Una de las empresas de compra y venta de artículos
 por internet de Estados Unidos, Amazon, firmó un contrato con la 
Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por su sigla en 
inglés) por 600 millones de dólares con el objetivo de edificar una 
infraestructura privada que le ayudará a mantenerse actualizada.
La directora de información de la CIA, Jeanne Tisinger, explicó que 
el objetivo del organismo de inteligencia en relación al contrato para 
la aplicación del programa computación en nube por 10 años es proveer 
cambios significativos en la adquisición y análisis de datos y las 
maneras en que se incorpora este elemento en el sector comercial.
La computación en nube es un sistema informático basado en Internet y
 centros de datos remotos para gestionar servicios de información y 
aplicaciones. Este sistema permite que los consumidores de Amazon y las 
empresas inscritas en esa empresa gestionen archivos y utilicen 
aplicaciones sin necesidad de instalarlas en cualquier computadora con 
acceso a Internet.
En una conferencia de prensa en la universidad Virginia Tech, 
Mancomunidad de Virginia (este de los Estados Unidos), Tisinger agregó 
que varias decenas de personas están aprovechando el ciclo de innovación
 del sector comercial, en busca de eficiencias de costos en materia 
tecnológica y el uso del programa para proveer soluciones comunes.
La trabajadora de la CIA agregó que la idea de la unión es subir el 
nivel del comercio, mientras que diferentes analistas afirman que el 
cambio de política por parte de Amazon refleja el apoyo implícito de la 
CIA, como una apuesta para reforzar la seguridad y la fiabilidad.
Empresas de la vieja escuela como IBM y HP - empresas amenazadas por 
esta nueva forma de hacer las cosas - insta a duplicar los servicios de 
computación en nube como Amazon EC2 y Google Compute Engine dentro de 
los centros de datos privados.
El director ejecutivo y fundador de Amazon, Jeffrey Bezos, comunicó 
este lunes la compra del diario Washington Post por 250 millones de 
dólares con lo que se pondrá fin a la administración de la familia 
Graham que por cuatro generación había sido la encargada de liderar uno 
de los consorcios de noticias más importantes de Estados Unidos.