Juan Martín Del Potro durante su partido con Murray. C. BRUNSKILLGETTY
La consigna era clara. “Hoy hay que ganar, Argentina, hoy hay que ganar”. La coreaba un puñado de hinchas de ese país que convertían de cuando en cuando al Emirate Arena de Glasgow (Escocia) en un estadio albiceleste. Juan Martín Del Potro la tomó al pie de la letra y venció a Andy Murray, el número dos del mundo y el tenista del momento, en su casa, en Escocia, en el Reino Unido, a miles de kilómetros de Tandil (Argentina). Habían jugado hace pocos días en la final de los Juegos Olímpicos de Río, en el regreso sorpresivo del argentino al circuito. Había ganado el escocés en cuatro sets y se había quedado con la medalla de oro. Pero Del Potro, en un clima similar al que vivió en Brasil, con un estadio repleto, donde cada punto fue una batalla aparte, se tomó revancha en estas semifinales de la Copa Davis y puso el 1-0 para Argentina.
Si Río había presentado a un Del Potro que parecía cansado desde el primer punto del partido, el último mes le valió al argentino para preparase físicamente. En el medio estuvo el US Open que le dio ritmo de partidos a cinco sets. Esta tarde se ha mostrado intacto durante las más de cinco horas que duró el encuentro. Correcta decisión del equipo argentino que decidió colocarlo como segundo singlista para enfrentar al mejor tenista de Gran Bretaña en el primer punto de la serie.
Para vencer a Murray se necesita un tenis perfecto. Del Potro se acercó a eso en el primer set, donde solo cometió cuatro errores no forzados y tuvo una efectividad del 87% en su primer servicio. Comenzó a mostrar buenas sensaciones con el revés, con mucha más confianza que hace poco más de un mes cuando regresaba a las canchas. Pero su slice también se convirtió en un arma letal, lo comentan todos los jugadores que entrenan con él. Un break en el 3-3 lo llevó a adjudicarse el primer parcial por 6-4.
En el segundo parcial ambas aficiones, la argentina y la británica, se descontrolaron y el partido tuvo que ser detenido en algunos puntos, e incluso el árbitro debió otorgarle uno a Argentina. Murray comenzó a encontrar variantes sobre todo con algunos ángulos y tiros cortados hacia los costados. Con paciencia, insistió sobre el revés de Del Potro y no lo dejó dominar nunca desde la derecha (una de las mejores del mundo). Así logró llevarse el set e igualar el partido.
El partido fue similar en el tercer set. Con Murray jugando de manera perfecta los puntos clave y salvando un punto de set en contra con un magnífico globo. El escocés tuvo una baja efectividad en el primer servicio, pero concretó 35 aces,que lo salvaron en momentos difíciles. Consiguió también el tercer parcial para colocarse 2 a 1 arriba. Pero el argentino confió siempre en su físico, otrora traicionero, para sobreponerse y dar vuelta el partido.
El cuarto set fue todo del tandilense, que cuando domina con la derecha es imbatible. Murray perdió el foco y Del Potro aprovechó la desconcentración del escocés para romper rápido el servicio y llevarse el parcial sin complicaciones.
Punto por punto se juega la Copa Davis. Los tantos se van acortando a medida que aumentan las horas y las intervenciones del público y de los entrenadores toman cada vez más relevancia. Sintió el apoyo del público Del Potro. "Vamos, Juan" repetía desde el banquillo el capitán argentino Daniel Orsanic mientras el estadio se convertía en uno de fútbol argentino. Con un Murray mucho más agotado, el último set siempre mantuvo arriba al argentino, que, otra vez sin fallos y con un tenis perfecto, coronó una de las victorias más importantes de su carrera.
Fue otra página más en la rara historia del tenista argentino que desde que regresó al circuito este año en Wimbledon venció a los números 1, 2 y 3 del ránking. Ahora que Del Potro le sumó físico a su tenis, parece que pocos podrán pararlo. Mientras tanto, en Escocia, las gradas se tiñen de celeste y blanco.
