Cuando
Fidel Castro derrocó a la dictadura de Fulgencio Batista en Cuba muchos
creímos que aquel hombre sería un buen conductor del pueblo cubano,
pero la historia demuestra que todo ha sido un fraude gigantesco. Con
sólo recordar que los hermanos Castro usurpan el poder desde hace 50
años, está garantizada la corrupción al más alto nivel del Estado, los
asesinatos, las torturas y todo tipo de violaciones de los derechos
humanos y de las libertades fundamentales de los cubanos.
Ninguno de los dirigentes castristas ha vivido nunca con austeridad y
moderación. Desde el principio, en el año 1959, residieron en las
mansiones de los capitalistas que se fueron del país, adueñándose de
todas sus riquezas en beneficio propio sin un ápice de pudor,
constituyéndose, cada vez con más fuerza, en una clase privilegiada y
de élite que dista mucho de representar al socialismo que ellos
teóricamente esgrimen como filosofía política.
José Martí
escribió: “De hombres que no pueden vivir por sí, sino apegados a un
caudillo que los favorece, usa y mal usa no se hacen pueblos
respetables y "duraderos”.
Puedo afirmar que a Fidel Castro nunca le ha interesado el bienestar del pueblo cubano por varias razones:
1.-Desde 1962 existe la libreta para racionar los
alimentos, cada año con más precariedad, y todos los intentos del
pueblo por mantener el mercado libre campesino que garantice su alimen-
tación han sido inútiles, porque el régimen hace desaparecer esos
mercados cuando van floreciendo por miedo a que la propiedad privada
demuestre que es más útil que la estatal. Y lo peor de todo es que el
régimen abrió las tiendas shopping en las que se venden los productos
en dólares y euros, mientras que el salario de los trabajadores es en
pesos cubanos.
-2.-Desde hace 50 años Fidel Castro mantiene una
brutal represión contra los disidentes y opositores sólo por pensar
diferente a él, acusándolos de “grupúsculos traidores a la revolución”,
sin aceptar nunca que esas personas también forman parte del pueblo
cubano, con los mismos deberes y derechos. Las más de 500 cárceles que
hay en el país están llenas de presos políticos maltratados,
humillados, mal alimentados e insanos. El número de cubanos asesinados
por el castrismo sobrepasa la cifra de 20 mil.
3.-Los tres millones de exiliados cubanos, la
cuarta parte de nuestro pueblo, están dispersos por el mundo en una
diáspora incontrolable que ha provocado una dolorosa y cruenta división
de nuestras familias. La mayoría de esos exiliados son trabajadores
humildes y ex revolucionarios, muchos de ellos de la raza negra, que
debían estar en Cuba si las “bondades del socialismo” fueran ciertas,
ya que el régimen castrista se jacta de propiciar la igualdad racial.
En el éxodo de los balseros de 1994 más de cuatro mil personas murieron
ahogadas en el Estrecho de la Florida y asesinadas por las tropas
guardafronteras cubanas, quienes las ametrallaron en las costas y las
hundieron en el mar al lanzar sacos de arena sobre sus endebles balsas.
Recuerdo nuevamente a José Martí que dijo: “Cuando un pueblo emigra es
porque el gobernante sobra”.
4.-Fidel Castro nunca ha permitido que los cubanos
inviertan en la economía del país para no fomentar la propiedad
privada. El dictador y sus secuaces son los únicos dueños de Cuba, de
sus tierras, de sus playas, de sus riquezas naturales y del destino de
cada ciudadano, quienes tienen que repetir con frecuencia, aunque ya
muchos no lo sientan: ¡Viva Fidel! ¡Viva el partido! ¡Viva la
revolución!. Sin embargo, el régimen castrista permite cierta inversión
extranjera selectiva siempre favorable a sus intereses.
5.-A pesar de que la educación y la salud pública
han sido los pilares propagandísticos del régimen, desde hace más de 15
años se han deteriorado muchísimo, exponiendo a los ciudadanos a una
mala atención de sus enfermedades, quienes se ven obligados a pedir los
medicamentos a sus familiares y amigos que viven en el extranjero. Es
vergonzoso contemplar el estado de precariedad y abandono de muchos
centros educacionales y hospitalarios en Cuba.
6.-Los cubanos viven prisioneros en la gran cárcel
en que se ha convertido la isla, marginados y hostigados por el aparato
represivo del régimen. Les está prohibido viajar a otros países; no
pue-den escuchar la música ni leer los libros que quieran; no pueden
asociarse libremente en organizaciones políticas, religiosas ni
culturales; tienen restringido y controlado el uso de Internet; no
pueden votar por otros candidatos electos que no sean los del partido
comunista, ya que los demás grupos y partidos están en la
clandestinidad, considerados como “grupúsculos de delincuentes y
antisociales”.
7.-Fidel Castro ha dicho con desfachatez que las
prostitutas cubanas son las de mayor nivel cultural en el mundo,
traduciéndose esto en que muchas mujeres que estudiaron una carrera se
ven obligadas a prostituirse para resolver los acuciantes problemas de
la subsistencia. En 2008 la TV española emitió un documental que
denuncia la prostitución de niñas entre 13 y 16 años en Cu-ba, así como
a sus proxenetas, mientras que el gobierno de los Castro no hace nada
para combatir esta corrupción e inmoralidad.
