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General: Camino socialista .... para leer despacio .-
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De: Ruben1919 (Missatge original) |
Enviat: 02/01/2012 14:19 |
15 octubre, 2011
La rabiosa actualidad del marxismo
- Conocer para transformar.
El “muerto” que el capitalismo de finales del siglo XX, tras la caída de la URSS, creía haber matado, goza de buena salud. Al menos eso parece desprenderse del hecho de que tras el estallido de la crisis, El Capital se haya convertido en uno de los libros mas vendidos en medio mundo, y que “ marxismo y crisis capitalistas” estén entre los términos más buscados en internet desde 2008.
Por A. L.
¿Qué es el marxismo? Para los comunistas, siguiendo a Lenin, la cuestión está clara. Una ideología (la ideología comunista), una filosofía (el materialismo dialéctico) y una ciencia (el materialismo histórico). Para quienes, aun reclamándose del marxismo, aspiran a revisarlo cada día la respuesta es muy distinta, y hemos tenido ocasión de conocerla en detalle gracias al último congreso del PCE.
El marxismo, para ellos, “es un método” que sirve para “analizar el sistema capitalista”. Por lo tanto, como cualquier método, “hay que actualizarlo”. Porque “el mundo evoluciona y surgen nuevos problemas para los que Marx no tenía respuestas: el feminismo, la ecología…”
¿Qué es luchar contra el capitalismo? Para los comunistas “encontrar en la misma sociedad que nos rodea, las fuerzas que pueden –y, por su situación social, deben– constituir la fuerza [el proletariado] capaz de barrer lo viejo [el capitalismo] y crear lo nuevo [el socialismo y el comunismo], y educar [en el marxismo] y organizar [en el partido comunista] a esas fuerzas para la lucha [contra la explotación capitalista]” (Lenin. ¿Qué hacer?). Para los revisionistas de nuestros días, por el contrario, luchar contra el capitalismo es luchar contra “la desigualdad”. Y por eso, “allí donde haya una injerencia del capitalismo, allí estamos nosotros para dar la voz a los que no la tienen”.
“El marxismo, para ellos, es un método” Una injerencia del capitalismo, cualquier injerencia del capitalismo. Lo mismo da si se trata de la lucha por mejoras salariales, contra el maltrato a los animales, contra la energía nuclear, por el carril-bici,… Todo está a mismo nivel para ellos, todo entra en el mismo “saco de reivindicaciones” que constituye su programa máximo de lucha. Programa que recoge y en el que caben cientos de “causas”: todo aquello que luche contra todas las manifestaciones del capitalismo, contra todas sus injerencias. En eso consiste para ellos la contradicción principal del capitalismo: en que es una injerencia permanente contra los intereses y los deseos de las personas. En consecuencia, luchar contra la explotación capitalista es levantar ese saco de reivindicaciones que se dirigen contra todas las manifestaciones de la opresión y la explotación. Lo contrario, es puro dogmatismo, “pensar que Marx es un manual”.
Estas ideas acerca de lo que es el marxismo y qué es luchar contra el capitalismo alcanzan una gran difusión entre los sectores más luchadores de nuestro pueblo. Todos las hemos oído defenderlas de una u otra manera a cantidad de gente revolucionaria y sana que acude a las charlas, seminarios, foros de discusión, etc. Aunque sea cada vez más menguante su fuerza política, organizativa, su capacidad de crear climas de opinión favorables a estas ideas venenosas sigue siendo grande, porque van “a favor de corriente”, de las corrientes ideológicas y políticas que le interesa difundir entre el pueblo a las principales clases explotadoras, las burguesías monopolistas y el imperialismo.
¿Y qué tiene que ver todo esto con la filosofía marxista, con el materialismo dialéctico?
Una relación mucho más directa de lo que parece a simple vista. Porque en el núcleo del sistema de pensamiento que permite elaborar ese tipo de teorías encontramos una posición filosófica, una posición burguesa, el empirismo. Una forma de idealismo que niega que exista una realidad material exterior a nosotros, objetiva e independiente de la voluntad del hombre. Y que por eso mismo tiene su propio motor de desarrollo interno, se mueve a través de leyes objetivas que le son propias.
