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Respuesta  Mensaje 1 de 59 en el tema 
De: Matilda  (Mensaje original) Enviado: 28/07/2009 13:03
¿Quién es Jorge Alberto Sosa?


InSurGente.-  Este siniestro personaje fue subcomisario de la Policía Federal en Argentina. Está acusado de ser uno de los jefes de la tortura contra militantes de izquierda durante la última dictadura militar. El arresto se produjo en Valencia por orden del Juzgado Federal de Neuquén. Se tramitará su extradición para ser interrogado.


El ex subcomisario de la Policía Federal, Jorge Alberto Sosa fue detenido en España por orden del Juzgado Federal de Neuquén acusado de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar, en tanto se tramitará su extradición para ser indagado.

La secretaria del Juzgado Federal de Neuquén, Silvina Domínguez informó a Télam que Sosa, quien en 1976 se desempeñó como segundo jefe de la delegación Neuquén de la Policía Federal, fue detenido en España el pasado 7 de julio por orden de ese juzgado.

“Teníamos varias direcciones pero el accionar rápido de INTERPOL permitió su localización y detención en la ciudad de Valencia ( se había instalado en Ontinyent en 1992 junto a su familia y había adquirido la nacionalidad española)  , donde residía desde hace varios años”, precisó la funcionaria judicial.

El ex jefe policial, de 73 años, está imputado de integrar una asociación ilícita, de privación ilegítima de la libertad agravada y de tormentos agravados por 19 víctimas que sufrieron el accionar represivo de la dictadura a partir de 1976.

Una de las víctimas es el docente Orlando “Nano” Balbo quien fue detenido en el centro de Neuquén, en la mañana del 24 de marzo de 1976 por un grupo de tareas encabezado por el ex agente de Inteligencia, Raúl Guglielminetti, quien está procesado con prisión preventiva en la misma causa junto a otros 29 represores.

Balbo fue torturado e interrogado en instalaciones de la delegación local de la Policía Federal en aquel entonces durante varios días y por la noche era trasladado a la Unidad 9 del Servicio Penitenciario Federal de Neuquén.

Testimonios de otras víctimas acreditan el funcionamiento en esa delegación de la sala de torturas y el traslado de detenidos-desaparecidos en los primeros meses de 1976, hasta que se puso en marcha poco después el centro clandestino de detención “La Escuelita” en el batallón militar de Neuquén.

El Juzgado Federal de Neuquén ya inició los trámites para que a través de la Cancillería se concrete la extradición de Sosa para ser indagado en la causa, que está en su tramo final para ser elevada a juicio oral en las próximas semanas.

El expediente comprende a 39 víctimas con 29 represores acusados de delitos de lesa humanidad. La primera parte de la investigación fue a juicio oral el año pasado, instancia en la que fueron condenados ocho ex jefe militares y ex agentes de inteligencia del ejército por 17 víctimas, una de las cuales permanece detenida-desaparecida.


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Respuesta  Mensaje 30 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 08/08/2011 01:34
Sólo 25 fueron procesados y apenas 16 recibieron condenas

La participación de los médicos durante el terrorismo de Estado

Publicado el 7 de Agosto de 2011
En La Pampa, el caso de tres profesionales de la salud puso en discusión el plan sanitario montado por la dictadura. Hoy atienden en sus consultorios, pero testigos aseguran que asistieron a los militares y presenciaron torturas.
 

