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General: oracion ante el peligro
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Message 1 de 161 de ce thème |
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| De: perladelmar (message original) |
Envoyé: 28/06/2013 03:50 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 147 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 18/03/2014 06:18 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 148 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 23/03/2014 13:18 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 149 de 161 de ce thème |
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ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 150 de 161 de ce thème |
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De: Delfina |
Envoyé: 23/03/2014 16:05 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 151 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 28/03/2014 20:45 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 152 de 161 de ce thème |
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De: Delfina |
Envoyé: 29/03/2014 18:10 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 153 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 05/04/2014 17:42 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 154 de 161 de ce thème |
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De: Delfina |
Envoyé: 06/04/2014 14:33 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 155 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 10/04/2014 17:34 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 156 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 15/04/2014 16:46 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 157 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 22/04/2014 17:05 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 158 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 01/05/2014 11:06 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén.
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Message 159 de 161 de ce thème |
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De: Eithlin |
Envoyé: 05/05/2014 18:35 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén
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De: Eithlin |
Envoyé: 22/05/2014 03:24 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén
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De: Eithlin |
Envoyé: 29/05/2014 06:47 |
ORACIÓN ANTE EL PELIGRO
María, esperanza mía, mira a tus pies a un pobre pecador tantas veces por mi culpa esclavo del mal. Reconozco que me dejé vencer del enemigo por no acudir a ti, refugio mío. Si a ti hubiera siempre recurrido y siempre te hubiera invocado, jamás hubiera caído.
Espero, Señora y Madre, haber salido por tu medio del mal y que Dios me habrá perdonado. Pero temo caer de nuevo en sus cadenas. Sé que mis enemigos desean perderme y me preparan nuevos asaltos y tentaciones. Ayúdame tú, mi reina y mi refugio. Tenme bajo tu protección; no consientas que de nuevo me vea esclavo del pecado.
Sé que siempre que te invoque me ayudarás a salir victorioso. Virgen santísima, que siempre de ti me acuerde, sobre todo al encontrarme en la batalla; haz que no deje de invocarte diciendo: “María, ayúdame; ayúdame, María”.
Y cuando llegue la hora de mi muerte, reina mía, asísteme entonces como nunca; haz tú misma que me acuerde de invocarte con la boca y el corazón con más frecuencia para que, expirando con tu dulce nombre en los labios y el de tu Hijo Jesús, pueda ir a bendeciros y alabaros para no separarme de vosotros por toda la eternidad en el paraíso. Amén
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