El empirismo, al negar la existencia de un mundo exterior objetivo e independiente de nosotros, niega en consecuencia que se pueda conocer la esencia misma de las cosas. Las cosas, desde esta posición filosófica, no tienen una existencia en sí, lo que existe es la percepción que nuestros sentidos nos dan de las cosas, sus manifestaciones externas. Pretender que las cosas tienen una esencia propia es, para esta posición, dogmático. Pretender que existen leyes universales a un proceso particular de desarrollo de la materia, es dogmático. Pretender que el marxismo desvela la esencia del desarrollo de las sociedades humanas, las leyes universales que rigen la sucesión de los distintos modos de producción, eso es “un manual”, puro dogmatismo.
Por el contrario, para los empiristas, lo único que se puede conocer de la realidad son sus manifestaciones externas, la percepción que nosotros tenemos de los efectos del capitalismo. En consecuencia sólo podemos aspirar a tener un conocimiento relativo, parcial y, por ello, la alternativa para luchar contra él es dar la batalla allá donde surja una manifestación de “sus injerencias”, metiendo en un mismo saco todas las reivindicaciones de todos aquellos que, en cualquier lugar, en cualquier momento, por cualquier causa, se rebelan contra las múltiples formas externas que adopta la opresión capitalista.
Que estas posiciones filosóficas empiristas, idealistas –en suma, reaccionarias, puesto que el idealismo ha sido siempre la filosofía de las clases reaccionarias– se desarrollen en el seno de quienes se reclaman del marxismo no es en absoluto nada nuevo en la historia del movimiento obrero y revolucionario mundial. Ya en 1908 –y ante el auge de la corriente ideológica y política del revisionismo socialdemócrata en los partidos obreros europeos– Lenin se ve obligado a escribir un grueso volumen filosófico, Materialismo y empiriocriticismo, en el que traza una línea de demarcación tajante entre el materialismo dialéctico y las corrientes filosóficas empiriocriticistas que, en nombre de la lucha contra el dogmatismo, niegan, desde una posición filosóficamente empirista, el carácter de ciencia del marxismo, su capacidad de establecer las leyes objetivas y de valor universal, exteriores e independientes de la voluntad de los hombres, que rigen la sucesión de unos modos de producción por otros.
Una batalla,, en el terreno de las ideas en el seno del movimiento obrero y revolucionario, que es vital. Porque, de no darla, se retrotrae al proletariado a un estadio de conocimiento anterior al establecimiento de la ciencia de la historia, se le priva de la formidable herramienta del conocimiento objetivo de las leyes objetivas y universales que mueven al capitalismo, condenándolo de esta forma a vegetar permanentemente bajo la esclavitud asalariada.
Tomar como blanco de combate en el terreno de la teoría estas manifestaciones empiristas e idealistas propias de la burguesía es una necesidad vital para el avance de la revolución. Combatir no sólo las alternativas políticas del “saco de reivindicaciones” que enarbola el revisionismo de nuestros días, sino también la base teórica burguesa, filosóficamente idealista y empriocriticista, en que se sustentan tales alternativas es también, para el proletariado, dar una batalla de clases y lucha de clases. En este caso, de lucha de clases en la teoría. Esto es, en última instancia, lo que es la filosofía, lucha de clases en la teoría. Y esta es su importancia práctica para la revolución.
Fuente: De Verdad Digital: http://www.deverdaddigital.com/pagArticle.php?idA=11762
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RESTAURACIÓN CAPITALISTA EN LA CHINA AGUDIZA LOS CONFLICTOS ÉTNICOS
El enfrentamiento entre dos nacionalidades, la Han y la Uigur , en la provincia de Xingiang, causó 156 muertos, más de mil heridos y casi 2 mil prisioneros. El detonante fue la protesta del domingo 5 de julio, exigiendo del gobierno sanciones por la muerte de dos trabajadores uigures en una fábrica de Guangdong, por chinos de la etnia han. La policía intervino y el conflicto de propagó por toda la capital, Urumaqui.
Los uigures que eran mayoría en la provincia se ven hoy en la condición de minoría y sufren la opresión de los hans. La migración de la etnia Hans para Xingjiang hace parte de la política del gobierno de Pekín como forma de asegurar la integración de la provincia al territorio chino.