Los médicos Miguel Antonio Aragón, Máximo Pérez Oneto y Atilio Cornachione, que en la actualidad ejercen su profesión en La Pampa, se desempeñaron activamente durante las acciones represivas desatadas por la última dictadura militar en la llamada Subzona 14, correspondiente a esa provincia, de acuerdo con las denuncias de varios ex detenidos desaparecidos, quienes señalan que los tres médicos presenciaron sesiones de tortura, asistieron a secuestrados en cárceles clandestinas y aconsejaron a los guardias que manejaban la picana eléctrica para que aflojaran con las descargas, haciendo indicaciones tales como “paren que se nos va”, frente a personas al borde de la muerte.
Aragón es hoy jefe de la División Sanidad Policial del Servicio Penitenciario Federal pampeano. Es decir, se encarga de velar por las buenas condiciones físicas de los reclusos. Toda una paradoja. Su nombre, dirección, número telefónico y correo electrónico de contacto, figuran en un listado oficial como parte del Departamento Personal de la Jefatura de Policía provincial.
Lo de Pérez Oneto y Cornachione es menos rimbombante. El primero es un especialista en enfermedades de piel, mientras que el segundo se ocupa de hacer tratamientos clínicos en su consultorio de la pequeña localidad de Toay, cercana a la capital Santa Rosa. Este presente de tranquilidad contrasta con la mano dura de aquellos años, que tuvo a este grupo de médicos en plena actividad como uniformados, de acuerdo con los relatos precisos de ex detenidos desaparecidos. De los tres, Pérez Oneto aparece como el más implicado, a partir de la existencia de cientos de fojas con su firma en el libro de entradas y salidas de “pacientes” que agonizaban en los centros clandestinos asentados en La Pampa.
Pero el trío era, en realidad, un cuarteto. El otro integrante era Juan Héctor Savioli, también visto en aquellos operativos durante los años de plomo. Sin embargo, a diferencia del resto del grupo, está confirmado que a Savioli la justicia ya nunca lo va a molestar por su pasado. Murió hace pocas semanas.
La denuncia contra Aragón, Pérez Oneto y Cornachione fue realizada por los mismos sobrevivientes de esa época: Nery Greta Sander de Trucchi (ex empleada del gobierno provincial), Raquel Barabaschi (entonces estudiante de la UTN de General Pico), Mireya Regazzoli (hija del gobernador destituido con el golpe de Estado de 1976), Luis Barotto (esposo de Barabaschi), Hermelinda Gándara (un agente de policía) y las celadoras Nilda Stork y Norma Trohil. Varios de ellos reconocen a los tres profesionales como las personas que los visitaron mientras permanecieron en cautiverio.
En estos momentos, la investigación conjunta para llevar a los médicos a juicio es realizada por un grupo de pampeanos integrado por Juan Carlos Pumilla, Norberto Asquini, Daniel Bilbao y Laura Cristina Rodríguez Kessy, entre otros. El trabajo se basa en la pesquisa y seguimiento que, sin ningún apoyo, llevó a cabo en la década de 1980 el fallecido periodista Marcelino Acosta; esfuerzo que hoy retoma su nieto Claudio. A eso se le suma el aporte de la Liga Argentina por los Derechos del Hombre, a través de la abogada que el organismo tiene en la provincia, Carina Mercedes Salvay.
Mientras tanto, los acusados realizan sus tareas con total normalidad. Tienen vigentes sus matrículas de habilitación, ya que el Círculo Médico de La Pampa, entidad encargada de avalar las colegiaturas, siempre se negó a expedirse sobre el tema.
El año pasado, Aragón, Pérez Oneto y Cornachione pudieron zafar de la justicia. Fue en noviembre, cuando el Tribunal Oral Federal pampeano, integrado por José Mario Tripputi, Armando Márquez y Eugenio Krom, tras el primer juicio desarrollado en la provincia contra responsables de delitos de lesa humanidad, condenó a penas de entre ocho y 12 años de prisión en cárcel común a genocidas de la Subzona 14. Después del veredicto, los acusados Roberto Constantino, Omar Aguilera, Roberto Fiorucci y Carlos Reinhart (comisarios), sumados a Néstor Greppi (edecán del ex presidente Raúl Alfonsín) y a Néstor Cenizo, Athos Reta, Oscar Yorio y Hugo Marenchino, tuvieron que mudarse a la Colonia Penal de Santa Rosa, conocida como Unidad 4.
Durante ese proceso, los apellidos de los tres médicos fueron mencionados en varias oportunidades como parte del engranaje sanitario de las fuerzas de seguridad, pero recién ahora las pruebas y testimonios que se están acumulando pueden lograr que finalmente sean sentados en el banquillo como principales acusados.
La causa, que actualmente se encuentra en los Tribunales Federales de La Pampa, está en la etapa de instrucción, reuniendo información para formalizar la acusación penal contra los médicos. Los querellantes esperan que la elevación a juicio oral llegue antes de fin de año.
“Se juntaron indicios cada vez más firmes con el objetivo de demostrar el papel directo e indirecto que el personal de la salud ocupó durante la represión en nuestra provincia, tanto en fuerzas policiales como militares”, explicó la abogada Salvay a Tiempo Argentino. También recordó que “en aquellas audiencias, la exposición de Pérez Oneto fue entrecortada, soberbia y confusa, y estuvo al borde de la detención por falso testimonio”. La integrante de la Liga agregó que “las palabras de las víctimas son incontrastables, porque dejan en claro que los médicos se encontraban presentes dentro de las salas de tortura, les efectuaban controles de pulso y presión, y hasta se animaban a dar instrucciones a los carceleros, como por ejemplo atenuar la tortura para que la persona no muriera”. De acuerdo a la acusación de Salvay, “ellos eran los que asistían diariamente a los detenidos en los centros clandestinos, y revisaban tanto a los secuestrados como a los reclusos comunes”.
Hasta ahora, todo ese material recopilado viene chocando con una estrategia ensayada por la defensa de los médicos: invocan supuestos documentos con los que “prueban” que ellos no estuvieron en La Pampa en el momento de las torturas, a pesar de la palabra de los mismos torturados, que los señalan por haber formado parte de las sesiones de picana. “Cornachione –que por entonces reportaba en el Batallón 101 de Toay– dice que permaneció en La Pampa entre junio de 1977 y la navidad de 1978, hasta que le dieron de baja. En el caso de Aragón, argumenta que llegó a la provincia recién en marzo de 1979”, relató Salvay. La abogada señaló que este tipo de maniobras “es algo repetido en los juicios a los genocidas: informes que las mismas Fuerzas se encargan de producir, que distorsionan las fechas de estadía de los acusados en los lugares donde se les imputan delitos de lesa humanidad”.
José Schulman, secretario de la Liga y detenido-desaparecido en la cárcel de Coronda durante siete meses, recordó que es determinante hablar de “Estado terrorista, es decir, de un conjunto de instituciones que componían un sistema represivo estudiado y organizado”. La importancia de esta mirada radica en que “en ese marco, una de las patas en las que se basó la política de genocidio fue la llamada fuerza sanitaria, con profesionales militares, policiales y penitenciarios, y un sistema hospitalario que manejaba desde maternidades clandestinas hasta servicios de rutina para el control de los secuestrados”. Schulman considera que “el caso de La Pampa es un ejemplo de ese entramado”, algo que fue quedando en evidencia a partir de un minucioso trabajo de investigación y una serie de informaciones cruzadas por el periodista Marcelino Acosta, que tuvieron que esperar mucho tiempo para ver la luz.
“Aragón, por ejemplo –sostuvo Schulman–, siempre ocupó funciones públicas, y a pesar de que existen testimonios que lo inculpan, ni la provincia ni el Colegio Médico hicieron absolutamente nada al respecto. En otras palabras: la corporación médica se calló la boca.” Esto a pesar de los reclamos de la liga, que exigió que de inmediato fuera separado de su cargo. “Más allá de cualquier supuesta documentación que presente para limpiar su pasado, los juicios y la memoria se construyen sobre la base de la palabra de los sobrevivientes, y son los sobrevivientes los que lo vieron mientras los picaneaban”, remarcó Schulman.
El otro punto que obstaculiza el avance de los procesos es que en muchos casos estos médicos incluso hicieron brillantes carreras y hasta son “respetados” por la comunidad científica y por sus pacientes. “Obviamente, no saben lo que esta gente hacía durante la represión, como pasó con Carlos Jurio, Enrique Corsi y Luis Favole, que atendían a detenidos en la Unidad 9 de La Plata”, explicó Schulman.
Otros testimonios que incriminan a Aragón, Pérez Oneto y Cornachione son los de los doctores Jorge Irazusta, Américo Taborda y Stella Truol, perseguidos y amenazados por la dictadura. El primero debió exiliarse junto a su esposa y compañera de militancia en Canadá, donde reside actualmente, mientras que Taborda y Truol salvaron milagrosamente sus vidas después que los grupos de tareas pampeanos intentaran asesinarlos por sus trabajos dentro del Plan Provincial de Salud, proyecto que entre 1975 y 1977 trató de poner en pie al Hospital Municipal Lucio Molas y reivindicar el papel de la atención pública en esa región.
“Mirá que hay que aguantar entrar a una sala de tortura, bancarse los gritos de dolor, la sangre, el olor a piel quemada. Algo terrible, no es para cualquiera”, sostuvo Schulman, y recordó que “la tradición represiva que tiene este país hizo que la policía y los militares fueran preparados para eso. Pero lo increíble es que los médicos se hayan plegado. Justo ellos, formados en una profesión que debería salvar vidas.”
Por todos estos elementos, para la abogada Salvay aquellos médicos que formaron parte del engranaje represivo local “no fueron un eslabón más, sino una pieza especialmente necesaria dentro del sistema genocida, porque con sus conocimientos sabían manejar los límites del dolor y el sufrimiento de cada víctima. Hasta su muerte quedarán convertidos en médicos torturadores, por acción u omisión.” 

SALUDOS REVOLUCIONARIOS 

(Gran Papiyo)       


Respuesta  Mensaje 31 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 14/09/2011 03:02
Martes, 13 de septiembre de 2011
Empezó el megajuicio por el secuestro y desaparición de 281 víctimas en el circuito represivo de Ramón Camps

Veintiséis represores frente a sus atrocidades

Durante un año y medio, más de 500 testigos contarán cómo fue el operativo en el que se secuestró a la hija de Chicha Mariani, cómo se torturó a los chicos de la Noche de los Lápices, qué le hicieron a Jacobo Timerman, entre otras causas emblemáticas.

Por Alejandra Dandan
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En el centro, el médico Bergés, uno de los represores que empezaron a ser juzgados por la represión ilegal ordenada por el fallecido Ramón Camps.

