| 
| 
| 
 
| 
| 
 
| 
| 
 
| 
| 

 
     
 
 Original de Francisco Álvarez Hidalgo 
 
 
 
 
 
 
|       |  
 Pero no pudo ser. No me preguntes.Se rompen copas, se derrite el hielo,
 se van las golondrinas,
 las hojas secas se las lleva el viento.
 
 Regresaré algún día a Salamanca
 de la mano gentil de mis recuerdos,
 pero sin ella, la que deshojara
 los pétalos sedosos de mi sueño.
  Del poema "Casi un proyecto"
   |   |    
 
 
| 
|      
| 
Salamanca   (I)
  Niña nacida ayer, la primavera
 da sus primeros pasos por la orilla
 rufianesca del Tormes; en Castilla
 la tierra, sin embargo, es siempre austera.
 
 Ni verdea el alcor ni la pradera,
 su piel, arena seca, parda arcilla;
 pero es azul el cielo, y el sol brilla
 terso sobre el pinar y la chopera.
 
 Cuando tu mano roce en Salamanca
 sus piedras de oro, vuélvete y arranca
 las huellas por mis manos allí impresas.
 
 Han esperado tanto tu llegada
 de ferviente mujer enamorada…
 bésalas, que al hacerlo, a mí me besas
 
  Los Angeles, 30 de marzo de 2005
     Soneto Nº 1259 de FAH |  |  |  
 
 
 
 Plaza Mayor 
 
 
 
| 
| 
| 
Salamanca   (II)
  En la Plaza Mayor, al mediodía,
 frontal suntuosidad de Churriguera,
 se arracima la turba dominguera
 tallando a sol y a sombra simpatía.
 
 Hora de aperitivos, de osadía
 fraguando en cada mesa la manera
 de abatir el prejuicio o la barrera
 que a la sonrisa elemental se alía.
 
 Bajo la protección de la sombrilla,
 reposando en la mano la mejilla,
 miras, sin ver, amantes y palomas;
 
 vidas sin interés, mundo adyacente.
 El otro mundo al fondo de tu mente
 desde lejos te envuelve en sus aromas.
 
  Los Angeles, 31 de marzo de 2005
     Soneto Nº 1260 de FAH |  |  |  
 
 
 
 Patio de las Dueñas 
 
 
 
| 
| 
| 
Salamanca   (III)
  Sobre el puente romano. La corriente
 resbala por los ojos arqueados,
 de piedra gris. Los álamos clavados
 en cada orilla ondean levemente.
 
 Gorriones y vencejos, en frecuente
 revoloteo sobre los tejados
 de las dos catedrales; y poblados
 los aires de tañido transparente.
 
 Las Dueñas, San Esteban, las Escuelas,
 el encanto de tantas callejuelas
 en sombra y melancólica quietud.
 
 Y yo añorando tu aire y tus maneras,
 y pensándome tú, como si fueras
 parte de mi lejana juventud.
 
  Los Angeles, 1 de abril de 2005
 
  Soneto Nº 1261 de FAH
 
 |  |  |  
 
 
 
 Fachada de la Universidad 
 
 |  |  |  |  |  |  |  |  |