|
General: GRECIA DEJA A ESPAÑA EN LA TORMENTA .-
Elegir otro panel de mensajes |
|
De: Ruben1919 (Mensaje original) |
Enviado: 19/06/2012 12:25 |
Grecia deja a España en la tormenta
Las dudas sobre la solvencia española se agudiza a pesar del resultado electoral griego
El tipo del bono a 10 años supera el 7% y la Bolsa cae 2,96%
El demonio de España es España. No es Grecia. Desde que el Gobierno pidió a Europa dinero para rescatar a la banca, los mercados han agudizado su desconfianza en el país, las órdenes de venta superan a las de compra y cae en picado el valor de todo aquello que en los mercados financieros lleva marca —o el estigma— de España. El Gobierno achacó la volatilidad de la semana pasada, la primera postrescate, a la proximidad de las elecciones griegas, en la que una victoria de los partidos contrarios al pacto de salvamento europeo (y sus condiciones leoninas) encendía al riesgo de que el país heleno acabe dimitido o expulsado del club del euro. El riesgo de contagio a España hubiese resultado letal. Sin embargo, el domingo ganaron los presuntos cuerdos, los conservadores de Nueva Democracia, que defienden el plan europeo y suman votos suficientes junto al socialista Pasok para formar Gobierno. ¿Y cómo ha respondido el mercado a España? Con un bufido.
Mientras los líderes de los países desarrollados y emergentes llegaban a la cumbre del G-20, los inversores siguieron el lunes exigiendo más intereses por comprar deuda pública española, hasta tocar un máximo de la era euro difícil de sostener, y la Bolsa vivió su quinta mayor caída en lo que va de año, del 2,9%. Como guinda, el Banco de España hizo público que la morosidad que sufre la banca llegó en abril un récord en 18 años (el 8,7%), el crédito se contrajo y los depósitos de empresas y familias bajaron en mes de 1,16 a 1,14 billones.
Nadie ve el caso griego aún resuelto y crecen las dudas sobre el proceso para sanear el sistema financiero español. Lejos de suponer un bálsamo, los 100.000 millones de euros solicitados por el Gobierno español para sanear la banca añaden gasolina. Muchos inversores empiezan a preguntarse si la crisis financiera española podrá resolverse sin una quita de la deuda bancaria en manos privadas. El nuevo fantasma de España es que la crisis bancaria acabe provocando la necesidad de otro rescate, incluso uno integral, y no solo circunscrito a sus entidades financieras, como ocurrió con Grecia, con Irlanda o con Portugal. El Gobierno se conjura para ahuyentarlo y mira suplicante al Banco Central Europeo (BCE), que puede aliviar las tensiones al comprar bonos en el mercado y reducir así los precios, pero tampoco ayer dio señales de vida. Lleva 14 semanas así.
Los números de ayer plasman bien la imagen de la deuda española caminando en el alambre: el bono español a 10 años llegó a pagar una rentabilidad del 7,28%, el máximo en la etapa del euro. Cerró en el 7%. La diferencia con el interés que se le exige a los bonos alemanes, considerados seguros, es la prima de riesgo, el termómetro de la fiabilidad de un país como pagador, y ayer llegó a tocar los 589 puntos básicos (5,89 puntos porcentuales), pero acabó en 574, 45 puntos más que el viernes.
La prima española está ya más cerca de la de la intervenida Irlanda (679) que de la de la Italia, que ayer pasó de 448 a 477 puntos básicos, unos niveles también muy elevados. Pero a principios de año los mercados exigían a Italia 200 puntos más que a España y ahora, 100 puntos menos.
Pero la subida resulta más llamativa —y preocupante— si se pone el foco en los bonos a cinco años: el interés subió 40 puntos básicos en una sola jornada, del 6% al 6,4%, y a dos años escaló del 4,9% al 5,3%.