Esas palabras que podían llegar a perforarles los oídos a medida que bajaban esposados de los móviles del Servicio Penitenciario Federal se potenciaron, abrumadoras, dentro de la sala, acaso acentuadas por las escenográficas formas del Teatro platense de la AMIA. Víctimas y sus victimarios se juntaron cuando todo estaba listo para comenzar un juicio histórico: el primero oral por los crímenes cometidos durante la dictadura en los centros clandestinos que integraron el llamado Circuito Camps. Pese a eso, a que todo estaba listo, algo pasó. Durante veinte minutos la sala estuvo sin los jueces del Tribunal Oral Criminal Federal 1. Como en un ritual en el que de pronto se alteran todas las rutinas, las víctimas, solas, frente a las espaldas de los acusados, soltaron lo único que tenían a mano: sus palabras. ¡Cobardessss!, gritó alguien. ¡Asesino! ¡Hijos de putaaaa!, decía la sala convertida en una única voz. ¡Abusadores! ¡Violadores! ¡Pervertidos!, seguían. Y empezaron a pronunciar el nombre mántrico de los caídos: Jorge Julio López, Adriana Calvo. “¡Pónganle esposas al segundo que se hace el rengooo!”, dijeron. “¡Contestá dónde está López!”, se oyó. Dijeron y cantaron “Como a los nazis...”. Dijeron presente por los 30 mil desaparecidos. Volvieron a cantar hasta que entonces sí, dos horas después del comienzo previsto, y mucho después de que cada uno haya ocupado su lugar, el presidente del TOCF 1 Carlos Rozanski entró a empezar con el juicio.

El proceso que comenzó en La Plata tiene las dimensiones de una megacausa. Varios tramos de seis centros clandestinos que integraron el circuito de la Jefatura de Policía bonaerense a cargo del brutal Ramón Camps confluyeron en este juicio que reunirá durante un año y medio el tránsito de más de 500 testigos, por 281 víctimas, entre las que hay menores de edad y embarazadas, en contra de 26 represores, entre los cuales están las figuras negras de la represión de la provincia.

El jefe de la Brigada de Inteligencia de la Policía Bonaerense –el primer lugar al que llegaban las víctimas secuestradas y espacio de distribución de los prisioneros–, el policía Miguel Etchecolatz todavía no había llegado a la sala cuando empezó la audiencia. En ese comienzo, en cambio, se habían sentado los otros acusados, tres de los cuales subieron al escenario arrastrados en sillas de ruedas. Entre ellos, dos de los tres militares juzgados: Ibérico Saint Jean, ex gobernador bonaerense que llegó al juicio defendido por su hijo. Agustín Arias Duval, el ex jefe del Destacamento de Inteligencia 101 del Ejército y entre los dos se sentó el médico de policía Jorge Bergés, también reducido a la silla de ruedas. El resto ocupó otras tres tumultuosas hileras. En un extremo, se sentó el primer civil con rango de ministro que llega a ser juzgado por delitos de lesa humanidad: Jaime Lamont Smart, ex ministro de Gobierno de Saint Jean, pero además abogado que consiguió poco más tarde la autorización del Tribunal para asumir su propia defensa. La decisión, complicada, criticada en otras jurisdicciones porque de ese modo puede preguntar a los testigos y convertir el interrogatorio en una suerte de careo, le permitió rápidamente desplazarse, maletín en mano, de la silla de acusado a la mesa de los abogados. Los otros acusados son mayoritariamente los ex policías de la Bonaerense que libraron la batalla en nombre de la represión. Entre ellos, Norberto Cozzani, mano derecha de Etchecolatz, y Hugo Alberto Gullana, su chofer, acusado de robarse a Clara Anahí, la nieta de María Isabel “Chicha” Chorobick de Mariani.

Chicha también estaba ahí. Pese a sus ojos casi ciegos, a su bastón, se sentó a la espera, como en cada comienzo de juicio, de que, a lo mejor, alguno de ellos, esta vez, diga algo. “Para mí es muy distinto este juicio de los otros porque se va a juzgar el caso de Clara Anahí”, dijo Chicha. “No tengo muchas esperanzas porque los veo tan crueles, tan duros, pero uno siempre espera en un rincón del corazón que uno de ellos diga la verdad, es cierto que ya se murieron muchos, pero tengo la esperanza de que alguno hable.”

El hijo de Saint Jean en calidad de abogado dijo que su padre de 89 años tiene problemas de salud avalados por informes de tres peritos forenses: “¡Es estéril e ilegal que esté presenciando el debate en esta sala!”, clamó. La abogada de Arias Duval pidió lo mismo e invocó un cuadro de cáncer terminal. Se sumó el abogado de Rodolfo Campos, el tercer militar juzgado, subjefe de policía de Camps.

Rozanski reprendió al Servicio Penitenciario por las demoras. Y el más demorado fue Etchecolatz, que llegó después de la una de la tarde. Ante la ausencia, el juicio empezó con la lectura de los dos únicos tramos que no lo tienen de acusado. Uno, contra Bergés por falsificación de documentos en la apropiación de Pedro Luis Nadal García, y el otro contra el policía retirado Santiago Antonini por el secuestro de Chicha Mariani el 10 de diciembre de 1976, en su casa, durante media hora, pero cuando la patota que integraba buscaba a su hijo, a días del ataque a la casa de la calle 30. Ese comienzo azaroso por la ausencia de Etchecolatz se convirtió sin embargo en una entrada simbólica porque plantó en medio de la sala el ataque a la imprenta de Montoneros y el asesinato de los militantes de la calle 30.

Antonini estuvo en la casa de Chicha Mariani después del ataque. Ella lo reconoció en una audiencia de los Juicios por la Verdad, pero él participó a su vez del ataque a la casa de la calle 30, como surge de sus fojas de servicio. La Jefatura lo felicitó después del ataque “por haber participado” y abatir a quienes mantenían ocultas armas y hacer un hallazgo que calificaron de “sorprendente”, por la imprenta de Montoneros. El ataque, se recordó en la sala, buscó “anular el funcionamiento de una imprenta oculta ingeniosamente en la pared, donde se imprimía material de Montoneros”. Y “el objetivo principal fue exterminar a los ocupantes de la casa”. Recordaron el impresionante despliegue de fuerzas militares y policiales, la presencia anticipada de morgueros: “Esta es una muestra de la brutalidad que tenía quien comandó ese ataque, que fue Miguel Etchecolatz”, recordó la elevación. Hubo despliegue de todo tipo de armamentos, explosivos, lanzacohetes. “De allí que no hubo un enfrentamiento, sino una verdadera masacre planificada que cumplió con su objetivo de eliminar a los ocupantes para hacer tronar el escarmiento a implantar en La Plata y en el país y llevarse como trofeo a la pequeña hija de dos militantes de Montoneros.”

Ese será un eje al que volverá el debate en los primeros tiempos. De acuerdo con el cronograma, el debate comenzará con los casos que rodearon el ataque de la calle 30, el robo de Clara Anahí y el secuestro de Chicha. Esa escala permitirá ingresar a uno de los microcircuitos integrado por la Brigada de Investigaciones de La Plata, Comisaría V con jurisdicción en el lugar y el Pozo de Arana.