Las características musulmanas y las diferencias de lengua y etnia separan a los uigures de los chinos. El separatismo es fuerte en la región y la burocracia del partido comunista impone la integración a la fuerza. La revolución china, degenerada por la burocracia nacional-socialista , no erradicó el problema de las nacionalidades y, al contrario, forzó la unidad nacional por medio de la opresión. La restauración capitalista contribuyó a la agudización de los conflictos entre las etnias. Es lo que pasa en Xingiang y en el Tibet.
El conflicto entre etnias sólo se resolverá con al eliminación de la opresión de una nación sobre otra. No puede haber erradicación de la opresión nacional sin que se aplique el principio del derecho a la autodeterminación.
La revolución proletaria, allí donde conviven varias nacionalidades tiene en su programa la autodeterminació n y la tarea de integrar pacíficamente las nacionalidades por medio de la transformació n de la propiedad privada de los medios de producción en propiedad colectiva.
El choque entre las masas Han y Uigur devienen del hecho de que se mantienen la explotación del trabajo, los privilegios y la dominación de la burocracia que nació en la entraña de la revolución china, que debería extirpar toda forma de opresión. El conflicto entre trabajadores Han u Uigures, con acusaciones de acoso sexual, que llevó a innumerables muertes y después a manifestaciones de ambas partes y que nuevamente provocaron mas muertes tiene por detrás opresión nacional y discriminación racial.
http://www.marxismo.org/?q=taxonomy/term/54
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Industrial encabeza lista de multimillonarios chinos
El boom de la construcción en China hizo del fundador de una industria dedicada a la fabricación de maquinaria pesada el hombre más ricos del país.
La Lista de los más Ricos en el 2010 que publica la revista Hurun, equivalente en China a la de Forbes en Estados Unidos, dijo que Liang Wengen, de 55 años y ex gerente de una fábrica de armamento, además de presidente de Sany Heavy Industry Co., encabeza la lista de súpermillonarios del país.
El aumento del valor en las acciones de Sany duplicó el año pasado su fortuna a 11.000 millones de dólares, dijo Rupert Hoogewerf, que estudia la riqueza de China y elaboró la lista.
Los capitanes de la industria de bienes de consumo, la internet y propietarios de inmuebles dominaron las primeras posiciones de la lista.
La economía china le ha permitido capear una gran parte de la crisis financiera global: de la lista de Hurun sobre los 1.000 hombres más ricos de China, 217 son multimillonarios en dólares, frente a 189 en el 2010, agregó.
Zong Qinghou, presidente del imperio de refrescos Wahaha, bajó al segundo lugar con 10.700 millones de dólares, mientras que Li Yanhong, presidente del motor de búsqueda por internet Baidu Inc (NasdaqGS: BIDU - noticias) . fue tercero con 8.800 millones de dólares. El industrial creador de la bebida energética Red Bull, Yan Bin, fue cuarto con 7.800 millones de dólares.
China ha invertido billones de dólares en nuevas viviendas, ferrocarriles y otros proyectos de infraestructura, lo que ha dado un enorme impulso al sector de la construcción, que ha beneficiado especialmente a los fabricantes de maquinaria, cemento y otros materiales de obra.
Sany, con sede en la provincia central china de Hunan, fabrica maquinaria pesada de construcción y para el manejo de carga marítima en los puertos, así como turbinas eólicas.
Fundada en 1989 por Liang y varios socios con el nombre de Fábrica de Materiales (Mexico: ST1000.MX - noticias) de Soldadura Hunan Lianyuan, la empresa cotiza sus acciones en la bolsa de Shanghai desde el 2003.
