Dios no te preguntará qué modelo de auto usabas;
...te preguntará a cuánta gente llevaste para ayudarla.
Dios no te preguntará los metros cuadrados de tu casa;
...te preguntará a cuánta gente recibiste en ella.
 
Dios no te preguntará la marca de la ropa en tu armario;
...te preguntará a cuántos ayudaste a vestirse.
 
 
Dios no te preguntará cuán alto era tu sueldo;
...te preguntará si vendiste tu conciencia para obtenerlo
  
Dios no te preguntará cuál era tu título;
...te preguntará si hiciste tu trabajo con lo mejor de tu capacidad.
 
Dios no te preguntará cuántos amigos tenías;
...te preguntará cuánta gente te consideraba su amigo.
 
 
Dios no te preguntará en qué vecindario vivías;
...te preguntará cómo tratabas a tus vecinos.
 
  
Dios no te preguntará el color de tu piel;
...te preguntará por la pureza de tu interior.
 
  
Dios no te preguntará por qué tardaste tanto en buscar la Salvación; ... te llevará con amor a tu casa en el Cielo y no a las puertas del Infierno.
 
Dios no acusa; solo te pide que prediques con el ejemplo
Que Dios te bendiga siempre y te acompañe en tus nuevas obras.