció en el 2003 en un 13,2% con relación al año precedente.
"La lista de las diez principales naciones que concentran el 72% del intercambio la encabezan Venezuela, España, China, Canadá, Países Bajos, Italia, Estados Unidos, México, Francia y Rusia", dijo el funcionario en una entrevista con el semanario Opciones.
En el 2003 se realizaron gestiones vinculadas a la compra de productos norteamericanos por un valor de 343,9 millones de dólares en más de 300 renglones, destacó De la Nuez.
Aunque Washington mantiene fuertes sanciones contra la isla, a finales del 2000 el Congreso estadounidense votó a favor de una enmienda para eliminar del embargo a los alimentos y las medicinas.
Los primeros embarques, especialmente de granos y pollos congelados, llegaron a la isla en diciembre del 2001.
Aunque Estados Unidos ahora permite estas ventas a la isla, se le exige a Cuba pagos al contado y no se aceptan las exportaciones de mercancías cubanas a Estados Unidos.
Los alimentos son un mercado potencial en la isla de unos 1.400 millones de dólares.
Paralelamente, el ministro informó que las importaciones aumentaron en un 11,6% y las exportaciones en un 18% en el 2003, especialmente en rubros como el níquel, cítricos frescos y productos biotecnológicos.
"Para la economía de Cuba las relaciones externas y en específico el comercio exterior, ejercen un fuerte y determinante impacto, debido a que la economía cubana es abierta y mantiene una alta dependencia", comentó el funcionario.