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General: La pérdida de legitimidad
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De: algoporalgo  (Mensaje original) Enviado: 03/07/2011 19:02

La pérdida de legitimidad
del régimen castrista

Uno de los aspec­tos que comienza a debi­li­tarse den­tro del régi­men cas­trista actual es su legi­ti­mi­dad. Esa pér­dida de vali­da­ción se evi­den­cia mucho más con la puesta en prác­tica de los deno­mi­na­dos “cam­bios” que el régi­men de Raúl Cas­tro implanta en el área socio-económica.

Es noto­ria la dife­ren­cia de obje­ti­vos de los actua­les “cam­bios” que se lle­van ade­lante, en com­pa­ra­ción con los “dis­pa­ra­tes” (según dijera el diri­gente cas­trista Alfredo Gue­vara) que se acep­ta­ron como váli­dos en el último medio siglo. Si hasta poco tiempo atrás se inten­taba seguir un deter­mi­nado ‘guión’ en los prin­ci­pa­les cam­pos de la socie­dad cubana, no se pue­den intro­du­cir “cam­bios” fun­da­men­ta­les sin que haya una per­cep­ción de pér­dida real de legi­ti­mi­dad a los ojos de los cuba­nos de la isla, así como ante los diver­sos acto­res internacionales.

La legi­ti­mi­dad del régi­men cas­trista ha sido –his­tó­rica y con­tra­dic­to­ria­mente– uno de los pun­tos fuer­tes de la dic­ta­dura implan­tada en Cuba. ¿Cómo Fidel Cas­tro con­si­guió legi­ti­mar su régi­men dic­ta­to­rial –den­tro y fuera de la isla– en medio de un Mundo mayo­ri­ta­ria­mente demo­crá­tico? Es una pre­gunta que poli­tó­lo­gos e his­to­ria­do­res deben res­pon­der. Segu­ra­mente no fal­ta­rán las refe­ren­cias al ima­gi­na­rio colec­tivo en los aspec­tos sim­bó­li­cos aso­cia­dos a Robin Hood, David y Goliat y al antro­po­ló­gico y ances­tral espí­ritu “anti-imperio”, sea este griego, romano o “yanqui”.

Resulta lógico dedu­cir que esta pér­dida de legi­ti­mi­dad pudiera aca­rrear una afec­ta­ción en la mag­ni­tud del con­trol del poder polí­tico que el cas­trismo ejerce actual­mente sobre la socie­dad cubana. No hay evi­den­cias de una rela­ción causa efecto inme­diato entre pér­dida de legi­ti­mi­dad y pér­dida del poder polí­tico, cuando de una dic­ta­dura se trata. No obs­tante, per­der las razo­nes de su pro­ce­der es cla­ra­mente un pri­mer paso para el fra­caso de cual­quier régi­men autoritario.

El inte­lec­tual, his­to­ria­dor y exi­liado cubano Rafael Rojas nos acaba de entre­gar un for­mi­da­ble aná­li­sis, “Con­tra el relato ofi­cial”, sobre la legi­ti­mi­dad del régi­men cas­trista basada en la “his­to­ria ofi­cial”, fic­ción ela­bo­rada e ima­gi­na­tiva de la his­to­ria de Cuba, como sus­trato inven­tado que jus­ti­fica a la dic­ta­dura. Sin embargo, la legi­ti­mi­dad es un valor com­plejo y mul­ti­di­men­sio­nal, sopor­tado no sola­mente en la ‘his­to­ria’, sino tam­bién en otras cate­go­rías impor­tan­tes, en cuya pro­fun­di­za­ción –como ha hecho Rojas con la cate­go­ría ‘his­to­ria’– se podría obte­ner más cla­ri­dad res­pecto a la situa­ción crí­tica por la que atra­viesa el poder cas­trista actualmente.

De la misma manera que se cla­si­fica la ‘legi­ti­mi­dad’ como siendo un ‘valor’ para cual­quier régi­men, existe en la actua­li­dad otro valor que se toma como refe­ren­cia para otor­gar –o no– la legi­ti­mi­dad: ese valor es la ‘demo­cra­cia’. El dic­ta­dor cubano insis­tía mucho al inicio del pro­ceso de toma de las rien­das del estado, hege­mó­ni­ca­mente, en el carác­ter “demo­crá­tico” de su gobierno, insis­tiendo en que “demo­cra­cia era esta (la suya) que le daba escuela a los niños, fusi­les a los obre­ros y no dis­cri­mi­naba a los negros…”, dis­tor­sio­nando la pala­bra democracia.

