PO 1157 2/12/2010 Mariano Ferreyra. Un crimen contra la clase obrera

Pedraza y Fernández deben ir presos

 

Ver detalles - Bajar imagen]" target="_blank" href="http://po.org.ar/files/images/po1157-burocracia-ferroviaria-en-el-puente.jpg" target="_blank">La fiscal de la causa que investiga el homicidio de Mariano y las heridas sufridas por Elsa, Nelson, Ariel y otros compañeros, a manos de la patota de la burocracia sindical, solicitó el llamado a indagatoria de José Pedraza y Juan Carlos Fernández, los máximos capitostes de la Unión Ferroviaria.
De la prueba acumulada en la investigación, se desprende que el "jefe operativo" de la patota en el escenario de los hechos, el delegado Pablo Díaz, mantenía una comunicación permanente con Fernández. Pedraza, a su vez, aseguró que se "mantenía informado" por Fernández de lo que ocurría en las inmediaciones, según su propio testimonio al día siguiente de ocurrido el crimen.
Si a Díaz se le atribuye un "papel preponderante en la conformación y organización" de la patota, el cual se desprende del "rol que cumple en el cuadro jerárquico de la organización sindical", es imposible pensar que su actuación estuviera al margen de una decisión que involucrara a Pedraza y Fernández.
Pedraza admite haber advertido un día antes al gobierno del corte impulsado por los ferroviarios tercerizados. Durante las semanas previas a la emboscada, la burocracia mantuvo una campaña bajo la consigna "los trabajadores ferroviarios no cortamos las vías" y anticipó que la UF haría "lo que no hace la policía" en caso de que se produjera un nuevo piquete. En un sentido similar, el subsecretario de transporte ferroviario, Antonio Luna, había pretendido intimidar a los tercerizados en una audiencia en la que estuvo presente el abogado Gustavo Mendieta, a los que lanzó la frase "si cortan las vías, háganse cargo de las consecuencias". A las pocas horas del asesinato de Mariano, Pedraza continuaba la farsa afirmando que "los trabajadores ferroviarios impidieron el corte de vías en defensa de sus fuentes laborales" (Télam, 20/10). Las huellas dactilares de Pedraza y Fernández están impresas con sangre en cada foja del expediente.

La trama
La burocracia es parte interesada del régimen de las tercerizaciones. Ella misma es patrona de obreros, a los cuales explota por salarios equivalentes al 30-40% de lo que cobra un trabajador de planta. Varias de las tercerizadas del Roca figuran a nombre de connotados burócratas o de sus familiares. Tal el grado de impunidad con el que se conducen que en varios casos desecharon el uso de testaferros.
La Ugofe, creada luego de la rescisión del contrato con el vaciador serial Sergio Taselli tras una rebelión de usuarios en Constitución, es un negociado compartido por grupos capitalistas como Roggio, el Estado y los burócratas de la UF. Las "relaciones carnales" entre empresarios, funcionarios y burócratas constituyen el telón de fondo del crimen de Mariano y de la lucha de los ferroviarios tercerizados por su pase a planta.
En el marco de las investigaciones por los fraudes y cometas gestionadas por el ex secretario de Transporte Ricardo Jaime, surge que la encargada de disponer el uso de la chatarra importada de España como "material rodante" es Sofse, una empresa estatal dirigida por el apoderado legal de la UF, Juan Araya, quien aparece involucrado en las escuchas telefónicas como responsable de contratar a los abogados defensores de los patoteros que mataron a Mariano. "Sofse -por instrucción del secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi- es la que está negociando con la privada Ferrocentral la operación de los trenes Talgo a Mar del Plata" (Clarín, 29/11). Por donde se mire, la burocracia forma parte de la gestión estatal-empresaria del ferrocarril Roca.
Un testigo, ex personal jerárquico de Ugofe, declaró en la causa que los directivos de la empresa se embolsaban al menos el 30% de los fondos girados por la Subsecretaría que comanda Luna para el pago de salarios (Clarín, 30/11). De este testimonio, surge claramente también que ese fraude sistemático estuvo avalado desde el principio por Luna y por el Ministerio de Planificación que conduce De Vido.
Entendida a fondo la "división del trabajo" que señala la jueza Wilma López en los autos de procesamiento sobre los siete matones detenidos, podemos señalar que ese reparto de tareas también se traslada a la estructura de la Ugofe: los funcionarios habilitan los fondos (y cobran su correspondiente retorno), los capitalistas y la burocracia se reparten el negocio a costa del dinero público, quedando en manos de la UF la tarea de mantener a raya a los obreros que se rebelan contra este régimen de superexplotación. Recordemos que el día de la emboscada criminal, la Ugofe habilitó la licencia de casi un centenar de empleados de los talleres de Escalada para reforzar a la patota. La escala ascendente de responsabilidades detrás del asesinato de Mariano alcanza claramente a Pedraza y a Fernández, quienes deben ser imputados y detenidos inmediatamente, pero no se agota allí: toda la cúpula de la Ugofe debe ser investigada por su participación y su apoyo a este crimen antiobrero.

Claudia Ferrero...