Señor, sé nuestra luz en cada día para poder ver por donde vamos y descubrir cuál es la guía que nos conduce al sendero de la vida. Sé Tú Señor nuestro compañero de camino de los que vamos por el mundo para aprender qué hacer en cada instante y no perder el rumbo a medio día. Si Tú nos acompañas feliz será la vida nuestra y andaremos con paz y en alegría porque contigo Señor la vida es esperanza y regocijo. Tantas veces somos necios que nos aferramos a lo inútil, no queremos darnos cuenta de la maldad de nuestra moral falsa pues llamamos luz a lo que es tinieblas y amor a lo que es superficial lascivia. Cómo vivimos engañados por estar lejos de ti Señor y Tú nos buscas tantas veces y de muchos modos pero somos de corazón endurecido y fría se queda nuestra alma. Por eso Señor Dios sé nuestra luz en el camino de la vida para que acertemos a hacer tu voluntad, que no vayamos a estar siendo engañados creyendo estar en la verdad; mete tu Palabra en nuestro entendimiento y tu Espíritu en nuestro corazón, para poder pensar como Tú piensas para poder luchar como Tú luchas para poder vivir como Tú vive para poder amar como Tú amas. Amén. (Escrita por Fray Manuel Correa ofm)
Señor, sé nuestra luz en cada día para poder ver por donde vamos y descubrir cuál es la guía que nos conduce al sendero de la vida. Sé Tú Señor nuestro compañero de camino de los que vamos por el mundo para aprender qué hacer en cada instante y no perder el rumbo a medio día. Si Tú nos acompañas feliz será la vida nuestra y andaremos con paz y en alegría porque contigo Señor la vida es esperanza y regocijo. Tantas veces somos necios que nos aferramos a lo inútil, no queremos darnos cuenta de la maldad de nuestra moral falsa pues llamamos luz a lo que es tinieblas y amor a lo que es superficial lascivia. Cómo vivimos engañados por estar lejos de ti Señor y Tú nos buscas tantas veces y de muchos modos pero somos de corazón endurecido y fría se queda nuestra alma. Por eso Señor Dios sé nuestra luz en el camino de la vida para que acertemos a hacer tu voluntad, que no vayamos a estar siendo engañados creyendo estar en la verdad; mete tu Palabra en nuestro entendimiento y tu Espíritu en nuestro corazón, para poder pensar como Tú piensas para poder luchar como Tú luchas para poder vivir como Tú vive para poder amar como Tú amas. Amén. (Escrita por Fray Manuel Correa ofm)