En la Misa que celebró en la Parroquia Santa Ana, el Prelado y el Vicario para la Familia, P. Marek Burzawa, bendijeron a las madres gestantes y expresó su deseo de "este Adviento cambie nuestra vida, que estas mujeres nos ayuden a comprender la virtud de la esperanza, que tal como dice el Santo Padre, el que vive en esperanza vive en Dios. Por ello debemos bendecir la vida que nace, que se acoge y se regala".

"Este es un tiempo de austeridad, de preocuparnos por lo que realmente vale la pena, que es la venida del Señor, dejar atrás lo inútil y volver a nuestra esencia de cristianos", añadió.

Al finalizar la Eucaristía, todos los asistentes recibieron de parte de la Vicaría para la Familia una pulsera con la inscripción "Familia misionera de la Vida", para que la porten como símbolo del compromiso adquirido.

Más de una decena de embarazadas recibieron esta consagración, agradeciendo a Dios por el regalo de la Vida y comprometiéndose a cuidarla y promoverla.