Hola a
todos:
Debido a el
arribo de nuevos participantes a esta lista y a que
detecto cierta intolerancia y
opiniones preconcebidas, quiero dejar claro parte
de mis posiciones políticas
Estoy
totalmente contra el embargo (impuesto por EEUU) por
considerarlo ineficaz e inhumano, porque es usado por la
dictadura del PCC para justificar sus errores o fracasos
y porque creo que niguna potencia tiene el
derecho a imponernos sus criterios, menos aún
intentar doblegarnos con medidas que
contribuyen a nuestro deterioro económico y
social.
A pesar de
la incomprensión de muchos y la incredulidad de otros,
yo con orgullo, me declaro socialista, digo esto porque
tengo una profunda preocupación por las clases menos
privilegiadas, por los humildes, los alienados y porque
que si bien reconozco que el progreso de la humanidad es
impresindible, tengo tambien la certeza de que nada
podremos lograr sin incluirnos todos.
Creo que la
sociedad, no el estado o la oligarquia capitalista debe
asegurarles a todos los ciudadanos un nivel de vida
decoroso, la educación de sus hijos y su salud,
superditando y poniendo los medios de produccion en
función de la sociedad y no permitir que esta sea
controlada o explotada a favor de un determinado partido
político (aunque se autodetermine nuestra vanguardia),
clase explotadora o caudillo
populista.
El problema
viene en la definición de este término, el
totalitarismo, la intolerancia y la exclusión no son, ni
pueden ser nunca, consecuentes con la ideología de
izquierdas, el pueblo no necesita vanguardia, el pueblo
no necesita un figurín diciendole que debe o no hacer,
ni siquiera un ser supremo o un estado que regule su
moral, al pueblo hay que quitarle la bota y dejar, que
con sus propios recursos, encuentre su sendero hacia un
futuro mejor.
Creo en
Cuba, en la capacidad de nuestro pueblo a crear un
futuro digno y a pesar de nuestra cercanía geográfica,
sabremos hacernos respetar y no caer nunca bajo el yugo
del imperialismo yankee o cualquier otro que pueda
surgir en el futuro.
Como medida
primera de cualquier persona que gobierne la era
post-castro, se debe abolir la pena de muerte, la ley de
peligrocidad, el articulo #88 de la actual constitución
cubana y borrar de codigo penal todo rastro de ley que
prohíba o condene a cualquier
ciudadano cubano a expresarse libremente, participar en
cualquier actividad o agruparse en alguna organización
política, religiosa o sindical, reconocer el derecho del
obrero a la huelga, y liberar los medio de
comunicación.
Después nos
tocaría lograr que nuestro pueblo entienda que se puede
disentir sin tener que agredir o reprimir a otro cubano
porque piense diferente a nosotros, o sea, deshacer el
odio sembrado de ambos lados durante 42 años, unificar a
nuestro pueblo, seguros ahora y por fin, que el futuro
de Cuba está en nuestras manos.
A
continuación, utilizando si se quiere, instituciones
existentes pero liberalizadas como el âPoder Popularâ ,
comenzar un gran debate nacional en busca de soluciones
socio-economicas, para que habitando el tiempo que nos
tocó vivir, lograr tener una idea clara de la tarea por
hacer y como resolver nuestros problemas; entonces
podremos elegir una asamblea constituyente para plasmar
un compromiso nacional de leyes por las cuales nos
regiremos, previa aprobación del pueblo. Todo esto en un
plazo de tiempo no determinado pero sufciente para su
amplia difusión y asegurando la participación
de pueblo en su totalidad, sin importar credo, cuna,
raza o afiliaciones políticas pasadas o
futuras.
Les ruego
que si se me olvidó algo, o no quedó claro, me pregunten
antes de hacer asumción alguna, tambien quiero pedirles
disculpas por cualquier error ortográfico o de
redacción, mi castellano no es de los mejores y son las
3 de la mañana cuando termino después de llegar a casa a
las 10 de la noche de un viernes
miserable.
Omar
Comas
Bueno recordé
algo:
Arriba
expresé lo que consideraría la sociedad ideal, pero
recordando que Bakunin dijo aquello de: “el colectivismo
solo se le puede imponer a los esclavos”,
digo: podría vivir en una sociedad
con varias alternativas de modelos socio-económico, algo
así como en Israel, iniciativa publica, colectiva
(Kibutz), otra donde los obreros siendo dueños de sus
fábricas, compitan entre sí y por qué no, iniciativa
privada, siempre y cuando los objetivos sean
salvaguardar la justicia social, la soberanía nacional y
la reduccion del estado hasta eliminarlo o deje de tener
sentido