Mientras yo te besaba...
Mientras yo te besaba te dormiste en mis brazos. No lo olvidaré nunca. Asomaban tus dientes entre los labios: fríos, distantes, otros. Ya te habías ido. Debajo de mi cuerpo seguía el tuyo, y tu boca debajo de mi boca. Pero tu navegabas por mares silenciosos en los que yo no estaba. Inmóvil y en silencio nadabas alejándote acaso para siempre.... Te abandoné en la orilla de tu sueños. Con mi carne aún caliente volví a mi sitio: también yo mío ya, distante, otro. Recuperé el disfraz sobre la arena. "Adiós", te dije, y entré en mi propio sueño, mi propio sueño, en el que tú no habitas.
ANTONIO GALA |