SACANDO LAS RUINAS DE NUESTRO HOGAR

Mis queridas amigas, ¡cuanto me gozo al ver mujeres tan firmes en el camino del Señor! De verdad mujeres asi son ejemplos dignos de seguir, testimonios vivientes de lo que Dios pudo transformar en sus vidas!

Siempre esta este anhelo en mi corazon de que cada vez mas mujeres y hombres dispongan su corazon a las cosas del Señor! Y se que este tema del matrimonio, a los matrimonios creyentes, puede resultar ser un poco tedioso porque es como que lo tenemos archisabido, con los textos biblicos que le atañen, con la consejeria de nuestras iglesias, etc., etc. Pero sabes que?

Yo anhelo ver mas matrimonios restaurados, anhelo ver mas mujeres y hombres que tomen el compromiso de la union conyugal con verdadera devocion, como lo hace Jesus con Su Iglesia. Especialmente en aquellos que han sido dañados muy gravemente por el enemigo y este deseo tan ferviente y que a veces quema mi corazon es quizas porque yo conozco el daño irreparable que el enemigo puede hacer en el hombre, en la mujer y en los hijos de ese matrimonio.
Alguna vez alguien me dijo: pero... ¿como puedes predicar si tu propio matrimonio esta en prueba? Y si, es verdad, pero se que mi testimonio final sera para la gloria del Señor, y en el proceso voy aprendiendo a amar mas a mi esposo, a mi hijo, pero por sobre todo a Mi Señor, porque El es el que me da las fuerzas y la esperanza que aumentan mi fe cada dia que transcurre, esa fe que grita a viva voz ¡TODO ES POSIBLE PARA MI DIOS!
Y no ceso de darle gracias a mi Creador, a mi Dios Todopoderoso, a mi Padre Celestial por enseñarme cada dia más sobre lo que es un matrimonio con El y lo que es un matrimonio sin El. Lo que es un hogar bendecido, lo que es una casa edificada sobre La Roca.

Por eso yo te animo a perseverar en el camino del Señor, no importen las pruebas, las dificultades cualquiera fuera la situacion, tú solo continúa caminando aferrandote a El y si te caes o te cansas, no te preocupes, Dios en su misericordia infinita estara siempre a tu lado, para confirmar su promesa de que El no te dejara ni te desamparará y estara contigo hasta el final de tus dias, y yo hasta me animaria a agregar que El estará aún más allá del final de tus dias en esta tierra, porque El y solo El sera quien te dará la corona cuando estes en tu casa verdadera, morando junto a El.

Cuando un matrimonio aparentemente se desmorona, es similar a una casa que se derrumba, al igual que nuestra vida, nuestros sueños, nuestros anhelos. Pero sabes que, mi amada? Siempre quedan los cimientos y si tú eras una mujer que creia en Dios cuando quisiste edificar tu hogar, ese cimiento tiene un muy buen material, el mas caro, el mas codiciado, el mas verdadero. ¡Tu fé en Dios!. Y vas a comenzar a edificar nuevamente y a lo mejor lo vas a tener que hacer sola, sin la ayuda de tu esposo, ni de tus hijos porque solo eres tú la que tienes esa fé en Dios!. A lo mejor ellos no quieran o no creen que sea posible y lo dan todo por hecho.
¡Pues no, mujer querida! Si tu tienes esa fe y anhelas, al igual que anhelaba yo, salvar mi matrimonio, ve, comienza a sacar primeramente todo los escombros que no sirven. Y esos escombros son el llanto, el sufrimiento que has vivido, el rencor, la falta de perdon y... ¡tantas cosas! Y ve sabiendo que esa es la primera etapa y es lo que mas cuesta y duele, la que te puede llevar mucho, pero mucho tiempo.

No es facil sanar un corazon lastimado, una dignidad pisoteada, años tal vez de engaños o traiciones, todas esas cosillas que estas creyendo que son imperdonables.
Pero Dios te va a pedir que perdones todo, no lo que tu quieras perdonar, sino TODO. y es alli donde El verá y probara tu fe.

¿Viste cuando hay que sacar todos los escombros de una obra? No los que quedan cuando estas edificando, sino los que caen cuando se derrumba una casa. ¡Esos si que son trabajosos! Y si no estas preparada y tienes las herramientas necesarias deberás hacerlas con tus manos, y tus manos quedaran lastimadas, doloridas y no se si podras hacer dos dias de esas labores siquiera.
Por eso debes comenzar a tomar las herramientas que Dios te va dando y la primera de ella es la Oración.
Comienza a orar, a hablar con tu Padre Celestial, a contarle TODO lo que tu quieras, total ¿quien va a escuchar, sino es solamente El? Confiale hasta tu sentimiento mas fuerte de enojo quizas, despojate de todo tu dolor y frustacion hasta sentirte liviana y que te elevas adonde El te lleva: a su paz.

Pero no creas que son procesos cortos que se dan por un abrir y cerrar de ojos. NO, lamento decirte esto, pero el tiempo lo dispone Dios y no nosotras. Pero a medida que tu intimidad con Dios va creciendo, fortaleciendote, las situaciones a tu alrededor van a ir cambiando a como tu la ves. Porque la situacion tal vez siga siendo la misma por mas tiempo de lo que tu querrias, pero tu actitud, tus pensamientos, tu amor, iran siendo cambiados a voluntad de Dios y ya no de la tuya.

Mujer preciosa, tu vales mucho para Dios, pero tambien tienes un valor para tu esposo y para tus hijos y solo el Altisimo y Poderoso será quien les haga ver esto y será cuando tu hayas sacado todas las ruinas y escombros de tu hogar, sanes tus manos cansadas de tanto trabajar, y comiences a levantar las paredes que seran como muros de fortaleza que guardaran tu nuevo hogar! Ten fé! y manos a la obra.!!
Dios te bendiga.

Graciela

  Fondo By Perla