Los inversores exigen más rendimiento a las inversiones que perciben como más arriesgadas y, con el nivel actual de los tipos españoles, la carga de los intereses es insoportable. En la práctica, la deuda española está a un paso de ver cerrada la puerta del mercado. El ministro de Economía, Luis Guindos proclamó desde México que “España es solvente” y que sus esfuerzos se reconocerán en “días o semanas”.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, admitió en el Senado que la situación que atraviesa España es “crítica” y “crucial” y reclamó al BCE que responda "con toda firmeza" a la “insistente presión” de los mercados. “El BCE debe responder con toda firmeza, con toda fiabilidad, a esos mercados que todavía intentan obstaculizar el desarrollo del proyecto común del euro”, recalcó. Pero esa no es de momento la doctrina que impera en el órgano europeo. El alemán Joerg Asmussen, miembro del consejo ejecutivo del BCE, insistió en que el instituto emisor no puede sustituir las reformas que tienen que llevar a cabo los Gobiernos y advirtió de que de que es el momento de actuar de los gobernantes.
Los intereses que se dispararon el lunes son los que pagan los inversores pagan entre sí en la compra-venta de bonos ya emitidos en su día por el Estado, es decir, los del mercado secundario, pero su coste se traduce siempre en alzas cuando el Tesoro público lleva a cabo subastas de deuda pública. Y esta semana el organismo se somete a un examen que puede ser decisivo. El martes intentará captar entre 2.000 y 3.000 millones en letras a 12 y 18 meses y el jueves, entre 1.000 y 2.000 millones, en bonos a dos, tres y cinco años. “No son umbrales de rentabilidad sostenibles mucho tiempo, pero en cada subasta el Tesoro no renueva más que un 1% o un 2% de su deuda total, y la solvencia se deteriora, pero lentamente. No hay un problema de liquidez”, tranquiliza Juan Luis García Alejo, analista de Inversis.
Las de esta semana serán las primeras emisiones que se realizan tras la rebaja tres escalones que la semana pasada practicó la agencia de calificación de riesgos Moody's a la deuda española, hasta dejarla a un escalón de lo que se conoce como bono basura, es decir, títulos solo aptos para inversores dispuestos a asumir mucho riesgo.
Desde el primer trimestre de 2008, la deuda española se ha duplicado y a finales del pasado marzo equivalía al 72,1% del PIB. El rescate bancario computará como deuda pública (según ha dejado claro la oficina estadística europea, Eurostat) y esta podría dispararse hasta el 90% del PIB a finales de este año, puesto que los Presupuestos Generales ya preveían que se situaría en el 80% (antes de la petición de la ayuda bancaria).
La aparatosa gestión por parte del Gobierno español, primero de la nacionalización de Bankia y después de la petición de ayuda para el conjunto del sistema bancario, ha generado más preguntas que respuestas. El domingo, el presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, criticó la falta de concreción del plan. “Tenían un gran cartucho y lo han desaprovechado”, señaló en vísperas de la reunión del G-20 que hoy comienza en Los Cabos (México).
Además, persisten las dudas sobre las condiciones, plazos, qué institución europea aportará los fondos, la prioridad que tendrán estos respecto a la deuda del Tesoro a la hora de ser amortizados, si las aportaciones a las entidades se realizarán en forma de préstamos participativos o de capital.Ni siquiera se conoce aún la cantidad exacta qué importe será necesario inyectar en las entidades, aunque habrá una aproximación esta semana, ya que está previsto que se haga pública la primera valoración independiente de los balances del sector bancario español encargada por el Gobierno a las consultoras Roland Berger y Oliver Wyman.
Como muestra de las sensaciones que empiezan a moverse en los mercados, Guntram B. Wolff, del Instituto Bruegel, ya deslizaba ayer que imponer pérdidas en los acreedores privados de los bancos sería una vía posible para mejorar la solvencia de España.
Las Bolsas europeas también perdieron el entusiasmo por el resultado electoral griego y volvieron a dejarse llevar por la incertidumbre que pesa sobre España. Tras avanzar más de un 1% a los pocos minutos de negociación, las ganancias se recortaron y, al cierre, Londres avanzó un 0,22%, París cedió un 0,69%, Fráncfort subió un 0,15%, y Milán retrocedió un 2,85%.
