LECCION INFANTIL
Siempre que estoy decepcionada de mi vida, me detengo a pensar en el pequeño Jaime Scott.
Jaime estaba intentando conseguir una parte en una obra en la escuela. Su mamá me dijo que el niño había puesto su corazón en ello, aun así ella temía que no seria elegido.
El día que las partes de la obra fueron repartidas, yo estuve en la escuela. Jaime salió corriendo con los ojos brillantes con orgullo y emoción.
- Adivina que mamá - grito, y dijo las palabras que permanecerán como una lección para mi:
- He sido elegido para aplaudir y animar.
(Autor desconocido)