Una tragedia anunciada.

Los movimientos sociales aglutinados en sindicatos, como el caso de andes 21 de junio, sufrieron una represión desmedida dado que se quedaron “huérfanos”. Sí tal vez la frase no sea muy apropiada, para explicar el tema, pero fue así, creo que así lo sintieron los más comprometido con dichos movimientos.

Huérfanos en el sentido que los movimientos sociales de “choque” subieron el nivel de su lucha, es decir pasaron decididamente a la lucha armada. Aquellos movimientos altamente segregados, por cierto, en diferentes grupos; BPR, LP28, El FAPU y otros, se comenzaron a armar clandestinamente en una lucha a un principio urbana.

Se puede decir que aún en los años 1979 y a principios del 80 seguían como comandos urbanos, relativamente hablando. Pero al llegar la unidad los grupos de estructuran. Y se forma el ERP y la RN esta última en discrepancia con el máximo dirigente del ERP por haber mandado a matar a Roque Daltón.

El PRTC y la FPL formaron gradualmente cada una sus viíllas de comunicación para preparar la subida al “las montañas”. El PCS por su parte aún creía en la vía política pacifica para El Salvador. Pero luego en los 80 el asesinato de Monseñor y la gran represión social  que le siguió en su sepelio, el PCS decidió tomar también las armas y lo hizo como FAL. De modo que: la FPL, el ERP, la RN, el PRTC y la FAL fueron las 5 organizaciones que llegaron a forma o componer el FMLN.

A mediado de los 80 y a principios del 81 se consolida el FMLN como un frente unido en lo militar aunque en lo ideológico habían ciertas discrepancias.

Y fue en este contexto que el gobierno salvadoreño después de la ofensiva que laza el FMLN (la primera) en el 81, reactiva con gran fuerza sus escuadrones de la muerte. Y fue también bajo esta estado de cosas cómo los sindicatos y otros movimientos sociales se quedaron “huérfanos”.

Según testimonio de sobrevivientes a esas masacres, había en ellos una desesperada tensión. 

Eran más o menos las 7 de la mañana un día sábado. MI vecina a la cual pretendía era muy amiga de mi hermana menor (Hoy importante bióloga en EE.UU.). Ellos tenían, (los parientes de mi vecina) familiares en el pueblo de Chalchupa, que queda a unos 20 kilómetros de Santa Ana.

Mi padre no estaba en casa y mi vecina y su madre estaban tacando la puerta. ¿Que hacemos?, le digo a mi hermana, nervios por aquella chica que me quitaba hasta la respiración.  Nada, me dice muy fría y serena,  como de costumbre. Y es que decían que yo tenía el temperamento de mi madre y mi hermana el de mi padre. Bueno me disculpe por la falta de “trasporte” personal, a la disposición de ellos, pero me ofrecí, como todo un caballera “interesado” a pagarles los pasajes.

Abordamos pues el bus urbano (la 51) que nos llevaría hasta la terminal de buses “ínter departamentales” Me sentía como en al aire (haciendo amor de la nada) jajaj No tenia valor de declararle nada a mi vecina; sabia que estaban de luto y hablar de amor de novios no era prudente. NO sé si era cobardía, al verla tan lejos, como una estrella, o miedo al rechazo o tal vez prudencia.  Tal vez era normal pues aún estaba en los años de mi adolescencia.

Me senté justo a ella, en el bus. Mi hermana con mi “futura suegra”, un asiento delante de nosotros. Me sentía feliz, el tiempo no pasaba o pasaba con demasiada rapidez; de todo modos en aquel momento hubiese querido detener el tiempo. ¿Cómo volver el tiempo? ¿Como dominar el tiempo?

El Bus comenzó su marcha. Charlábamos amenamente. Me sentía todo un “héroe” pues a pesar de su dolor, se sonreía con migo. Hablamos de música, de literatura, de los últimos “chambres” burgueses etc.