El euro llegó a subir hasta 1,2748 dólares en las horas de negociación asiáticas, pero al final de la sesión europea se colocaba en 1,2625.
La agencia de calificación crediticia estadounidense Fitch afirmó que los riesgos vinculados a la situación de Grecia disminuyeron tras las elecciones, pero sostuvo que la crisis de la zona del euro no remitirá todavía: “Es improbable que [la crisis] remita hasta que los líderes europeos articulen una hoja de ruta creíble para completar la unión monetaria con una mayor integración fiscal y financiera”. La incertidumbre persiste.
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 5 de 5
Siguiente
Último
|
|
En algunos países de centro y norte de Europa se ha creado una gran confusión sobre el coste real de la solidaridad de la Unión Europea con los países con dificultades como Grecia, Irlanda y Portugal. Un trabajo de Notre Europe, Les coûts budgétaires de la solidarité dans la zone euro: clarifications et mise en perspective, elaborado por Sofia Fernandes y Eulalia Rubio resulta muy clarificador.
En primer lugar, las autoras subrayan que la ayuda financiera a los Estados Miembros en dificultades "no ha consistido en subvenciones, sino en préstamos acordados en condiciones no favorables, inicialmente superiores al 5%" de interés. Después la UE se vio obligada a rebajar el tipo de interés en dos ocasiones, primero al 4,5% y después al 3,5%, ante el injustificable negocio que suponía el hecho de que muchos países captaban fondos del mercado al 3% o 4% y lo prestaban al 5,5%.
Las ayudas efectivas concedidas a Grecia hasta ahora ascienden a 73.000 millones del primer programa de 110.000 millones através de préstamos bilaterales de los Estados. Un segundo paquete de ayudas a través del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) prevé un total préstamos de 144.600 millones, se nutrirá de fondos obtenidos en los mercados con garantías de los Estados.
En el primer plan de ayudas de mayo, Alemania, el principal contribuyente, se comprometió a prestar unos 22.300 millones de euros a Grecia y garantizar préstamos del FEEF por valor de 211.000 millones. En el caso de España, los compromisos en estos dos supuestos ascienden a 9.800 y 92.54 millones. Son préstamos que hasta ahora no han supuesto costes para los Estados.
Estas cifras contrastan en volumen y significado con las ayudas efectivas concedidas a la banca. La Unión Europea ha aprobado ayudas públicas por valor de 4,6 billones de euros, de los que 850.000 corresponden al Reino Unido y 620.000 millones a Alemania. Los fondos utilizados hasta ahora han sido, sin embargo inferiores, unos 1,6 billones, de los que 1,2 billones han sido en forma de garantías y líneas de liquidez a la banca y 400.000 millones en inyecciones de capital o compra de activos tóxicos. La última valoración del coste de la crisis bancaria efectuada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), sitúa a Alemania como el país europeo que más dinero ha empleado efectivamente en reflotar a sus bancos con313.638 millones, que representan el 12,2% del PIB del que todavía los bancos no han devuelto el 11%. España figura en este ranking con un coste bajo, el 3,8% del PIB. Pero si se incluyen la ayuda de 100.000 millones pedidos por el Gobierno de Madrid a la UE para recapitalizar al banca, la factura se elevará a más del 13% del PIB.
En resumen, según Eurostat el impacto de todos los préstamos a Grecia tendrán como máximo un impacto del 1% en la deuda de la UE. Sin embargo, las ayudas a los bancos han generado un fuerte aumento del déficit que en algunos casos como el de Irlanda ha sido del 23%. En España sólo estamos empezando a descubrir nuestra realidad.
|
|
|
|
La eurozona veta la recapitalización directa de la banca que pide Rajoy
El Eurogrupo, a diferencia de la Comisión Europea, ve posible renegociar el rescate griego
Si Bruselas está estudiando fórmulas para “romper la vinculación entre el riesgo soberano y la deuda bancaria”, tal y como adelantó ayer el presidente de la Comisión, José Manuel Barroso, los socios europeos no quieren darse por enterados. Y si el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, busca la manera de que el rescate a España no compute como deuda pública, puede encontrarse con la misma negativa en redondo del resto de la eurozona. Fuentes europeas han asegurado este martes que el Eurogrupo espera que España pida finalmente las ayudas tan pronto como se conozca la evaluación de la banca que ultiman las consultoras Roland Berger y Oliver Wyman, y que hay una “fuerte preferencia” entre los países del euro para conceder las ayudas a través del fondo de rescate permanente (ESM, por sus siglas en inglés), un bazuca de medio billón de euros que aún no ha sido ratificado en las capitales europeas.
