Comentario:  

Si la vida eterna consiste en conocer al Padre y a su enviado Jesucristo, entonces debemos abrazar todo lo que nos lleve a este conocimiento, y rechazar todo lo que se oponga a él.

El Santo Rosario es un medio eficacísimo para conocer a Jesucristo, el Verbo hecho Hombre, porque a través de la meditación de los misterios y con la recitación de Padrenuestros y Avemarías, vamos profundizando en la contemplación y el conocimiento del Salvador, que es Dios con nosotros, y así nos alejamos cada vez más del pecado y del demonio, y al final alcanzaremos infaliblemente la Vida eterna.

Pero aquí se dice que el rezo del Rosario nos otorga un conocimiento “completo” de Jesucristo, cosa que es verdaderamente admirable, ya que nuestra vida espiritual depende del amor que tengamos a Jesús, y tanto más lo amaremos cuanto más lo conocemos, porque nadie puede amar lo que no conoce.