Me podría enamorar de ese alguien,
que me lleve hasta la luna sin prisas,
deje en mi corazón besos que calmen,
esa inquietud que aleja mis sonrisas.

Me podría enamorar de un poeta,
que con sus versos y selecta letra,
saque la soledad cual gris gaveta,
olvidada en la oscuridad siniestra.

Me podría enamorar de un marino,
que recorra en su mar a mis sentidos,
navegando para buscar caminos,
donde atracar nuestros cuerpos unidos.

Me podría enamorar de un soldado,
que con su militarizado paso,
me teja sueños de paz a su lado,
olvidando lo magro de su ocaso.

Me podría enamorar del que sueña,
que anhela encontrar su bella princesa
y necesita el amor de su dueña,
amando con delirio que embelesa.

Me podría enamorar del amigo,
con los sellos de la amistad partidos,
para seguir su relación conmigo,
avasallando de luz los sentidos.

Me podría enamorar del viajero,
el que camina por la vida errante,
que lleva dentro un sueño lisonjero,
con el paso muy firme y elegante.

Me podría enamorar de un sólo hombre,
que note mis huellas inadvertidas,
visite mi alma y se aprenda mi nombre,
llenando de amor mis tardes perdidas.