Claudia Belingieri es perito de la causa, investigadora a cargo de los archivos de la ex Dipba, la Dirección de Inteligencia de la Bonaerense. “Los 29 centros clandestinos que incluyó el Circuito Camps funcionaron en comisarías, puestos y destacamentos, es decir –dice–, estaban montados sobre la estructura de la Policía Bonaerense que conducía Camps y Camps militarizó a la policía para ponerla al servicio de la represión.”

El debate avanzará así en causas emblemáticas que tuvieron lugar en ese tramo: el secuestro de los Graiver, el de Jacobo Timerman, Julio López y Adriana Calvo, quien seguramente encontrará la forma de estar presente pese a su muerte, porque la fiscalía pidió que se incorpore uno de sus últimos testimonios filmados. Lo mismo se hará con Julio López.

Emilce Moler era estudiante de Bellas Artes cuando empezó a militar en la Unión de Estudiantes Secundarios. Parte de los jóvenes secuestrados en la llamada Noche de los Lápices, otro de los casos que integrarán la primera parte del juicio. Emilce, que estuvo ayer en la sala, aclaró que no los secuestraron por la pelea del boleto estudiantil, que eso sucedió un año antes, que los secuestraron por la UES. Ella pasó el primer tramo de su secuestro en el Pozo de Arana, de ahí pasó a la Brigada de Quilmes, luego a la Comisaría de Valentín Alsina y luego quedó blanqueada en el Penal de Devoto hasta 1978, en que salió en libertad vigilada. “Yo siento que éste es un juicio bueno y reparador”, dijo al comienzo, todavía en la entrada. “Un juicio de esta magnitud es muy emblemático porque se puede centralizar el Circuito Camps, pero porque también aparece un civil, policías y militares: es una muestra de lo que pasaba con los distintos actores que intervinieron desde distintos lugares para que la represión de una dictadura cívico-militar pudiera darse en los distintos grados.”

Afuera, mientras tanto, estaban los que todavía no iban a entrar. Las banderas de HIJOS La Plata y de las agrupaciones que montaron una radio abierta. Las fotos de Jorge Julio López. El paso raudo de Etchecolatz más tarde bajando en medio de nuevos gritos de cobarde y de asesino. Las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo. Vera Jarach, Carmen Lapacó, Enriqueta Maroni, Mirta Baravalle, Elsa Pavón, Adelina de Alaye, Alba “Nieca” Martino. Las querellantes de la Secretaría de Derechos Humanos de Nación, Justicia Ya!, Abuelas de Plaza de Mayo y Alejo Ramos Padilla, que acompañó por última vez a Chicha Mariani porque asumirá de juez en los próximos días. Entre el público, hubo sobrevivientes de todos los centros. La audiencia seguirá hoy y se hará lunes y martes en La Plata.

SALUDOS REVOLUCIONARIOS 

(Gran Papiyo)           


Respuesta  Mensaje 32 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 27/10/2011 04:07
Primera sentencia por los crímenes de la Esma

Perpetua para Astiz, el "Tigre" Acosta, Cavallo, Donda, Pernías, Rádice y otros seis genocidas

Al cabo de 22 meses de debate y el testimonio de más de 250 testigos, y luego de desestimar distintos planteos de nulidad y/o prescripción presentados por la defensa de los acusados, el tribunal que integran los jueces Daniel Obligado, Ricardo Farías y Germán Castelli juzgó a 18 represores, acusados de secuestro, tortura y homicidio contra 86 víctimas, entre las cuales se encuentran el escritor y periodista Rodolfo Walsh, las monjas francesas Alice Domon y Leonie Duquet, Azucena Villaflor, Mary Bianco y Ester de Careaga, fundadoras de Madres de Plaza de Mayo. El TOF5 dictó prisión perpetua para Alfredo Astiz, Jorge “Tigre” Acosta, Ricardo Cavallo, Antonio Pernías, José Montes, Raúl Scheller, Jorge Rádice, Adolfo Donda, Alberto González, Néstor Savio, Julio César Coronel, Ernesto Weber. Manuel García Tallada y Juan Carlos Fotea recibieron 25 años de prisión. Carlos Capdevilla deberá cumplir 20 años de prisión, y Juan Antonio Azic 18 años. Por último, Juan Carlos Rolón y Pablo García Velazco fueron absueltos aunque no recuperarán la libertad por estar imputados en otras causas por delitos de lesa humanidad.

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Serán 18 los represores acusados, por 86 delitos de privación ilegal de la libertad, tormentos y homicidios.

El juicio que empezó el 11 de diciembre de 2009 es uno de los tramos en que se dividió la llamada megacausa ESMA. El proceso resultó más largo de lo previsto, entre otras razones por una de las características que distinguieron este centro clandestino de detención que funcionó durante la última dictadura militar bajo la órbita de la Marina: es uno de los pocos campos de concentración con supervivientes que pasaron uno, dos y hasta cuatro años secuestrados.

La densidad de los relatos le dieron al juicio otra singularidad. La sala tuvo múltiples querellas, integradas por organismos de derechos humanos que multiplicaron las voces de la acusación pero también las perspectivas. La defensa de la mayoría de los acusados, por su parte, hizo un culto al “heroísmo de los mártires”. Los más moderados esgrimieron la teoría de los dos demonios, pero todos se consideraron víctimas y "perseguidos políticos".

La Fiscalía había solicitado prisión perpetua para Alfredo Astiz, Jorge “Tigre” Acosta, Julio César Coronel, Jorge Rádice, Adolfo Donda, Antonio Pernías, Juan Carlos Rolón, Raúl Scheller, Alberto González, Juan Carlos Fotea, Ernesto Weber, Ricardo Cavallo, Néstor Savio, Manuel García Tallada; y 25 años de prisión para Antonio Montes, Juan Antonio Azic, Pablo García Velazco y Carlos Capdevila.

SALUDOS REVOLUCIONARIOS 

(Gran Papiyo)         


Respuesta  Mensaje 33 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 27/10/2011 04:23

Patricia Walsh: "Es la lucha más digna de la historia reciente de los argentinos"

La hija del escritor y periodista desaparecido Rodolfo Walsh, calificó de "jornada histórica" la audiencia final de la causa ESMA en la que se conocerá el veredicto contra Alfredo Astiz y diecisiete represores más por crímenes de lesa humanidad. Además, aseguró que demuestra "el avance enorme de la lucha colectiva por los derechos humanos".

En su testimonio ante el Tribunal, Walsh reclamó a uno de los procesados, Jorge "Tigre" Acosta, por el destino del cuerpo de su padre y solicitó que se preserve el campo de deportes de la ESMA para que se realicen peritajes para confirmar o no la existencia de cadáveres calcinados en el predio ubicado entre la Avenida Cantilo y la costa del Río de la Plata.

La hija del autor de "Operación Masacre" destacó que, durante el juicio iniciado hace 22 meses, "escuchar testimonios de sobrevivientes por casi dos años fue muy duro para los familiares, el juicio fue revelador porque contó con testigos que declararon por primera vez y que aportaron datos desconocidos".