Los componentes del Eurogrupo (es decir, los 17 países del euro) se reunirán el jueves en Luxemburgo, pero fuentes europeas destacan que a pesar de las apetencias de España el programa asociado al rescate tendrá “estricta condicionalidad”. Si llega la petición española a tiempo, el Eurogrupo empezará a discutir las condiciones, relacionadas con la venta de activos de la banca, la necesidad de fusionar o incluso liquidar entidades y, en fin, la obligación de subir varios peldaños en la restructuración de la banca, en especial de las antiguas cajas.
“Según las reglas y los procedimientos vigentes, un ejercicio de recapitalización directa no es posible. Sé que hay centenares de personas diciendo que lo es, pero no lo es", ha resaltado un alto funcionario. "Hay centenares de personas que dicen que es deseable... especialmente en España", ha agregado con sorna. En definitiva, el Eurogrupo considera que "no es posible" que el fondo de rescate de la UE recapitalice directamente la banca española sin pasar por el Estado, tal y como reclama el Gobierno y la Comisión para evitar que el programa de ayuda "contamine" a la deuda pública.
Para el Eurogrupo, el enfoque de la reestructuración del sistema bancario español "es el correcto" y no puede hablarse de un fracaso del plan de rescate. "No se puede decir que no haya funcionado porque no hemos empezado". "Es necesario proporcionar una absoluta claridad sobre la estructura de los problemas en los balances individuales de los bancos. Esto no se hace firmando un programa y los problemas desaparecen. No se hace de la noche a la mañana, llevará tiempo", ha explicado el alto funcionario.
Mayor flexibilidad
La Comisión Europea considera también que es difícil reabrir el debate sobre la recapitalización directa de los bancos, que topa con la oposición frontal de Alemania. Bruselas cree que hay instrumentos dentro del tratado del fondo de rescate permanente que permiten hacerlo. La Comisión explica que, además, es favorable a una mayor flexibilidad con el objetivo de romper el vínculo entre deuda soberana y deuda bancaria. Ahora bien, Bruselas explica que ese es un debate que se zanjó hace tiempo sin ningún tipo de acuerdo y considera “poco probable” que se pueda modificar para que España lo utilice.
En el Ecofin del viernes empezará a verse que esas condiciones no están relacionadas únicamente con el sector financiero: los ministros de Economía de la UE pedirán a España en la reunión que celebran el viernes en Luxemburgo que aumente el IVA, suprima la deducción por vivienda y acelere el retraso de la edad de jubilación hasta los 67 años. El Ecofin reclamará además al Gobierno que presente antes de finales de julio un plan presupuestario bianual para 2013 y 2014 que detalle las medidas para corregir el déficit excesivo.
La prima de riesgo no ha dejado de subir en los últimos días. Una de las razones es que las ayudas supondrán, en las reglas actuales, un fuerte repunte de la deuda pública, lo que ha aumentado la incertidumbre entre los inversores. La otra razón es que el instrumento que se perfila para vehicular el rescate a España, el mecanismo permanente ESM, es el primero en cobrar en caso de un impago de España: eso incrementa también el susto de los inversores. En el caso del fondo de rescate actual (EFSF, por sus siglas en inglés), esa preeminencia en el cobro en caso de suspensión de pagos no existe.