De pronto cerca de la ciudad de Chalchuapa, ciudad que por cierto fuese visitada por Ernesto Che Guevara, se veía un grupo de gente. Parecían unos curiosos. El chofer del Bus bajo la velocidad. En efecto eran dos cadáveres de mujeres, que yacían en la cuneta de la calzada.

AL ver aquel horror la chica, mi vecina, se quedo pálida, era notable que su herida se había vuelto a desangrar.  NO cruzamos ni media palabra más, pues pensé prudente callar. Mi madre me había enseñado sólo a hablar cuando fuese necesario y en el tiempo adecuado, además ser buen hablador implica ser buen escuchador.  Llegamos a la casa de la familia de “mi” chica. NO había nadie. La casa parecía bacía. Tocamos el timbre existentemente, pero nada.

De pronto vimos una vecina que nos dijo que no habían visto toda la tarde a aquella familia. Frente a la casa una señora se ponía todos lo días a vender mangos “tiernos” Eran ya como los 10 de la mañana. En aquellos días había Ley Marcial y estado de sitio.

El estado de sitio implicaba, no reuniones de más de tres personas, y la ley Marcial que a las 7 de la noche hasta las 6 de la mañana nadie podía salir de sus casas. Los comentarios de los vecinos de aquella amargada señora no eran alentadores. La chica, mi pretendida, se le ocurrió ir a investigar con un vecino conocido de su tía, es decir, los familiares a los cuales pretendíamos visitar.

No sé nada dijo, pero dicen que hay varios cadáveres en a la orilla de la calle dijo.  Me “futura suegra” según mi fantasía juvenil, decidió ir a ver de cerca los cadáveres ya antes vistos. Habían pasado casi tres horas, que habíamos pasado en el Bus frente aquel drama humano. De modo que si aquellos cuerpos ya no estaban ahí era muy posible que no se tratara de la familia de mi vecina. Pensaba yo.

Tomamos un taxi, pues había como 10 kilometres. Llagamos al lugar. El taxista paró donde le indicamos. Nos dirigimos a donde habíamos visto los cuerpos. En efecto los cuerpos todavía yacían en a la orilla de la calle. 

Aun momento no se podían ver los rostros de los allí yacidos, pues estaban con las caras metidas en unas “bolsas” o algo parecido. Se sabían que eran hembras por sus genitales, y además estaban totalmente desnudas.

Aquellos cuerpos de una señora de unos 45 años y una niña de unos 15 o 16 años tenían huellas de haber sido  brutalmente torturadas y violadas.  En el cadáver de la señora había una estaca metida (introducida) por la vulva. Y en el de la joven en el recto (o el ano). Era horrazo ver aquello. No se sabia si las estacas se las habían introducido aún con vida o ya muertas. Las manos sin uñas, y el resto del cuerpo pinchado supuestamente con alfileres.

Las cabezas estaban opuestas. Es decir, después vimos que los cuerpos estaban decapitados. La cabeza de la joven en el cuerpo de la madre y viceversa. Realmente quienes cometieron dicho crímenes eran enfermos o muy bien entrenado para matar.

Al ver los cadáveres se reconocieron. Uno era el de la hermana de mi “suegra” (vecina) y el otro el de su sobrina. Del esposo de la señora asesinada y padre de la nena, nada se sabía.

Sobre los cadáveres y entre lo sacos una NOTA (La mano BLANCA) La mano Blanca fue un escudaron de la muerte que asesino gente en la zona occidental del Salvador y fundado por el Coronel Vides Casanova hoy residente en Miami.   

La familia de aquella chica tan linda, no había salido de una tragedia y ay, ya estaban en otra igual o peor

¿Por qué? Yo no lo sabía, sola sabía que eran las dos hermanas una maestra y la otra profesora.

Señores CUBANOS, ENEMIGOS DE LA CUBA SOCIALISTA ¿Esto es lo que Ustedes quieren para CUBA? A esto Ustedes le llaman “vida “ ¡Claro, no Vida de los ricos y muerte para los pobres. Pero claro, no está es la famosa “libertad” para ustedes.