En el caso de su padre, la exlegisladora puntualizó que "por primera vez hubo testimonios que contaron con más detalle lo ocurrido en la última casa en la que vivió mi padre (en San Vicente), que quedó completamente destruida, donde robaron su último cuento `Juan se iba por el río´ y que actualmente está ocupada por una familia de un policía retirado".

Recordó también que se pudo "reconstruir lo que pasó en el río Carapachay, en el Delta del Tigre, en la última casa que mi padre alquiló y donde pudimos probar que los hechos que ocurrieron antes de su desaparición, también involucraron a tres casas vecinas que fueron ocupadas por un grupo de tareas y sus ocupantes secuestrados y llevados a la ESMA".

Walsh defendió el pedido de la querella conformada por el colectivo Justicia Ya y la agrupación Memoria Verdad y Justicia, de "reclusión perpetua en cárcel común para todos los acusados" en el marco de "un genocidio planificado". "Son crímenes de lesa humanidad y no se puede pensar en cumplir condena en barrios privados o en los domicilios por el sólo hecho de ser mayores, cuando existen servicios médicos en las unidades carcelarias", afirmó.

Rodolfo Walsh fue baleado por un grupo de tareas de la ESMA el 25 de marzo de 1977 en el barrio porteño de San Cristóbal. El periodista, que acababa de escribir y distribuir la Carta Abierta a la Junta Militar al cumplirse un año del golpe militar, respondió al ataque y, malherido fue trasladado al centro clandestino que funcionó en la ex ESMA, donde fue visto por algunos secuestrados.

SALUDOS REVOLUCIONARIOS 

(Gran Papiyo)           


Respuesta  Mensaje 34 de 59 en el tema 
De: Marthola Enviado: 28/10/2011 22:56
ADONDE VAYAN LOS IREMOS A BUSCAR: de a uno no va a quedar ninguno

Respuesta  Mensaje 35 de 59 en el tema 
De: algoporalgo Enviado: 29/10/2011 01:38
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: algoporalgo  (Mensaje original) Enviado: 27/10/2011 18:11
Clinton: Fidel Castro debe abandonar el poder



WASHINGTON – Estados Unidos considera que Fidel Castro debe abandonar el poder pero parece que el líder cubano no se irá a ninguna parte, dijo el jueves la secretaria de Estado Hillary Clinton durante una audiencia legislativa.

Al comparecer ante la comisión de relaciones exteriores de la cámara baja, Clinton señaló que "nuestra posición ha sido la misma durante más de 50 años. Creemos que Fidel Castro debe irse. Desafortunadamente, no parece que irá a ninguna parte".

Clinton explicó que la política estadounidense hacia Cuba tiene un enfoque doble, porque "hemos tratado de promover cambios y reformas pero, al mismo tiempo, vamos a continuar trabajando directamente con sectores de la población cubana, a la que "brindamos ayuda humanitaria, incluyendo alimentos, medicinas que no requieren prescripción médica y más".

Castro gobernó Cuba desde que derrocó en 1959 al presidente Fulgencio Batista hasta 2006, cuando delegó el poder en su hermano Raúl. Estados Unidos no mantiene relaciones diplomáticas formales con el gobierno de la isla comunista, a la que aplica desde 1962 un embargo comercial y que la Asamblea General de la ONU rechazó esta semana, tal como lo ha hecho desde 1991.

Clinton también señaló que en ningún momento el gobierno estadounidense ha estado dispuesto a dar concesiones unilaterales al gobierno cubano o atenuar el embargo para lograr la liberación del estadounidense Alan Gross, condenado este año a 15 años de cárcel por delitos contra el Estado cubano.

The Associated Press reportó este mes que Estados Unidos ofreció permitir que un espía cubano convicto regresara a la isla a cambio de la liberación de Gross.


http://latino.foxnews.com/latino/news/2011/10/27/clinton-fidel-castro-debe-abandonar-el-

Respuesta  Mensaje 36 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 10/11/2011 04:00
El ex capellán de la policía de Rosario Eugenio Zitelli será indagado por torturas y desapariciones

Preso por delitos de lesa humanidad

Era el párroco de Casilda. Constituyó su prisión domiciliaria en una casa de retiros espirituales. En la causa se señaló que “ingresaba a la sala de torturas” del Servicio de Informaciones y que era parte del aparato represivo.

Por José Maggi
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Eugenio Zatelli fue capellán de la policía de Rosario y lo acusan de haber sido parte del aparato represivo.

El ex capellán de la policía de Rosario Eugenio Zitelli, acusado por delitos de lesa humanidad cometidos en el Servicio de Informaciones de esa ciudad, quedó detenido ayer. El juez federal Marcelo Bailaque ordenó ayer la indagatoria de 17 represores, a quienes interrogará en los próximos días. Lo hizo en el marco de la llamada causa Feced residual. El nombre más impactante de la lista es el del sacerdote. La lista la encabeza Jorge Rafael Videla, le siguen el ex general Ramón Genaro Díaz Bessone y Alfredo Sotera –jefe de la inteligencia militar– y llega hasta quien hace unos días era el párroco de Casilda. “Es un paso trascendental para la Justicia, porque en la región no había ningún miembro de la jerarquía eclesiástica detenido por casos de terrorismo de Estado”, señalo el fiscal federal Gonzalo Stara, quien había pedido la detención del sacerdote por el caso de Eduardo Bracaccini, entre otros, desaparecido de Casilda.

El juez Bailaque reveló a Página/12 que “Zitelli está detenido y se constituyó en prisión domiciliaria en una casa de retiros espirituales de Zavalla” y designó un defensor particular, Eduardo Romera. Este letrado fue defensor en su momento de Eduardo J. López, el ex presidente de Ñuls que tuvo varios trámites procesales ante la Justicia Federal.

La detención e indagatoria del ex capellán de la Unidad Regional II entre los años 1964 y 1983, Eugenio Zitelli, era una de las tantas cuentas pendientes de la Justicia tras los reiterados pedidos de las querellas y la fiscalía de la causa Díaz Bessone.

Tras los testimonios de los sobrevivientes del Servicio de Informaciones de Dorrego y San Lorenzo en el desarrollo del juicio oral en curso, se había solicitado la indagatoria al sacerdote que hoy vive en Casilda y está a cargo de la parroquia de esa ciudad, por considerar que existían pruebas suficientes para demostrar el “apoyo explícito de las autoridades de la Iglesia al golpe genocida en la UR II”, según sostuvo en su momento la abogada querellante Gabriela Durruty y agregó: “En esa convicción esta querella solicitó al juez Bailaque que indague a Eugenio Zitelli por los delitos de privación ilegítima de la libertad, tormentos y asociación ilícita, y esperamos que así lo haga”, pedido que se está concretando en estas horas.

Por su parte, en sus alegatos, el fiscal Stara aseguró que “está registrado” que el cura Zitelli “ingresaba a la sala de torturas” del Servicio de Informaciones y que era parte del aparato de represión montado en ese centro clandestino de detención.