El Eurogrupo discutirá también las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la eurozona. El FMI tiene previsto presentar el artículo IV para Europa en breve. Fuentes de la institución con sede en Washington aseguran a este diario que el análisis será muy duro, pese a que fuentes del Euro grupo explicaron hoy que el FMI coincide, grosso modo, en la evaluación de los males del continente que hace la propia eurozona: los países que tienen problemas de acceso a los mercados no tienen alternativa a la austeridad fiscal, y las refomas estructurales está bien encaminadas. El FMI, sin embargo, critica duramente la arquitectura institucional europea.
Ayuda a Atenas
Y Grecia, cómo no. Bruselas aseguró ayer que únicamente habrá “modificaciones menores” en las condiciones de la ayuda a Grecia. Pero fuentes europeas apuntaron que el Eurogrupo estaría dispuesto a una relajación del calendario previsto para el rescate de Grecia, aunque insistieron en que lo primero es formar un nuevo Gobierno y evaluar el estado de aplicación de las reformas a las que se comprometió Atenas a cambio de la ayuda, de 240.000 millones de euros.
Las elecciones han supuesto una cierta parálisis en Grecia. El tiempo perdido en la crisis política y el hecho de que la recesión en Grecia (y en el resto de Europa, con la excepción de Alemania) sea más dura de lo esperado abre la puerta a una discusión política con el nuevo Ejecutivo en Atenas. “Habrá una negociación técnica, hasta que las dos partes, incluido el Gobierno griego, estén en condiciones de aceptar el nuevo acuerdo”, según las fuentes consultadas.
|
|
|
|
Rajoy cree ahora que el resultado del rescate a la banca es "tremendamente dañino"
Donde dijo "muy bueno" ahora dice "tremendamente dañino". El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha pasado en poco más de una semana de sacar pecho por el rescate bancario a considerar sus resultados como algo malo para España. Lo ha hecho desde Los Cabos (México), donde se celebra la cumbre del G-20.
En esa reunión, Rajoy ha admitido que tras el anuncio del rescate la deuda soberana está sufriendo problemas, según han informado fuentes del Gobierno a la Agencia EFE. El presidente del Gobierno hizo referencia a la presión que los mercados han ejercido sobre el bono español, que este lunes marcaba un nuevo récord al alcanzar la prima de riesgo los 585 puntos.
Según estas mismas fuentes, el Ejecutivo español quería que el rescate se inyectase directamente en la banca sin implicar al Estado para evitar que afectase a la deuda soberana española. Esto no fue así por la oposición de algunos miembros del Eurogrupo como Alemania.
En este sentido también se expresó el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, quien dice que la UE busca "favorecer un sistema que evite la contaminación de la deuda soberana por parte de la deuda financiera". Sobre el rescate a España, Barroso no quiso dar detalles hasta que "formalice su petición". Entonces, "se abrirá una conversación con los Estados miembros para decidir cuál es la mejor forma de hacerlo".
Según la Agencia EFE, el borrador de la declaración final que adoptará el G-20 instará a los socios europeos a "mejorar el funcionamiento de los mercados financieros y a romper el vínculo entre deuda soberana y bancos". Rajoy también ha reclamado un calendario "preciso y concreto" para avanzar en la unión fiscal y bancaria.
DEL OPTIMISMO AL PESIMISMO EN SIETE DÍAS
Poco más de una semana han pasado de estas palabras de Rajoy: "Ayer ganó la credibilidad del euro, ayer ganó el futuro del euro, ayer ganó la Unión Europea y ayer ganó la posibilidad de que pronto en España se puedan recuperar los niveles de crédito que son necesarios para mejorar la inversión y el empleo".
Y lo que hace una semana era un triunfo por el que el presidente del Gobierno dijo presionar ("quien presionó fui yo", aseveró), hoy es un mecanismo "dañino" que afecta a la deuda de España. Lo que hace unos días era un acuerdo "muy bueno" que fue "difícil de conseguir" y que "deberíamos celebrar", es hoy una lacra para la deuda soberana.
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 5 de 5
Siguiente
Último
|
|
|
|
©2025 - Gabitos - Todos los derechos reservados | |
|
|
El HuffPost / EFE | Publicado: 19/06/2012 08:24 Actualizado: 19/06/2012 11:18