Incontenible la nueva oleada de balseros
WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
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ROBERTO KOLTUN / El Nuevo Herald
TIRITANDO DE frío permanecieron los "balseros'' que arribaron ayer a las 6:30 a.m. a Key Biscayne. En la foto Marilú Rodríguez y Leidy Martínez sonríen felices de acabar su travesía.
El flujo migratorio de cubanos se ha disparado durante la primera quincena del 2008 y las cifras preliminares parecen anunciar otro año de récords para los viajes ilegales desde la isla.
En lo que va de año el Servicio Guardacostas ha interceptado 203 cubanos en el estrecho de la Florida, mientras que unos 70 han logrado arribar a tierra firme.
Las cifras de la Patrulla Fronteriza sitúan en 1,012 el número de balseros que arribaron entre octubre y diciembre del 2007, primer trimestre del actual año fiscal. En ese mismo período fueron interceptados en el mar unos 800 cubanos.
A ese ritmo, con los meses de primavera y verano por delante, las estadísticas pudieran escalar hasta los niveles más altos de la década.
''Indudablemente el flujo [de cubanos] es alto para esta fecha, pero no podemos decir que haya un incremento drástico con relación a enero del 2007'', dijo anoche el subcomandante Cristopher O'Neill, portavoz del Servicio Guardacostas.
``Nuestra preocupación fundamental sigue siendo el costo de vidas humanas como consecuencia de la acción indiscriminada de contrabandistas, que repletan los botes sin tener suficientes chalecos salvavidas para todos los pasajeros''.
El más reciente caso de tráfico humano dejó en la madrugada de ayer a 14 inmigrantes cubanos --nueve hombres y cinco mujeres-- en un punto cercano al viaducto Rickenbacker, en Key Biscayne.
Los integrantes del grupo aseguran que zarparon la noche del lunes desde la playa de Guanabo, en el este de La Habana, a bordo de una embarcación rústica, y que luego fueron recogidos en altamar por una lancha rápida que los trajo hasta las costas de Miami.
Pero las autoridades dicen que desde hace mucho tiempo no tienen indicios de balsas atravesando el estrecho de la Florida.
Todos estaban en buenas condiciones físicas, aunque tiritando de frío por las bajas temperaturas que cubrieron el sur del estado durante el amanecer de ayer.
El arribo se produjo cerca de las 6:30 a.m. y ciclistas que se ejercitan por la zona les dieron la bienvenida con gritos de ''Bienvenidos a Estados Unidos'' y ``¡Viva Cuba!''
La policía escoltó al grupo hasta que fue puesto en manos de la Patrulla Fronteriza, cerca de las 8:30 a.m.
La escena en el viaducto Rickenbacker se repite con frecuencia. Algunos recién llegados arriban por otros puntos costeros, pero los familiares los recogen y traen hasta Key Biscayne para facilitarles ''el hallazgo'' a las autoridades y viabilizar los trámites de inmigración.
''Este tipo de flujo continuo va a prevalecer en los próximos meses, porque hay una total desilusión sobre el futuro de Cuba y los cubanos no quieren seguir esperando por un cambio que nunca llega'', opinó Jaime Suchlicki, director del Centro de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos (ICCAS) de la Universidad de Miami.
Las cifras de inmigración marítima de Cuba durante el 2007 fueron las más elevadas desde la crisis de los balseros en 1994: 3,238 llegaron a tierra y 3,917 fueron capturados en el mar y devueltos a la isla.
''Necesitamos que la comunidad se involucre en la batalla contra el contrabando humano'', enfatizó el subcomandante O'Neill. ``Cualquier información o denuncia puede ayudarnos a salvar vidas''.