Ade­más de la cate­go­ría ‘his­to­ria’ y de la refe­ren­cia demo­crá­tica, la legi­ti­mi­dad de un régi­men tam­bién es sopor­tada por otra cate­go­ría impor­tante, la ‘ideo­lo­gía’, vista como el motor inte­lec­tual de los acon­te­ci­mien­tos, pasa­dos, pre­sen­tes y futu­ros. La mayo­ría de las veces la ideo­lo­gía se iden­ti­fica como siendo el soporte prin­ci­pal de cual­quier régi­men y ofrece las bases para el aná­li­sis de la cohe­ren­cia con lo suce­dido antes, así como ofrece guías para pre­de­cir lo que pudiera suce­der con acon­te­ci­mien­tos futu­ros de un deter­mi­nado gobierno.

Como es cono­cido, la ideo­lo­gía marxista-leninista, al inicio del pro­ceso dic­ta­to­rial en Cuba, era una ideo­lo­gía que des­le­gi­ti­maba al gobierno, razo­nes por la que Cas­tro y sus hom­bres ocul­ta­ron sus ver­da­de­ras inten­cio­nes para poder tomar las rien­das abso­lu­tas del poder polí­tico. Este pro­ce­di­miento enga­ñoso, como método de acción, des­le­gi­ti­miza sin dudas al castrismo.

Otra cate­go­ría inme­dia­ta­mente iden­ti­fi­cada como soporte de cual­quier régi­men es la ‘polí­tica’, vista como la actua­ción efec­tiva del régi­men den­tro de la socie­dad que dirige, así como los even­tos polí­ti­cos que le die­ron ori­gen –golpe de estado, elec­cio­nes (libres o ama­ña­das) revuelta armada– entre otros indi­ca­do­res de legi­ti­mi­dad polí­tica. La polí­tica legi­tima valo­rando el ori­gen del régi­men, ana­li­zando las Ins­ti­tu­cio­nes que crea, ade­más de ana­li­zar lo real­mente eje­cu­tado en el mundo real de la socie­dad que dirige y la manera de pro­yec­tarse gobernando.

Final­mente, la cate­go­ría ‘eco­nó­mica’, enten­dida como el área de toda socie­dad donde se pro­du­cen y comer­cia­li­zan los valo­res eco­nó­mi­cos y finan­cie­ros, se cons­ti­tuye en otro soporte de cual­quier régi­men. Si la “eco­no­mía” va bien, el resto de los pro­ble­mas se ecua­cio­nan con más faci­li­dad. Es esta cate­go­ría la que más toca a todos y cada uno de los miem­bros de la sociedad.

De manera que, no es sola­mente a tra­vés de una his­to­ria ofi­cial, apa­ren­te­mente cohe­rente, como se puede haber logrado la legi­ti­mi­dad del régi­men cas­trista. Un fac­tor rele­vante –sin ser abso­luto– que cola­boró con la rela­tiva legi­ti­mi­dad que hasta ahora ha dis­fru­tado la dic­ta­dura cubana, no se debe tanto al haber ela­bo­rado una his­to­ria ofi­cial favo­ra­ble, sino a una causa externa: el apoyo mili­tar y eco­nó­mico de la anti­gua Unión Sovié­tica antes y de la Vene­zuela cha­vista ahora, ver­da­de­ros padri­nos y sos­te­ne­do­res del cas­trismo, que si bien no son fac­to­res legi­ti­ma­do­res, sí lo son de impo­si­ción, soporte y man­ten­ción del esta­tus dic­ta­to­rial, sumado al anti-norteamericanismo mili­tante prac­ti­cado en toda Lati­noa­mé­rica, en Europa y en Asia.

En el caso de Cuba, el hecho que el régi­men haya abra­zado una ideo­lo­gía que lo des­le­gi­tima a los ojos del ‘valor’ demo­cra­cia, ha tenido que usar recur­sos retó­ri­cos y fal­sos como lo es la his­to­ria ofi­cial –inven­tando una secuen­cia ima­gi­na­ria de base mar­xista– con vis­tas a pro­cu­rar una legi­ti­mi­dad his­tó­rica de la que carece por falsa. Siendo el régi­men cas­trista –a pesar de lo que diga– un régi­men no demo­crá­tico, jus­ti­fica par­cial­mente su pro­ce­di­miento aso­ciando hechos his­tó­ri­cos reales a moti­va­cio­nes mar­xis­tas inexis­ten­tes, creando una pieza de ficción.