Muchos fueron los testimonios que complicaron al ex capellán. Uno de ellos fue el de Ana Ferrari, quien recordó que cuando la trasladaron a la Alcaidía de Mujeres, a metros del SI, Zitelli les habló a las presas y les dijo que tenían que entender “que la tortura era un arma más de la guerra que estamos viviendo”.

El listado de los represores con pedido de indagatoria en esta causa se completa con cuatro de los actuales imputados en la causa Díaz Bessone: Mario Marcote, Rubén Lofiego, Carlos Scortecchini y Ramón Vergara. Los cuatro quedaron detenidos de inmediato al presentarse ayer para comenzar la audiencia oral del juicio.

También figuran en la nómina Lucio César Nast; Ramón Telmo Alcides Ibarra; Julio Héctor Fermoselle; Diego Portillo, Ernesto Vallejo, Carlos Ulpiano Altamirano, Ovidio Marcelo Olazagoitia, Eduardo Dugour y Ricardo Corrales, la mano derecha de Agustín Feced.

Ayer, el magistrado les tomó declaración a dos ex policías, Portillo y Vallejos, y hoy hará lo propio con Ibarra, que nombró al mismo defensor particular que Díaz Bessone, el doctor Gonzalo Miño.

Uno de los personajes más oscuros del listado es sin dudas Corrales, quien fuera la mano derecha de Feced durante toda su jefatura en la Unidad Regional II. Este es señalado como uno de los principales colaboradores del terrorismo de Estado en la ciudad y sobre él aún no recayó ningún tipo de imputación. En la década del ’70 trabajó en inteligencia de la policía, y pesan sobre él acusaciones de homicidios, tormentos, privación de la libertad y asociación ilícita. Corrales acompañaba a su jefe en todos los operativos.

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(Gran Papiyo)         


Respuesta  Mensaje 37 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 27/01/2012 17:41
UN EX FUNCIONARIO DE ESTADOS UNIDOS RATIFICO QUE HUBO UN PLAN SISTEMATICO DE APROPIACION DE NIÑOS DURANTE LA ULTIMA DICTADURA

Un secreto a voces para la diplomacia norteamericana

Elliot Abrams ratificó la autenticidad de un documento desclasificado de su país que fue revelado por Página/12. El memo demuestra que la dictadura se negaba a entregar a los chicos apropiados a sus familiares.

Por Victoria Ginzberg
“Pensábamos que no se refería sólo a uno o dos niños o uno o dos oficiales, era un plan”, dijo Elliot Abrams.
Imagen: Joaquín Salguero.

Elliot Abrams se presentó como consultor, casado, nacido en Estados Unidos el 24 de enero de 1948. Su voz y figura llegaban a la sala de audiencias de los tribunales de Comodoro Py a través de una pantalla. Declaró por videoconferencia desde Washington en el juicio por el plan sistemático de apropiación de niños durante la última dictadura. En 1982 era subsecretario de Derechos Humanos de Estados Unidos y en ese rol mantuvo una conversación con el embajador argentino en ese país, Lucio García del Solar, en la que este último admitió que tanto el canciller Juan Ramón Aguirre Lanari como el dictador Reynaldo Benito Bignone estaban al tanto del robo de hijos de desaparecidos. El hecho fue documentado en un memo de carácter reservado revelado en 2002 por Página/12. Ayer, Abrams ratificó el contenido de ese papel y explicó: “Estábamos (el gobierno de los Estados Unidos) al tanto de que algunos niños habían sido sustraídos estando los padres en prisión o fallecidos y pensábamos que no se refería sólo a uno o dos niños o uno o dos oficiales que hubiesen sustraído a los niños, sabíamos que era un plan porque había mucha gente que encarcelaban o asesinaban y nos parecía que el gobierno militar había decidido que algunos niños se entregasen a otras familias”.

El memo

Abrams y García del Solar se reunieron el 3 de diciembre de 1982 a la una del mediodía en la confitería Jockey Club, en el hotel Ritz-Carleton de Washington. “Había dos temas principales, la certificación (una especie de certificado de buena conducta en derechos humanos) y la cuestión de los desaparecidos”, apuntó el funcionario estadounidense en un documento que fue parte de los 4677 cables secretos sobre el terrorismo de Estado en la Argentina que el Departamento de Estado desclasificó en agosto de 2002.

Abrams informó luego del encuentro a sus superiores: “Toqué con el embajador el tema de los niños, como los chicos nacidos en prisión o los chicos sacados a sus familias durante la guerra sucia. Mientras los desaparecidos estaban muertos, estos niños estaban vivos y esto era, en un sentido, el más grave problema humanitario. El embajador coincidió completamente y ya había hablado esto con su ministro de Relaciones Exteriores y su presidente. Ellos no rechazaron su visión pero señalaron el problema de, por ejemplo, sacar los chicos de sus padres adoptivos. Yo sugerí que ese problema debería ser manejado por la Iglesia o por una comisión que incluya la Iglesia, a doctores, etc. Las acciones respecto a estos chicos podrían tener un enorme contenido humanitario y político. Nuevamente el embajador dijo que estaba completamente de acuerdo y que tocaría este punto una vez más con su capital”.

La audiencia

El papel que prueba que de Bignone para abajo estaban enterados de las apropiaciones de niños, y que la dictadura se negaba a devolver a los hijos de desaparecidos a sus familias biológicas aun luego de la sugerencia de los Estados Unidos, fue publicado por este diario el 23 de agosto de 2002 y presentado como prueba en el juicio por los abogados de Abuelas de Plaza de Mayo. Ayer Abrams ratificó la veracidad del memo y su contenido. Y, a partir de las preguntas de Alan Iud y María Inés Bedia, representantes de Abuelas, y la jueza María del Carmen Roqueta, presidenta del tribunal, explicó el contexto en el que fue elaborado. La declaración contaba con traducción simultánea, pero el ex funcionario republicano, que estaba en el consulado argentino en Washington, no la esperaba, aunque sí respondía en inglés.

–Según su experiencia, ¿este diálogo con García del Solar, en qué nivel de diplomacia lo ubica? –quisieron saber los abogados de Abuelas.

–Se trata de una conversación importante, el hecho de que sólo estuviéramos nosotros dos fue significativo, para así poder hablar más honestamente que si hubiese más gente, el hecho de redactar este memo tan detallado indica que era de suma importancia.

–¿Conoció casos análogos a la Argentina sobre los niños en otros países?

–No. Había muchas juntas militares en los países de América latina y en Asia, no recuerdo ningún caso similar a éste de niños sustraídos, éste fue el peor caso.

–¿Al tomar conocimiento de que varios niños fueron sustraídos, tomó conocimiento o al menos elaboró alguna hipótesis sobre por qué esos niños eran sustraídos y no entregados a la familia? –le preguntó Roqueta.

–Sí, me acuerdo de dos factores importantes. Uno era que las familias de los desaparecidos eran vistas como no aptas para criarlos, que eran comunistas. El segundo factor es que en algunos casos las familias a los que los entregaban no podían tener hijos, entonces lo consideraban como una bendición para estas familias leales al régimen.

–¿Esta es su opinión o tuvo otros elementos para llegar a este análisis?