El fundador de Wahaha, Zong, de 66 años, vio reducida levemente su fortuna pese al aumento de las ventas.
http://es.finance.yahoo.com/noticias/Industrial-encabeza-lista-ap-2005887005.html |
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CAPITALISMO | ANTE EL CONGRESO DEL PC
China encierra a nuevos ricos EL GOBIERNO quiere cortar la irrefrenable tentación de algunos millonarios de mostrar su poder adquisitivo. Huang se ha construido su «Casa Blanca»
DAVID JIMÉNEZ. Shangai
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Huang Qiaoling en su mansión de la ciudad de Hangzhou, una réplica de la Casa Blanca que incluye «Despacho Oval». / DERMOT TATLOW | El sueño de Huang Qiaoling de vivir algún día en la Casa Blanca se ha cumplido, aunque para lograrlo haya tenido que construirse una réplica de la residencia presidencial americana entre los campos de arroz de su Hangzhou natal. «Ahora sí que puedo decir que Washington me pertenece», bromea el millonario chino desde el «Despacho Oval», una de las más de 30 habitaciones de su mansión.
Si Mao Zedong levantara la cabeza y viera a sus camaradas chinos compitiendo en lujo y extravagancia, probablemente pensaría que se había despertado en el país equivocado. El Gran Timonel puso todo su empeño en borrar cualquier manifestación de riqueza y eliminar la propiedad privada en China para crear lo que debía ser un paraíso marxista. Un cuarto de siglo después de su muerte, millones de sus compatriotas se encuentran en mitad de una alocada carrera por alcanzar una riqueza que durante décadas les fue negada.
Los nombres de los primeros en llegar a la meta han sido desvelados la semana pasada por la Revista Forbes bajo el título de «Los 100 chinos más ricos». Desde fabricantes de pienso para cerdos a emperadores industriales que han exportado el Made in China por todo el mundo.
Los viejos conservadores del régimen comunista chino y los 900 millones de campesinos que no se han beneficiado de las reformas de las últimas dos décadas se sienten traicionados. El partido que llegó al poder en 1949 prometiendo la sociedad más igualitaria del mundo va camino de crear una de las más desiguales.
CALIMOCHO En el bar de copas La Nube de Shangai, en el último piso del rascacielos más alto de China, los nuevos privilegiados mezclan vino francés Chteau Margaux con Coca-cola y discuten sus últimas adquisiciones en la Bolsa. Los capitalistas rojos viven estos días aislados en chalés y mansiones de estilo europeo, apuestan millones de dólares en casinos de Las Vegas y compran joyas en las nuevas tiendas que Cartier o Tiffany's han abierto para atender al insaciable consumismo de la clase adinerada.
Huang y el resto de los empresarios chinos esperan que su recién aceptada condición de millonarios sea bendecida formalmente en el XVI Congreso del Partido Comunista que será inaugurado el próximo viernes. La reunión servirá para confirmar la mayor renovación política en el régimen desde la muerte de Mao con la subida al poder de una nueva generación de líderes sin apenas vinculación con la revolución de 1949. El presidente Jiang Zemin espera decir adiós viendo confirmada su polémica decisión de permitir que los capitalistas chinos puedan ser miembros del Partido Comunista.
Nunca antes los buenos contactos y el malabarismo político habían sido cualidades tan indispensables para llegar a lo más alto en China. La revista Forbes ha reservado este año un apartado para quienes olvidaron esa regla, multimillonarios que han caído en desgracia dentro del régimen y han servido a las autoridades para demostrar que también los poderosos deben pagar impuestos y someterse a las leyes.
Yan Rong, tercero en la lista de los más ricos el año pasado, ha huido a Estados Unidos para evitar a la Justicia, la multimillonaria musa del cine Liu Xiao adorna los carteles anticorrupción del Gobierno y Mou Qizhong, una vez conocido como el hombre con más dinero del Imperio, ha cambiado sus trajes de Armani por el uniforme de un campo de trabajos forzados tras haber sido condenado a cadena perpetua por evasión de divisas.
El «presidente Mou», como era conocido entre sus empleados, se convirtió en 1989 en uno de los primeros Rockefeller de la China comunista gracias al conocido como el «contrato de los calcetines», el trueque de 500 camiones llenos de calcetines y otras prendas por cuatro aviones de pasajeros rusos. Después, muy al estilo europeo, Mou compró un equipo de fútbol, invirtió en la construcción y sumó fama y dinero hasta su detención en 1999, cuando su fortuna superaba los 250 millones de euros.
