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03 de agosto de 2013, 10:51 Londres, 3 ago (PL) En Londres, un reloj suele ser algo más que un artefacto para medir el tiempo y así lo confirma el artista británico Conrad Shawcross con su nuevo proyecto Timepiece.
En el techo del Roundhouse, edificio circular de 20 metros de altura ubicado al norte de esta capital, Shawcross colocó tres brazos mecánicos a modo de manecillas de un gigantesco reloj.
Cada una de ellas posee potentes lámparas las cuales iluminan toda la estancia y proyectan luces y sombras sobre los pilares ubicados en el suelo.
De este modo, puede también medirse el transcurrir de las horas de la misma forma que un reloj de sol.
A la distancia, las estructuras suspendidas en el techo tienen la silueta de una gigantesca navaja suiza de unos cuatro metros, cuyas laminas se mueven hacia fuera impulsadas por complejos engranajes mecánicos.
Shawcross es reconocido como uno de los más destacados artistas de su generación y sus obras exploran la física, la biología, la geometría, la filosofía y la cosmología.
El edificio Roundhouse, distintivo por su arquitectura victoriana, acogerá hasta el 25 de agosto esta singular pieza.
otf/ifb |
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