La vicepresidenta se refirió al intento de magnicidio en su contra el pasado 1° de septiembre y afirmó que la investigación da cuenta de que existen autores intelectuales del hecho pero "los jueces de Macri" no lo quieren investigar. “Después de haber analizado todo, se ve claramente que los detenidos eran sólo los autores materiales. Hay ideólogos y autores intelectuales del atentado”, remarcó.
Cristina insistió en la relación entre Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte, Nicolás Carrizo, acusados por el atentado, y Revolución Federal. “Ellos se fotografiaron con estos líderes. Los siguieron. Fueron a las mismas manifestaciones y recibieron un financiamiento de 17 millones de pesos de un fideicomiso de [Nicolás] Caputo, amigo del alma de Macri”, enfatizó.
En otra parte de la entrevista, Cristina se manifestó segura de que los jueces que la juzgan en el marco de la causa Vialidad la van a condenar y eso será "una suerte de regalo para (Héctor) Magnetto", el CEO del Grupo Clarín. "El 6 van a dictar la sentencia. El 7 de diciembre va a ser publicada en los diarios. Ese día, el 7D, fue un emblema de nuestro gobierno con la ley de medios, que establecía que los dueños de medios que tenían demasiada concentración mediática debían desinvertir", dijo la expresidenta. En ese marco, añadió: "La tapa de 'Cristina condenada' y el 7D van a coincidir. Es una suerte de regalo para Magnetto".
Asimismo, la Vicepresidenta advirtió que "los jueces puestos por (el expresidente Mauricio) Macri lo protegen a él y protegen a quienes quisieron matarme, y no investigan nada de lo que pasó durante su gobierno". Sostuvo que "el neoliberalismo encontró tres nuevos instrumentos: controlar la voluntad popular, proteger judicial y mediáticamente a los dirigentes de derecha y disciplinar a los dirigentes políticos para que los que quieran defender a los excluidos lo piensen dos veces".
Por otra parte, la Vicepresidenta aseveró que "acá el lawfare estuvo encarado desde la cúspide del poder". En ese marco, apuntó: "Ricardo Lorenzetti, cuando era presidente de la Corte, se tomó una foto con Sergio Moro de un lado y Claudio Bonadio, que era un juez que perseguía a mí y a mi familia, del otro".
"Ser dirigente es poder mirar más allá y decir 'la historia va por allá, hay que hacer esto' . Eso no lo voy a perder nunca. Podré ser presidenta o legisladora, pero nunca voy a renunciar a decir lo que me parece que hay que hacer para construir un país mejor para nuestra gente", añadió.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)