El encarcelamiento de éste y otros millonarios chinos ha llevado a la elite a cuidarse mucho de mostrar abiertamente su poderío económico. La televisión estatal china ha tenido que cancelar sus planes de elaborar un reportaje sobre los nuevos ricos ante la falta de voluntarios dispuestos a admitir su condición públicamente.«Aquí vienen dos tipos de compradores. El corrupto que pone el coche a nombre de su mujer y el que ha ganado su dinero honradamente y lo pone a su nombre. Ninguno de los dos sabe lo que es un BMW, pero han leído que es un coche de prestigio», dice Patrick Pan, jefe de ventas del concesionario de la firma alemana en Shangai.
LARRY, CHICO DE ORO China cuenta ya con más de 10.000 personas con al menos 10 millones de euros en el banco y el poder adquisitivo de los afortunados no deja de aumentar. Para ocupar un puesto en la mitad de la tabla de «Los 100 más ricos» bastaban seis millones de euros en 1999; en la lista de este año, ese lugar lo ostenta una fortuna de 110 millones de euros. El primero de la lista, el inversor Larry Rong Zhijian, supera los 850 millones de euros.
En el otro lado de la balanza están los agricultores que no llegan a final de mes y los millones de desempleados que cada año son despedidos por medio de las reformas capitalistas. Los críticos dentro del régimen temen que China esté viviendo un regreso a las desigualdades sociales de los años 30 y 40 que llevaron a los más desfavorecidos a rebelarse.
El Gobierno quiere cortar la irrefrenable tentación de algunos millonarios de mostrar su poder adquisitivo para evitar tensiones sociales. Los que aun así deciden arriesgarse, lo hacen dejando en evidencia que en la China moderna el lujo sigue siendo una novedad. Los Ferrari son pintados de color púrpura, las casas se adornan con colores dorados y los animales domésticos llevados a la peluquería.
Si Huang se ha construido su «Casa Blanca», el empresario Li Qinfu ha edificado una reproducción del Capitolio en Shangai y el magnate de la publicidad Hao Yaning un castillo inspirado en la mansión de 165 habitaciones erigida por Randolph Hearst en California.
En ciudades como Shangai o Guangzhou se han creado barrios enteros donde los más acaudalados, siguiendo una tradición que data de la época de las dinastías, mantienen una, dos, tres y hasta cuatro concubinas. «A más dinero más concubinas», dice Wang, el portero de uno de los edificios de segundas esposas de Shangai.
Nada es demasiado para una generación de ricos cuyas ambiciones empezaron en el mismo sitio: nacieron en una familia pobre de la China de Mao y crecieron con sueños como el de tener su propia Casa Blanca en medio de un campo de arroz.
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MANUAL DEL LUJO MANDARÍN |
Vivienda Se construyen réplicas de edificios famosos del mundo.La Casa Blanca, el Capitolio, Palacios europeos o catedrales a tamaño real. También templos budistas para garantizar que la fortuna no les abandonará nunca. Juego Han sustituido a los japoneses como los mayores derrochadores en los casinos de Las Vegas. Es fácil verles perder hasta cinco millones de euros en una noche. Concubinas A más dinero, mayor número de ellas. En las grandes ciudades hay barrios donde mantienen hasta cinco, a las que regalan una casa y pagan todos sus gastos. Joyas La demanda ha convertido al jade en la piedra preciosa más cara del mundo. Una pieza de buena calidad se compra por un millón de euros. Paladar Les gusta mezclar uno de los mejores vinos franceses, el Chteau Margaux, con Coca-cola. Avión privado Los compran a los rusos y los adornan con dragones, los tapizan con pieles de tigre o león y los pintan del rojo de la buena suerte. Golf Se ha convertido en el deporte de moda entre los nuevos ricos, que tratan de recuperar el tiempo pagando hasta medio millón de euros por jugar unos hoyos con Tiger Woods. Coche Los de lujo cuestan el doble que en el resto del mundo.Aun así, pagan varios millones adicionales para que la matrícula tenga el mayor número de ochos, el dígito de la suerte en China. Hijos Aprovechan su dinero para pagar multas y sobornos que les permitan romper la prohibición de tener más de uno.
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http://www.elmundo.es/cronica/2002/368/1036405458.html
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