–No es un análisis propio, sino lo que circulaba en el gobierno de Estados Unidos, lo que no recuerdo es en qué se fundamentaba. Pero me acuerdo que era sí, no recuerdo la fuente.

–De acá surge que el embajador iba a transmitir esta preocupación al presidente de la Nación...

–En el memo dice que el embajador ya había hablado con el ministro de Relaciones Exteriores y con el presidente.

–Después de esta reunión, ¿por parte del gobierno argentino hubo alguna propuesta? ¿Acercó al gobierno de Estados Unidos alguna idea?

–Realmente no me acuerdo, a lo mejor existen otros documentos, pero participaríamos en esto hasta que hubiese un gobierno democrático, después de eso considerábamos que debía tratarlo el propio gobierno argentino.

Con la llegada de la democracia y el comienzo de los juicios a los represores, los militares, e incluso el gobierno de Raúl Alfonsín, sostuvieron que la apropiación de niños fue uno de los “excesos” de la represión ilegal, un delito cometido por unos pocos fuera de la estructura montada por los jefes castrense. Las Abuelas de Plaza de Mayo y abogados defensores de derechos humanos demostraron que el robo de bebés fue una práctica sistemática.

“Consideramos que el de Abrams fue un testimonio importantes porque acreditó la veracidad del memo y si bien eso no estaba puesto en duda, para el sistema judicial argentino puede resultar extraño un documento de esas características. Y es una prueba importante contra Bignone y (Rubén) Franco (ex jefe de la Armada integrante de la última junta militar). Además, aportó interpretaciones sobre el documento que si bien podían ser inferidas, es diferente si lo afirma una persona que fue funcionario de jerarquía”, dijo Iud a este diario. Las Abuelas señalaron en un comunicado que consideran que “tanto el memo al que logramos acceder como la declaración de Abrams constituyen pruebas importantes” y por lo tanto redoblaron su pedido “para que se desclasifiquen todos los documentos de Estados Unidos, en particular de la CIA y el FBI, que puedan aportar información clave para encontrar a los nietos y nietas y condenar a los genocidas”.



Los documentos que reflejan la conversación entre Abrams y Lucio García del Solar.
 
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Respuesta  Mensaje 38 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 24/02/2012 04:12

Videla se negó a declarar en el marco del Plan Cóndor

El ex dictador no dio testimonio ante el juez Norberto Oyarbide por el presunto secuestro y torturas a 13 ciudadanos peruanos durante el Mundial de Futbol de 1978. Además, el magistrado citó para mañana a su entonces ministro del interior, Albano Harguindeguy, que a los 84 tiene prisión preventiva domiciliaria

 

El ex dictador Jorge Rafael Videla, que ya tiene dos condenas a prisión perpetua por crimenes de lesa humanidad, se negó a declarar hoy en torno del presunto secuestro y torturas a 13 ciudadanos peruanos durante el Mundial de Futbol de 1978, en el marco del Plan Cóndor, de cooperación represiva en la región. 

Requerido por el juez federal Norberto Oyarbide, Videla ingresó caminando poco después de las 14.30 al despacho del magistrado en los Tribunales Federales de Retiro, con esposas en la muñecas al frente, y conducido por agentes penitenciarios que lo trasladaron desde el Penal de Campo de Mayo, donde cumple condena.

Oyarbide dictó hace semanas un pedido de captura a Interpol del ex dictador peruano Francisco Morales Bermúdez, a quien acusó por la presunta captura y posterior traslado a la Argentina de un grupo de periodistas, políticos y militares peruanos, quienes desde acá fueron expulsados a Europa.

El juez consideró que "Videla, Morales Bermúdez y Albano Harguindeguy no fueron ajenos” a los hechos de colaboración represiva entre dictaduras latinoamericanas denunciados ante su juzgado.

Por tal motivo, Oyarbide citó para mañana a su entonces ministro del interior, Albano Harguindeguy, que a los 84 tiene prisión preventiva domiciliaria.

Según la denuncia, el acuerdo entre Videla y Morales Bermúdez incluyó el resultado del partido de fútbtol del Mundial en que la Selección argentina derrotó 6 a 1 a la peruana, ganándose asi el pase a la final con Holanda.

En esta causa, además de Videla y Harguindeguy, están procesados el ex director de Institutos Militares de Campo de Mayo, el también condenador general Santiago Riveros; y el ex jefe del Ejército Cristino Nicolaides.

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(Gran Papiyo)         


Respuesta  Mensaje 39 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 11/03/2012 02:27

La mamá de Astiz

El subsecretario de Derechos Humanos de la Nación, Luis Alem, sostuvo que el hecho de que los cruzamientos de datos genéticos no indiquen que el bebé que fuera entregado por la madre de Alfredo Astiz sea hijo de desaparecidos “no la autoriza a sustituirle la identidad” a nadie. Tal como informó en exclusiva Página/12, María Elena Vázquez de Astiz, la madre del represor de la ESMA, está siendo investigada en la causa por la supuesta sustitución y supresión de la identidad de un niño nacido en el año 1977. El funcionario agregó que igual “podría tratarse de uno de los nietos que todavía buscan las Abuelas, aunque el cruce de datos con el Banco Nacional de Datos Genéticos dio resultado negativo, esto no excluye la posibilidad de que sea uno de los nietos apropiados porque en el Banco no están todos los grupos familiares”.

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(Gran Papiyo)            


Respuesta  Mensaje 40 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 02/04/2012 01:57

Abuelas pidió 50 años de prisión para Videla

 

 

En la última jornada de su alegato frente al Tribunal Oral Federal 6, Abuelas de Plaza de Mayo solicitó además 25 años para el represor Juan Azic, 19 años para Santiago Riveros y 15 años para Oscar Franco y para el dictador Reynaldo Bignone. La titular del organismo Estela de Carlotto solicitó por una justicia "inclaudicable", para que "nunca más" se repitan los delitos de lesa humanidad perpetrados durante la última dictadura militar.

"En nombre de las Abuelas de Plaza de Mayo, de los organismos de derechos humanos hermanos, de los 30 mil detenidos-desaparecidos y de la mayoría del pueblo argentino, manifiesto que, sin que nos muevan sentimientos de odio, venganza o revancha, brindamos por arribar a la inclaudicable justicia, que sin dudas consolidará la democracia y asegurará el nunca más", setenció Carlotto.

Antes de entrar en la audiencia, que cerrará la etapa final de alegatos de Abuelas de Plaza de Mayo en el juicio por el plan sistemático de robo de bebés, el abogado del organismo, Alan Iud, explicó que "es difícil evaluar hasta dónde llegan los daños", porque "se suman otros delitos como el ocultamiento y apropiación de los menores y la supresión de sus identidades, mediante la falsificación ideológica de documentos públicos, por lo tanto, "se deben aplicar las máximas condenas" previstas en el Código Penal para los acusados.

Ayer, la querella organizó las pruebas sobre once mujeres embarazadas que parieron en la ESMA y describió el sector de Epidemiología del Hospital Militar de Campo de Mayo, donde parieron secuestradas. Explicaron cómo se establecieron las maternidades clandestinas en estos dos lugares, uno era el centro clandestino más importante de la Marina y el otro del Ejército.

