Alzar los ojos ante los retos es la forma
correcta de enfrentarlos. Muchas veces,
cuando una persona se enfrenta con desafíos,
la tendencia es tratar de huir o tratar que otra
persona lo asuma. Eso hiere la misma dignidad
del ser humano, pues el reto que vino es
meramente una prueba para hacer con que
uno progrese y sea mejor. Entonces, cada vez
que te veas frente a frente con un problema,
míralo en los ojos y charla con él. Descubre la
razón por la cual el problema vino hacia ti, trata
de encontrar la forma correcta de abordarlo y
actúa: a veces, hay que enfrentar y luchar;
otras veces, hay que simplemente
evitarlo, o bien volar sobre él.
Positivo