Cuentan que en la antigua Grecia, donde el amor platónico tomo su nombre del famoso filosofo Platón, existía entre los grandes pensadores y sus discípulos una gran comunión entre las almas. También dicen que, dado que todas estas almas eran de genero masculino, la homosexualidad era en aquellos tiempos moneda corriente en los ambientes filosóficos y artísticos. Sea como fuere, allí se origino la denominación de este curioso tipo de amor denominado platónico.
Amor si, sexo no Siendo que el amor esta definido en la naturaleza como una unión cuyo objeto ultimo es la preservación de la especie, y cuyo objeto primero es la satisfacción del deseo sexual, el amor platónico viene a ser una fruta rara en el pool de los tipos de amor que existen en el mundo. Y es que el amor platónico se desprende por completo de lo físico para pasar a un plano espiritual, y es capaz de alimentarse a si mismo sin tener el objeto que desea o, en este caso, adora. Existen algunos tipos de amor que se experimentan comúnmente en ciertas etapas de la vida que se pueden denominar como platónicos. Entre ellos, el amor a la maestra o el maestro, un amor exacerbado entre hermanos, pueden llegar a constituirse en ejemplos de amores que rozan el borde entre lo platónico y lo no tan platónico.
No tan platónico... Muchas veces el amor platónico puede también tener que ver con un sentimiento de amor total y completo, pero donde la persona que lo origina no despierta en nosotros el mas mínimo deseo sexual. Otras veces, el amor platónico no es ni mas ni menos que una sublimación de un amor con todas las letras al cual, por ser imposible, no nos entregamos de cuerpo entero. Por ejemplo, si amamos a alguien que esta comprometido y no tenemos ninguna intención de convertirnos en el tercero en discordia, es muy probable que desarrollemos por la persona amada un amor platónico digamos por fuerza y no por elección.
Cuando Platón baja a la tierra ¿Es posible que un amor que comience como platónico se transforme en amor carnal? La respuesta es si. Si, por ejemplo, secretamente o inconscientemente realmente deseábamos a la persona objeto de nuestro amor platónico, pero por algún motivo no nos atrevíamos a aceptarlo, es posible que algún cambio en nuestras circunstancias o las del ser amado nos haga cambiar el sentimiento y desarrollar un amor carnal por el/ella. Sin ir mas lejos, si sentíamos amor platónico por nuestro mejor amigo de la infancia cuando estaba felizmente casado, su divorcio podría cambiar dramáticamente el panorama de nuestros sentimientos, así como también la relación.
Platónico forever Por suerte, existen realmente algunos amores que son genuinamente platónicos. Existe algo bonito en eso de un amor que no espera nada a cambio, que no vive de las satisfacciones del cuerpo. Quizás, en un punto, el amor platónico constituya una forma mucho mas elevada del amor, aunque, claro, no todos estamos capacitados para sentirlo. De todas formas, el amor carnal tampoco esta nada mal. Como dice la canción, el que tenga un amor, que lo cuide; platónico o no, el amor es hermoso y hay que disfrutarlo todo lo que sea posible. |