El activista exige la liberación de todos los presos políticos, incluido él mismo, según el Movimiento San Isidro

El artista Luis Manuel Otero Alcántara está en huelga de hambre desde este lunes, según ha confirmado el Movimiento San Isidro (MSI), del que forma parte, este miércoles.

 

"Nos confirman que Luis Manuel Otero Alcántara está en huelga de hambre desde el lunes 27 de septiembre. Su cuerpo está más débil que nunca, acaba de estar enfermo con coronavirus y además está debilitado por las huelgas anteriores", reza el tuit en el que el colectivo informa de la situación.

 

Según el MSI, el artista pide su liberación y la de todos los presos políticos. "¡Lo queremos libre YA! ¡Basta de injusticias! ¡Basta de sacrificar vidas por solo pensar diferente!", exige el grupo en su mensaje.

 

Otero Alcántara, cabeza más visible del Movimiento, está en prisión nuevamente desde las protestas del pasado 11 de julio. El artista está acusado de desorden público, instigación para delinquir y desacato desde que en abril acudió a un cumpleaños en el que los vecinos de la barriada en que reside acabaron cantando Patria y Vida.

 

El activista ha sido detenido en numerosas ocasiones desde 2018, aunque la represión sobre él arreció en noviembre de 2020, cuando inició una huelga de hambre y sed junto a varios activistas para exigir la liberación del rapero Denis Solís. La acción finalizó con la irrupción de la policía el 26 de noviembre en la sede del Movimiento San Isidro en La Habana Vieja, donde estaban atrincherados los miembros del colectivo, y el arresto a los 14 activistas que estaban en el interior del inmueble.

 

Este suceso impulsó la protesta de un grupo de artistas e intelectuales el 27 de noviembre ante la entrada del Ministerio de Cultura para pedir soluciones a las autoridades del sector. En aquel momento el enfrentamiento entre los manifestantes y los funcionarios acabó incluso llegando a las manos.

 

A finales de abril, Otero Alcántara se declaró nuevamente en huelga de hambre y sed para exigir el fin del asedio policial ante su vivienda. La Seguridad del Estado entró durante la madrugada en su domicilio y lo trasladó al Hospital Calixto García, donde permaneció durante un mes controlado por las fuerzas de seguridad sin explicaciones.

 

A mediados de este mes, el artista fue considerado una de las 100 personas más influyentes del año por la revista Time.

 

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