El lunes, inició la parte final del juicio por el plan sistemático de robo de bebes que tiene en el banquillo de los acusados a los dictadores Jorge Rafael Videla y Reynaldo Benito Bignone; el exgeneral Santiago Omar Riveros, el exalmirante Antonio Vañek, el excapitán de la Marina Jorge "Tigre" Acosta, el exprefecto Jorge Azic, el exmarino Rubén Franco y el exmédico del hospital Naval Jorge Magnacco.

SALUDOS REVOLUCIONARIOS  

(Gran Papiyo)             


Respuesta  Mensaje 41 de 59 en el tema 
De: Nobotuma Enviado: 04/04/2012 02:07
A veces la justicia tarda, pero cuando llega es implacable..así debe ser contra todos esos asesinos que cubrieron de luto a tantas familias argentinas y desaparecieron a tántos niños y niñas, arrancados vilmente de los brazos de padres y madres hoy muertos y desaparecidos.

Respuesta  Mensaje 42 de 59 en el tema 
De: Marthola Enviado: 20/05/2012 14:40
¡¡ LOS VAMOS A ENCONTRAR !!
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
17º Marcha del Silencio - Montevideo - Uruguay - 2012
 
Este 20 de mayo a las 18.00hs se realizará la 17º Marcha del Silencio bajo la consigna "Los vamos a encontrar". El integrante de familiares Oscar Urtazum dijo que el hallazgo de los restos de Julio Castro y Ricardo Blanco marca un nuevo impulso.Este domingo 20 de mayo se realizará la 17º Marcha del Silencio bajo la consigna "Los vamos a encontrar, por un futuro sin impunidad, verdad y justicia". La marcha partirá a las 18.00hs de la Plaza de los desaparecidos, ubicada en Rivera y Jackson y continuará por 18 de julio hasta Plaza Cagancha.  

Frente a la explanada de la Intendencia de Montevideo se emitirá en la pantalla del IMPO un video con imágenes de los militantes detenidos desaparecidos por la dictadura, además nombrarlos por los altoparlante en el transcurso de la marcha.
En conversación con Montevideo Portal el integrante de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Óscar Urtasum señaló que la consigna refiere a la decisión de buscarlos a todos y marcar que aún sigue habiendo impunidad "por más que quieran barrerla debajo de la alfombra".
Urtasum señaló que el hallazgo de los restos del maestro Julio Castro y el militante Ricardo Blanco Valiente "marcan un nuevo impulso" en ese sentido y llamó a que la sociedad "haga suyo" a los detenidos desaparecidos.
El integrante de familiares, expresó su preocupación por la intención de integrar a las FFAA a diferentes actividades de la sociedad civil señalando que "aún está fresca" la herida de la dictadura y que aún no es tiempo para "integrarlos". "Se están desviando del rol que han sido asignados", afirmó.
 
 
Fuente: Montevideo Portal



 

Respuesta  Mensaje 43 de 59 en el tema 
De: Gran Papiyo Enviado: 04/07/2012 02:31
Martes, 3 de julio de 2012
Memoria, verdad y justicia

Cayó la mujer de Vildoza

La Justicia detuvo a la esposa del exjefe de la ESMA, Jorge Vildoza, imputado en la causa del plan sistemático de robo de bebés, quien estaba prófuga desde 1988, acusada de la apropiación del hijo biológico de Cecilia Viñas, actualmente detenida desaparecida. Ana María Grimaldos fue capturada en la localidad bonaerense de Acassuso y puesta a disposición de la jueza María Romilda Servini de Cubría.

Grimaldos, de 76 años, quien se declaró viuda, ingresó al país con una identidad falsa y fue descubierta luego de realizar llamadas telefónicas desde la propiedad de Acassuso a sus hijas, quienes siempre vivieron en la Argentina pese a que sus padres se fugaron con el niño secuestrado en 1986 y se radicaron en el exterior.

El matrimonio Vildoza Grimaldos está acusado de la apropiación de Javier Gonzalo Penino Viñas, criado como hijo biológico de ambos tras ser apropiado por Vildoza en la ESMA. Poco después, la madre fue trasladada a la Base Naval de Mar del Plata.

La Justicia sospecha que Grimaldos entró y salió muchas veces del país con dos identidades falsas -Ana María Marianuchi y Ana María Sedano- y fue detenida cuando estaba a punto de viajar a Londres, para conocer a la tercera hija de Javier, quien recuperó su identidad en 1999, luego de someterse voluntariamente a un exámen de ADN.

En el allanamiento realizado anoche a otro departamento que la mujer ocupaba de manera alternativa, se secuestraron numerosas fotos de familia tomadas en las últimas dos décadas, cuando ella y el excapitán de navío Vildoza ya estaban prófugos: una de ellas muestra el casamiento de Penino Viñas en Inglaterra y aparece posando junto con sus apropiadores en la fiesta.

Cecilia Viñas fue secuestrada en 1977 y fue la única detenida desaparecida que se comunicó con su familia hasta abril de 1984, ya en democracia. En aquellas conversaciones con su madre siempre denunció que estaba bajo "custodia militar" y le pidió a su familia que buscara a su hijo. Había sido secuestrada, en el barrio porteño de Almagro, con siete meses de embarazo, junto con su marido Hugo Pinino, y según testimonios de sobrevivientes fue llevada a la ESMA para dar a luz en septiembre de 1977 en la maternidad clandestina que funcionaba en la Escuela de Mecánica de la Armada, para luego ser trasladada a la Base Naval de Mar del Plata.

Su familia registró ocho llamados y se entrevistó con el entonces ministro de Interior, Antonio Tróccoli, quien puso a su disposición un grupo de investigación de la Policía Federal, sin resultado alguno.

Vildoza fue segundo jefe de la ESMA entre 1976 y 1980, a cargo del grupo de tareas 3.3.2, y se apropió del bebé de Viñas, quien fue apadrinado por el represor Roberto Pertussio, jefe de la fuerza de submarinos de la base naval marplatense y condenado a prisión perpetua por los delitos de lesa humanidad cometidos en aquel centro clandestino.

La causa se abrió en 1984 por la denuncia de Cecilia Fernández de Viñas, la abuela de Javier Gonzalo. Dos años más tarde Vildoza y su esposa se fugaron a Suiza con el niño y dejaron en el país a sus tres hijos biológicos. Desde entonces se sospechaba que estaban radicados en el exterior.

En 1998, cuando Javier Gonzalo Penino Viñas se enteró, navegando en internet, que "sus padres" tenían pedido de captura internacional, le envió una carta a Servini de Cubría, solicitando una prueba de ADN, y recuperó su identidad un año más tarde.

SALUDOS REVOLUCIONARIOS  

(Gran Papiyo)        

 

Respuesta  Mensaje 44 de 59 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 04/07/2012 12:58
Si los troskos van a buscar a todos como lo han hecho con hugo moyano , siguiéndolo para aplaudirlo hasta Plaza de Mayo ... entonces no va a quedar ningún argentino que los siga a ellos --  a los troskos .-jajajajajajaaaaa


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