Es díficil saber el número exacto, pero han sido muchos. Bastantes más que en las manifestaciones sindicales convocadas el 1 de Mayo de 2011 por CCoo, UGT y demás sindicatos.
Más de 200.000 personas se han maifestado en las principales ciudades de España contra el Pacto del Euro, los recortes sociales y la corrupción política. La multitud invade las calles de Madrid, Barcelona y Valencia en un ambiente pacífico, festivo y perfectamente organizado.
El 19-J ha superado al 15-M. El movimiento de los indignados, que empezó como una reacción espontánea ante las "injusticias" del sistema socioeconómico imperante hace algo más de un mes; que siguió siendo un campamento-protesta; y que terminó diversificado en asambleas de barrio y alimentado en las redes sociales, volvío a demostrar este 19 d ejunio de 2011 su vitalidad y, sobre todo, su gran capacidad para canalizar los sentimientos de hartazgo, desencanto, frustración e incomprensión de una parte importante de la población española.
Han sido multitud: 25.000 en Valencia, 16.000 en Galicia,5.000 en Sevilla. Y esta vez, no hubo algaradas, ataques a la policía, rotura de mobiliario urbano ni diputados catalanes perseguidos como conejos.
El único incidente resenable de la multitudinaria manifestación barcelonesa se produjo cuando dos agentes de los Mossos d’Esquadra de paisano fueron descubiertos por los 'indignados'.
Algunas les increparon con ferocidad, pero el asunto no pasó a mayores y los policías autonómicos se fueron del lugar hacia sus furgonetas.
EN MADRID
Miles de personas se concentraron en la madrileña Plaza de Neptuno y las calles adyacentes. La céntrica plaza -tradicional hito de los hinchas de fútbol del Atlético de Madrid- ha sido el punto de encuentro de las seis marchas que han recorrido Madrid durante la mañana de este 19 de junio de 2011.
Gritaban sobre todo «¡que no, que no, que no nos representan!» y en una especie de improvisada asamblea han pedido a voces la convocatorio de una huelga general
El Ayuntamiento, por prudencia, había cortado el agua de la fuente. En un ambiente festivo y perfectamente organizado, sin una sola intervención policial, y bajo un sol de justicia, los indignados tomaron la plaza.
Al menos 37.742 personas (el margen de error indica que podrían sumar hasta 42.271) han participado en la movilización en Madrid, según el recuento que la empresa Lynce ha hecho para la agencia EFE. La Policía Municipal ha calculado entre 35.000 y 40.000 personas.
Todo, una semana después de que los indignados levantaran sus tiendas de campaña de las plazas, el Movimiento 15-M volcio a echarse a la calle con las mismas reivindicaciones políticas, económicas y sociales que el pasado mes de mayo pero, esta vez especialmente, con un mensaje de rechazo al "Pacto por el euro", que pretende impulsar la competitividad, y en favor d euna huelga general.
Es llamativo que sindicalistas, militantes del PSOE, periodistas zapateristas y todos los que hace apenas un mes, pensando en las elecciones, negaban que hubiera crisis alguna en España, ahora abrazan baboseantes la causa de los 'indignados'.
TEMOR A LOS VIOLENTOS
Un cordón formado por los propios «indignados» bloqueó el acceso al Congreso de los Diputados, que continúa vallado y protegido for fuerzas de la Policía Nacional.
Derrotada por el calor y el hambre lógica a estas horas, la gente se comenzó a disolver sobre las 15.00. Los servicios de limpieza han comenzado a actuar en la plaza aunque aún persisten algunos grupos sentados en el suelo.
Varias decenas de personas participabann a primera hora de la tarde en una asamblea improvisada en la que cualquier puede tomar la palabra a través de un megáfono.
DESDE LOS BARRIOS AL CENTRO
Desde que la primera columna salió de Leganés a las nueve de la mañaba no paró de sumarse gente. El resto de cabeceras partieron del Parque de Santa María, Getafe, Plaza de Castilla, Villa de Vallecas y del Templo de Debod.
Es la tercera manifestación de los indignados, después de la de los jóvenes sin futuro y de la del colectivo Democracia Real Ya, que reunió el pasado 15 de mayo a 20.000 personas en Madrid.