Ana­li­zando las diver­sas cate­go­rías (ade­más de la cate­go­ría ‘his­to­ria’, ya des­me­nu­zada por Rojas) que ser­vi­rían para legi­ti­mar al cas­trismo, ten­dría­mos un pano­rama como el siguiente:

Desde el punto de vista ideo­ló­gico, el marxismo-leninismo abra­zado por Cas­tro y su par­tido, ade­más de cons­ti­tuirse en un ele­mento dele­gi­ti­mi­za­dor (por anti-democrático) demos­tró su falta de vali­dad en la apli­ca­ción prác­tica de sus prin­ci­pios en el mundo real de todos los paí­ses donde fue apli­cado, inclu­yendo a Cuba. No voy a refe­rirme a la ase­ve­ra­ción fre­cuente “Fidel Cas­tro no es mar­xista”. Ya una polé­mica simi­lar la viví estando en Cuba, cuando China y Rusia se acu­sa­ban mutua­mente de no ser mar­xis­tas. La inter­preto como un intento insen­sato de legi­ti­mar una ideo­lo­gía, el mar­xismo, demos­tra­da­mente des­le­gi­ti­mada en la prác­tica social.

Con rela­ción a la segunda cate­go­ría pro­puesta aquí como poten­cial legi­ti­ma­dora del régi­men cubano, la ‘polí­tica’, hay que decir que no ha habido en toda la his­to­ria de la isla una polí­tica más des­truc­tiva, insen­sata y auto­fá­gica que la polí­tica apli­cada en Cuba por el cas­trismo. Ade­más de implan­tar una dic­ta­dura y lejos de crear Ins­ti­tu­cio­nes polí­ti­cas sóli­das, implantó un eunuco sis­tema de par­tido único; divi­dió la isla en múl­ti­ples pro­vin­cias de manera arti­fi­cial, sólo para mul­ti­pli­car la buro­cra­cia y el con­trol abso­luto que lo carac­te­ri­zan, y como es sabido, cer­cenó la liber­tad polí­tica, madre de todo avance en el campo del manejo gubernamental.

Res­pecto a la cate­go­ría eco­nó­mica, es poco lo que se pueda aña­dir ade­más de lo dicho por el pro­pio Raúl Cas­tro al inten­tar, pri­mero (ahora) tibia­mente (des­pués ya lo sabe­mos) eli­mi­nar todo ves­ti­gio de eco­no­mía esta­ti­zada por inefi­ciente y corrupta e implan­tar un sis­tema de mer­cado. No se dice abier­ta­mente por dos razo­nes: pri­mero, por­que toda­vía no ha muerto Fidel y segundo, ganar tiempo en el difí­cil camino del asu­mir el fra­caso con todas sus implicaciones.

Para el mar­xismo, el fra­caso con la esta­ti­za­ción de la cate­go­ría ‘eco­no­mía’, repre­senta simi­lar revés que para la cate­go­ría ‘polí­tica’ repre­sentó la ‘dic­ta­dura’ pro­puesta por el leni­nismo. En ambos casos, no hay posi­bi­li­da­des de legi­ti­mi­za­ción para el régi­men cubano.

Siendo así, una dic­ta­dura pre­ca­ria­mente legi­ti­mada, pri­mero con el dinero sovié­tico y ahora con el dinero cha­vista, carece de posi­bi­li­da­des de ape­lar a ser legi­ti­mada por razo­nes his­tó­ri­cas, ideo­ló­gi­cas, polí­ti­cas o eco­nó­mi­cas. Sólo le queda el camino sen­sato y res­pon­sa­ble de entre­gar los des­ti­nos del país a per­so­nas que sean legi­ti­ma­das por las urnas, res­ta­blez­can una his­to­ria diversa, inclu­siva y ver­da­dera, que implan­ten un sis­tema polí­tico demo­crá­tico y mul­ti­par­ti­dista, así como una eco­no­mía de mer­cado donde los cuba­nos reto­men el con­trol de sus des­ti­nos en todos los órde­nes de la vida, con liber­tad polí­tica, eco­nó­mica y de expresión.

Fuente: www.cubalibredigital.com

Autor: Jorge Hernández Fonseca

http://www.lahistoriaparalela.com.ar/2011/06/29/la-perdida-de-legitimidad-del-regimen-castrista/



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De: algoporalgo Enviado: 03/07/2011 19:29
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De: marce702  (Mensaje original) Enviado: 02/07/2011 15:58


 
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