DEPORTES › EL DOBLES DEL POTRO-MAYER CAYO ANTE LOS HERMANOS MURRAY EN CUATRO SETS
Argentina puede vivir otro gran día
El equipo de Copa Davis deberá ganar uno de los dos partidos de hoy para acceder a la final. El primero enfrentará a Andy Murray y Guido Pella, pero el quinto y seguramente decisivo tiene los protagonistas en duda, por el gran desgaste que sufrió la Torre de Tandil.
Por Ignacio Encabo
El saludo final. Gran Bretaña se impuso por 6-1, 3-6, 6-4 y 6-4, en casi tres horas. Imagen: AFP.
Tras perder ayer el punto de dobles ante los hermanos Andy y Jamie Murray y con su mejor tenista entre algodones, Argentina tendrá hoy otras dos nuevas oportunidades para conseguir en Glasgow un billete a la final de la Copa Davis. Juan Martín Del Potro, que junto a Leonardo Mayer perdió ayer 6-1, 3-6, 6-4 y 6-4 ante los Murray en el Emirates Arena, acumula ocho horas y dos minutos en cancha el fin de semana, un maratón, demasiado quizá para un jugador que volvió recientemente a competir al más alto nivel tras casi dos años en blanco por una lesión en la muñeca.
El tandilense, que el viernes empleó más de cinco horas para tumbar a Murray, debería jugar hoy un hipotético quinto partido. Hipotético aunque altamente probable, pues todos esperan que Murray, número dos del mundo, consiga el 2-2 ganando a Guido Pella el cuarto punto.
“No tenemos definido quién podrá jugar ese hipotético quinto punto. Lo hará el que esté en mejores condiciones para jugar. El cuarto sí está decidido: lo jugará Guido Pella”, anunció en conferencia de prensa el capitán argentino, Daniel Orsanic, al lado de un Del Potro que dejó entrever que no jugará hoy.
“Mi objetivo es acabar el año sano. Luché mucho para volver al tenis. Los dos últimos años lo vi en casa por televisión. Ahora tengo que ser inteligente porque es el inicio de mi nueva carrera. Quiero jugar muchos años más, no un partido más”, dijo el ex número cuatro del mundo. “No esperaba jugar ocho horas en dos días. Es mucho para mí ahora mismo, estoy intentando volver poco a poco. Hice un gran esfuerzo durante la semana y espero acabar la semana sano”, añadió. “Cuando en otro momento de mi vida jugaba un partido a cinco sets tal vez era normal, pero hoy no lo es y lo sufro mucho. Ayer hice un esfuerzo sobrehumano”, destacó Del Potro.
Según el reglamento de la Davis, los capitanes pueden hacer modificaciones para hoy. Si deciden cambiar a su tenista para el cuarto punto deberán comunicarlo, como mínimo, con una hora de antelación. Para el quinto partido tienen más margen, pues pueden tomar la decisión hasta diez minutos después de que concluya el cuarto encuentro. Salvo lesión o contratiempo de última hora, Murray y Pella chocarán en el cuarto. Para el quinto hay muchas opciones abiertas: Del Potro podría ser sustituido por Federico Delbonis o Mayer, mientras que Daniel Evans podría entrar por Edmund en el equipo británico. El duelo decisivo es todo un interrogante.
“Hablaremos después sobre eso y veremos qué decidimos. Espero que lo hagamos lo más pronto posible para que tengamos tiempo para prepararnos”, indicó el capitán del equipo defensor del título, Leon Smith. “Esperemos que Andy gane mañana el cuarto punto. Si lo hace, todo se pondrá muy interesante.” Tras el sorprendente 2-0 del viernes, Orsanic apostó al 3-0 y metió a Del Potro en el dobles junto a Mayer, cuando el jueves había anunciado a la dupla Mayer-Federico Delbonis.
