Somos:
una sola consonancia,
un enlace de sonoridad perenne.
Nuestros mundo distante, se necesitan,
Chocan y se repelan, conversan y se poetizan;
Sin embargo se buscan y se contraen.
Donde nos convertimos
en perfecta melodía
Profunda, penetrante, envolvente.
Llegamos mágicamente a desconocer
La dimensión del tiempo y del espacio.
La presencia tuya en mí, es mas que un rumor;
Mi presencia en ti es más que unas letras
La presencia de los dos, es una loca aventura.
Cuando vibras para mí, cuando produces música,
Mis letras bailan
Cuando te acercas a mí, mi alma tiembla
Mientras mi corazón baila
Pero cuando té niega a mí
Muero por dentro,
También por fuera.
Argomento precedente
Primo 
