Querida, parece que el momento tan inesperado y en este caso muy desprevenido se está presentando y será parte de mi larga lista de casos que lo hacen a uno perder la calma. No esperaba con tanta precisión que a mi corazón le dieras tan dura noticia que de seguro con malicia has planeado, y como quien gira un dado me das la respuesta y como que fuera apuesta veo que la suerte que causará mi muerte, me informa que perdí.

Llegó lo inesperado cuando tuve fe, se que era imposible cuando no la tenía, sabía que era ilógico y hasta un tanto utópico, pero me atreví a creer y la ilusión se apegó a mi corazón, de mi mente no se despegaba el pensamiento de que tú eras mi alma gemela, que tú eras lo mejor de mi vida y el rayo de luz que me alumbró, ¡que linda fantasía!

Como olvidar que te soñaba en mis brazos y que cuando era el momento de verte la sensación era intensa y al sentir tu presencia me provocaba un efecto analgésico que increíblemente me hacía sentir que la vida estaba llena de felicidad y que valía la pena luchar por que nunca tuviera un final, pues el sólo hecho de pensar que podría terminar me causaba inevitablemente un estado de ánimo opuesto a lo que sentía a tu lado.

Hoy ya la historia de algo bello a tu lado es imposible relatarla en tiempo presente, ha pasado a ser un simple recuerdo, ha pasado de ser algo mágico e increíble a algo trágico y terrible. La historia cambió, de una linda ilusión, pasó a ser mi ilusión restante.

Es una ilusión restante porque tú te has llevado todo, tú te llevaste lo bello de esos momentos, cada risa compartida, cada palabra que me daba vida, cada minuto en el que sentí tu calor y sentía que era fantasía, pero daba cabida porque estabas allí…

Pero ahora me perturbo al no entender porque tuvo que terminar, me mata el hecho de pensar que nunca fue real, que siempre fue un espejismo y que esa hermosa ilusión se ha desvanecido y que hoy entre el resto está dando a vida a la desilusión. Tal vez mañana la historia cambie, te deseo lo mejor y que sobre todo sea muy feliz.

Desconozco autor