“Para tomar la decisión me basé en el envión anímico que conseguimos el viernes, en la confianza que traía Juan Martín después de un partido histórico como ese. La intención era cerrar la serie hoy”, explicó Orsanic. “Pensé que era la mejor pareja que podíamos poner, el mejor equipo. Todas las apuestas son arriesgadas. Tenemos que arriesgar, a Gran Bretaña no le ganás con la lógica.”
Los hermanos Murray, que ganaron los seis partidos que jugaron juntos en la Davis, eran los grandes favoritos al triunfo en el dobles y no dieron lugar a la sorpresa. No obstante, fue una victoria esforzada de los escoceses, que crecieron en Dunblane, a 50 kilómetros del Emirates Arena. El primer set se fue en un abrir y cerrar de ojos, 26 minutos de parcial en el que la pareja escocesa, con Jamie Murray excelso, arrolló a la sudamericana. Del Potro y Mayer reaccionaron en el inicio del segundo, rompieron en el 2-0 y tuvieron una oportunidad al resto para cerrarlo en 6-2.
Finalmente, los argentinos ataron el set con el saque de Del Potro, dejando al equipo albiceleste a dos parciales de regresar a la final de la Davis. La pareja argentina se vio break arriba en el tercer parcial, pero los británicos rompieron inmediatamente para después volver a quebrar a sus rivales y encaminarse a la victoria. Los Murray no dejaron escapar la oportunidad y rompieron en blanco para certificar el triunfo y estirar la eliminatoria hasta hoy. Reino Unido remontó en dos ocasiones un 2-0: en 2013 ante Rusia y en 1930 ante Alemania. Hoy buscará alargar esa lista ante una Argentina que tiene a su mejor hombre entre interrogantes. ¿Está Del Potro para jugar un quinto punto?
Argentina buscará su primer título ante el equipo balcánico, que este domingo derrotó en la otra semifinal a Francia
Argentina se clasificó para la final de la Copa Davis de tenis después de que Leonardo Mayer se impusiese en el quinto y definitivo punto a Daniel Evans por 4-6, 6-3, 6-2 y 6-4, este domingo en Glasgow, y jugará por el título ante Croacia.
En su quinta final en la Davis (tras 1981, 2006, 2008 y 2011), Argentina buscará su primer título ante el equipo balcánico, que este domingo derrotó en la otra semifinal a Francia.
La eliminatoria por el título se disputará en Croacia entre el 25 y el 27 de noviembre.
En el primer partido de la jornada, el número uno británico Andy Murray igualó la eliminatoria a dos puntos tras imponerse claramente a Guido Pella por 6-3, 6-2 y 6-3, pese a que el doble campeón olímpico tuvo molestias física por las que tuvo que ser tratado en el tercer set.
Todo se iba a decidir en el quinto y definitivo punto, que en teoría iba a jugar Juan Martín del Potro, pero el capitán Argentino Daniel Orsanic decidió finalmente alinear a Mayer debido a que la ‘Torre de Tandil’, que aún se recupera de más de dos años de inactividad por las lesiones, se encontraba muy cansado tras acumular más de ocho horas de juego entre viernes (victoria épica ante Andy Murray) y el sábado (derrota en dobles junto a Mayer).
La apuesta le salió ganadora a Orsanic, pese a que Evans, llevado por el público británico, se apuntó el primer set por 4-6.
Pero Mayer, que en 2016 no ha mostrado el nivel de tenis que le llevó llevó a ocupar el puesto 21 del ránking a finales de 2015, no se descentró y poco a poco fue decantando el partido a su favor, superando fácilmente en las tres siguientes mangas al actual número 53 de la clasificación mundial.
“Hace mucho que no podía jugar por las lesiones que tuve este año, pero el equipo tiene confianza y pude ganar. Agradezco a la gente que vino hasta acá porque es muy difícil”, destacó Mayer a pie de pista nada más ganar.