8.-Desde que Fidel Castro tomó el poder en Cuba por
la fuerza nos inculcaron la ideología marxista del bloque comunista del
Este de Europa, así como la de los movimientos guerrilleros que el
propio Castro se encargó de exportar a muchos países de Asia, Africa y
América Latina, incluyendo el régimen sanguinario de Pol Pot en
Cambodia, actualmente enjuiciado por genocidio contra su pueblo, y que
Fidel Castro exaltaba como un magnífico revolucionario. La historia
demostró que el comunismo fue un fracaso porque sus economías estaban
carcomidas y sus ideolo-gías obsoletas, por lo que las viejas
dictaduras se desmoronaron estrepitosamente. Al conocer ta-les
descalabros en 1989, el régimen castrista mantuvo un silencio sepulcral
durante seis meses para recuperarse del golpe. Después Castro se
dirigió al pueblo cubano con su verborrea envolvente y trató de
fundamentar una serie de razones ilógicas e incoherentes para continuar
imponiendo el “Sociolismo” en Cuba, con el único objetivo de mantenerse
en el poder y de preservar sus privilegios.
Ahora bien, ¿cómo es posible que la izquierda española aplauda a
un régimen tan oprobioso y denigrante como el de Fidel Castro?. ¿Es que
ya se olvidaron de lo que es una dictadura?. Si lucharon en contra del
franquismo durante 39 años, ¿por qué no entienden que los cubanos
luchemos por quitarnos de encima las calamidades de la dictadura
castrista?. ¿O es que la izquierda española cree que es mejor una
dictadura de izquierda que una de derecha?. Francisco Franco y Fidel
Castro son igualmente responsables de miles de asesinatos, torturas,
desapariciones, perse-cuciones, encarcelamientos y violaciones de todo
tipo en contra de los españoles y de los cubanos. ¿O es que no
recuerdan que Castro no asistió a la Cumbre Iberoamericana de 2005 en
Salamanca?. No asistió y dejó embarcado a Chávez porque está acusado de
genocidio y de crímenes de lesa humanidad ante la justicia
internacional, y tuvo un miedo atroz a ser detenido como lo fue el
dictador chileno Augusto Pinochet.
Hace tres años Fidel
Castro dictó la pena de muerte por fusilamiento contra tres jóvenes
cubanos de la raza negra por robar una embarcación para huir hacia
Estados Unidos, sanción que se cumplió sin temblarle la mano al
dictador, como ha firmado muchas otras ejecuciones contra sus oponentes
a lo largo de estos años. En esa ocasión, y es justo reconocerlo, tuve
la satisfacción de escuchar las protestas de varios españoles de
izquierda por aquella infamia, incluyendo al pre-mio nobel de
literatura, el portugués José Saramago. Si la izquierda española
protestó por aquel crimen, ¿por qué ha tolerado la arbitraria detención
de 75 cubanos durante la primavera negra de 2003?. ¿O es que no saben
que esas personas fueron condenadas, sin las garantías de juicios
justos, a penas de cárcel entre 10 y 30 años sólo por disentir con el
régimen?. La dictadura se ha visto obligada a liberar a varios de esos
presos por padecer de enfermedades y lesiones físicas mal tratadas en
las cárceles, quienes quedaron con secuelas invalidantes irreversibles.
Ejemplos de haber sufrido estas atrocidades lo son Oscar Elías Biscet,
Jorge Luis García Pérez, “Antúnez”, Raúl Rivero y Omar Pernet entre
otros muchos.
El día 14 de febrero de 2009, en el periódico digital
“Salamanca24horas.com”, apareció la convocatoria que lanzamos los
miembros del Movimiento Popular Cubano para realizar una manifestación
en Salamanca con el objetivo de denunciar a la dictadura castrista por
todo lo expuesto anteriormente. Ese mismo día y hasta el 20 de febrero,
en el citado periódico digital, aparecieron también algunas opiniones
de grupos procastristas que pretenden ridiculizar nuestra
manifestación, tales como:
-“Los proyanquis que se manifiesten en su casa, que no vengan a Salamanca”
-“Cuando
la cumbre (se refieren a la Iberoamericana de 2005) esta gente sólo
llegó a juntar a 100 personas, mientras el movimiento de solidaridad
con Cuba congregó a 17 mil personas”.
-“De nuevo esperamos ver el ridículo más absoluto de los cuatro niños pijos y ricos que se auto-denominan Exilio”.
-“Venir
a Salamanca y sereis recibidos como os mereceis. Hasta la victoria
siempre. Viva Cuba socialista. Patria o muerte, venceremos”.
Señores, claramente estas expresiones de
agresividad y de provocación emanan de grupos recalcitrantes de la
extrema izquierda que se alían con la nefasta dictadura castrista.
-En primer lugar, el Exilio cubano, con más de
tres millones de personas, está formado principalmente por obreros,
profesionales e intelectuales, con mucha gente pobre y humilde como
puedeverse claramente en el documental “Balseros” filmado por la TV
española, y como pudimos comprobar en la Base Naval de Guantánamo en
1994.
-En segundo lugar, independientemente de las
cifras absolutas de participantes, en la cumbre de 2005 casi el 100% de
los anticastristas éramos cubanos, mientras que entre los procastristas
brillaron por su ausencia.
-En tercer lugar, nosotros nunca hemos sido proyanquis.
-En cuarto lugar, las consignas “Patria o
muerte” y “Socialismo o muerte” son de un claro corte fascista, porque
han valido para respaldar los crímenes y fusilamientos contra los
cubanos que se atrevieron, desde el propio año 1959 y hasta hoy, a
enfrentar al dictador.
-En quinto lugar, todo aquel que apoye a la
dictadura de los Castro se debe sentir avergonzado por su complicidad
con unos asesinos y terroristas internacionales. Y recuerden, amigos,
que Fidel Castro es la antítesis del socialismo.
“Con un poco de luz en la frente no se puede vivir donde mandan tiranos”
José Martí