Las comarcas mineras en Asturias, León, Aragón y Palencia están llamadas este lunes a la huelga general en todo tipo de actividad en defensa del futuro del carbón y ante el recorte de más del 60% de las ayudas a la minería, lo que para sindicatos y patronal va a suponer el fin del sector. El paro está siendo total en Asturias, según los sindicatos, aunque la Delegación del Gobierno en la comunidad da por buenos los datos sindicales de seguimiento. La huelga general de hoy se une a la de la minería, que lleva desde el pasado 1 de junio en paro indefinido. La jornada ha comenzado, como ya viene siendo habitual, con cortes en seis carreteras de Asturias y en dos líneas ferroviarias del Principado, sin que de momento se hayan registrado enfrentamientos entre manifestantes y policía.
Desde primera se están produciendo cortes intermitentes en la AS-254, a la altura de Orlé (Casu), la AS-253, a la altura de Felechosa (Aller), la AS-112 a la altura de Bustiello (Mieres), la AS-246 a la altura del kilómetro 25, la AS-117, a la altura de Langreo, y en la N-630. La Dirección General de Tráfico informa en directo de los problemas en las carreteras asturianas.
En León, fuentes de la Federación de Industria de UGT estiman en un 100% el seguimiento de la huelga en las cuencas mineras de la provincia. La Subdelegación del Gobierno no aporta un porcentaje concreto pero afirma que hay un “importante seguimiento” en la mayoría de los 24 municipios mineros. Añade, no obstante, que no se puede hablar de paro total porque en algunas localidades la incidencia está siendo menor. El organismo informa de que los centros educativos permanecen abiertos pero la asistencia está siendo muy baja y de que en los centros de salud operan los servicios mínimos. A las doce del mediodía ha comenzado una manifestación que está recorriendo las calles de la capital.
Bajo las consignas No al cierre de la minería del carbón y Por el empleo en las cuencas mineras, los sindicatos SOMA-FITAG-UGT y CC OO han convocado huelga general en las cuencas asturianas, un paro que concluirá con una manifestación en La Felguera, en Langreo (Asturias), a partir de las siete de la tarde.
Como consecuencia del recorte de las ayudas directas a la explotación del carbón de 190 millones (que supone una disminución del 63% de las subvenciones en un sector muy dependiente de ellas) el pasado 23 de mayo estalló una contundente conflictividad en las comarcas mineras, con barricadas en carreteras y vías férreas (hasta 60 cortes en vías públicas se llegaron a registrar en un solo día en Asturias) y el bloqueo de los accesos a localidades, además del reiterado colapso en conexiones vitales como la autopista del Huerna, que une Asturias con la Meseta.
Los mineros mantienen además encierros en tres minas, en Asturias y León. En El Bierzo, por ejemplo, siete de ellos llevan 25 días encerrados en la mina de Santa Cruz del Sil. Las protestas han dejado varios heridos -cuatro policías y tres periodistas resultaron heridos el viernes en las inmediaciones del Pozo del Sotón (El Entrego, Asturias)- y numerosos detenidos.
La Guardia Civil ha reforzado con 250 agentes más el dispositivo de seguridad desplegado en las últimas semanas en León y Asturias.
La huelga de la minería del carbón comenzó el pasado mes de mayo, con paros los días 28, 29, 30 y 31, y pasó a ser indefinida el pasado uno de junio, después de que concluyera sin acuerdo la reunión entre los representantes del sector y el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, en el marco de la comisión de seguimiento del Plan del Carbón. Las minas de carbón españolas dan trabajo en la actualidad a 7.900 obreros, en 47 explotaciones. Hace 27 años, aún daban ocupación a 52.910 trabajadores. La producción ha caído de menos de 20 millones de toneladas a los 8,5 millones de toneladas.