El chanchito es buen amigo del Buey. Se entienden y brindan mutua complacencia. El noble, esforzado, valiente y querible cerdito encontrará que el Buey le brindará toda clase de oportunidades para crecer, pero el "cochinito" deberá dejar de lado su vida de lujuria y promiscuidad. El chancho ama la vida y la vida a él y como es temerario y no le asustan los desafíos, se pondrá a trabajar como es debido y le impone el Buey, obteniendo buena recompensa y reconocimiento. El chancho sabrá aprovechar la influencia del animal sagrado, el Buey, y avanzará con un progreso ilimitado. La generosidad y solidaridad del porcino será reconocida y le llegarán oportunidades en todos los niveles. El Buey premiará a su amigo el Cerdo y hasta le dará la oportunidad de ganar en apuestas y empresas difíciles. El único problema para el chancho en el año del Buey, será resolver sus asuntos del corazón, pues a pesar de estar muy ocupado, el tema del amor lo trastornará en más de una ocasión. Y es que el chancho ama con posesión y sin prejuicios de ninguna naturaleza, pero no siempre es valorado y correspondido, entonces se encierra en su chiquero a llorar su pena y frustración. Sin embargo, se le dará la oportunidad de elegir a su amorcito y dedicarle, como a él le gusta, toda su vida y devoción.

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