LIBERTAD DE EXPRESIÓN PERO SIN OFENDER
El Papa Francisco, con motivo del atentado el día 7 de Enero contra la sede de la revista Charlie Hebdo en París por parte de extremistas islámicos, que ha acabado con 12 personas, periodistas y autoridades policiales, ha afirmado que "todos nosotros tenemos no solo la libertad, sino el derecho y también la obligación de decir lo que pensamos para ayudar a construir el bien común...pero sin ofender". Y además, ha añadido que "matar en el nombre de Dios es una aberración contra Dios. Pienso que esto es lo más importante con la libertad religiosa. Puedes practicar (tu religión) con libertad, pero sin imponer o matar”.
El Papa Francisco reiteró que “toda religión tiene dignidad, toda religión que respeta la vida humana y a la persona humana y no me puedo burlar de ella. Y este es un límite”. No olvidemos que la revista francesa CHARLIE HEBDO se ha burlado ofensivamente de políticos e incluso de la Iglesia Católica, de sus pastores, de la Virgen María y de la Santísima Trinidad.
La Libertad de expresión es un derecho fundamental de todo individuo para expresar sus ideas, contemplado en el artículo 19 de la Declaración Universal de los derechos humanos. Sin embargo, este mismo artículo restringe el derecho “a las establecidas por las leyes con el único fin de asegurar el reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades de los demás”.
Ataques por cientos se dan a los sentimientos católicos, y aquí no pasa nada. ¿Pasó algo cuando la Virgen de la Macarena fue colgada en internet de manera irreverente y obscena? ¿Pasó algo cuando Krahe cocinó un Cristo emitido por Canal Plus o cuando se hacieron representaciones teatrales blasfemas con subvención pública como “Me cago en Dios”…
¡ Sí, libertad de expresión pero sin ofender y sin burlarse de las religiones y de los que practican la religión!
(Francisco Baena)