Repsol ha presentado una demanda contra Argentina ante el Centro  Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi)  por la expropiación “ilícita” del 51% de YPF, según confirmaron este lunes fuentes de la petrolera. La compañía acusa a Buenos Aires de violación del derecho internacional.
La solicitud de arbitraje ante la organización del Banco Mundial —la  principal institución en materia de arreglo de diferencias relativas a  inversiones internacionales— se presenta una vez transcurrido el plazo  de seis meses que se destina en estos casos para que la compañía  demandante exprese sus quejas ante la demandada.
Repsol y Repsol Butano denuncian la expropiación de las participaciones de  control de YPF y de YPF Gas, realizada a mediados de abril por el  Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, al considerarla  “discriminatoria” y “afectar únicamente” a una de las partes. La  compañía acusa además al Ejecutivo argentino de no haber acreditado la  existencia de una causa de utilidad pública, ni haber propuesto una  indemnización por la pérdida.
Repsol recrimina a Argentina el incumplimiento del Acuerdo para la  Promoción y la Protección Recíproca de Inversiones que los dos países  firmaron en 1991, así como de una obligación incluida en el estatuto de  YPF de formular una oferta pública de adquisición en el caso de que  retomase el control de la compañía, una decisión que, de acuerdo con el  grupo español, vulnera “no solo los legítimos derechos de Repsol, sino  también el de los restantes accionistas minoritarios.
El Ciadi deberá analizar la petición y en un plazo que suele durar  unos 30 días tendrá que decidir si el caso está sujeto a su  jurisdicción. En caso afirmativo, se procederá a la notificación a las  partes que, una vez constituido el tribunal de arbitraje, deberán  presentar sus escritos de alegaciones completos. Esta segunda fase suele  tener una duración media de entre 3 y 6 años.
El Gobierno argentino anunció en abril la intervención de YPF para  recuperar la soberanía hidrocarburífera del país. La petrolera española,  no obstante, logró ganar más sin YPF que cuando tenía la filial argentina en el tercer trimestre de este  año. Su beneficio alcanzó los 760 millones de euros entre julio y  septiembre, un 36,4% más que el del mismo periodo del año anterior  cuando todavía incluía a la filial argentina. Por otro lado, en los seis  meses posteriores a la expropiación, los títulos de YPF en Wall Street han caído a casi la mitad de su valor y la nueva dirección ha subido en dos ocasiones el precio  de los combustibles, mientras que Buenos Aires aún no ha conseguido que  ninguna multinacional extranjera aporte capital a los yacimientos de  Vaca Muerta que pretendía explotar Repsol.