DEBO
DEBO: Aprender, entender, corregir, aceptar y  mejorar.
DEBO APRENDER:
- Que enamorarme no es obsesionarme ni irme a los  extremos.
- Que  no debo poner toda la motivación de mi vida en una persona.
- Que si pretendo  tener una relación de adulto, debo comportarme como tal.
- Que no es bueno  sobrevalorar, endiosar, ni idealizar a nadie. Porque todos somos humanos, y no  debo esperar de mi pareja más de lo que puedo esperar de un ser humano.
- Que  es bueno ser como soy, siempre y cuando eso no implique irrespetar a quien esté  conmigo.
DEBO ACEPTAR:
- Que los planes pueden desaparecer en un  instante, porque el futuro se mueve y no como a mí me de la gana.
Si éste me  permite hacer algunas cosas sobre él, debo estar agradecido y no lamentándome  por todo lo que no pude hacer.
- Que alrededor del amor, la sociedad ha  creado muchas cosas que son creencias para todos, pero resulta que al vivirlas  son un fraude.
Por eso debo afrontar la cara a la verdad de la relación  objetivamente y no continuar una relación por una falsa comodidad o por miedo al  dolor.
Si la vida me demuestra que aquello en lo que puse mi corazón es  una mentira, debo aceptarlo; llorando, desahogándome y renaciendo como la nueva  persona que seré.
DEBO ENTENDER:
- Que no se debe rogar amor y que una  relación de pareja no es para vivir angustiado.
- Que la comodidad que me  brinda la rutira es falsa porque la vida está en constante cambio, por eso es  necesario aprender a tolerar la inseguridad natural que se maneja en la vida  cotidiana.
DEBO ACEPTAR:
- Que en el amor, como en cualquier otra cosa  de la vida, existen los tropiezos, las caídas y los dolores, esto te produce  miedo y lo único que hace es dificultar más las cosas.
- Que en algunas  ocasiones es necesario pasar por un gran dolor para conocer una gran felicidad,  ya que a veces el suelo del fondo es el más apto para brincar.
DEBO  RECORDAR: Que a veces, lo bueno se obtiene esperando y presionando se  arruina.
Por eso es necesario tener paciencia, esperar tranquilamente y  RECORDAR...
- Que la impaciencia es producto de un impulso emocional que tal  vez pronto pasará.
- Que la impaciencia asfixia a quien está conmigo.
-  Que la presión se puede convertir en acciones irrespetuosas.
- Que tomar una  decisión mientras estoy impaciente es peligroso, porque estoy influido por un  estado emocional extremo y pierdo toda objetividad, ahí no va mi verdad, va mi  impulso, mi compulsión, y podría hacer algo de lo que me arrepienta.
DEBO  TENER PRESENTE:
- Que el sentir algo hoy, no implica que lo sienta mañana, y  así como me permito disfrutar, también debo permitirme llorar, ya que el dolor  es parte de la vida, al igual que el placer.
DEBO MEJORAR MI  AUTOESTIMA:
- Para que la partida de quien quiero no me haga sentir  despreciado, humillado o rechazado.
- Para no ser tan sensible al  abandono.
- Para que no hiera mi ego.
- Para no terminar creyendo que me  dejaron por feo o por tonto.
- Para poder aceptar que simplemente funcionó el  tiempo que tuvo que funcionar.
- Para no arrastrarme poniéndome de alfombra a  los pies de nadie.
DEBO ACEPTAR:
- Que a quien le agrado hoy, no es  seguro que le agrade mañana. Y eso no tiene porque ofenderme...
- Si acepto  que a veces las personas no pueden dar más, ni yo mismo.
- Si acepto que  quien esté conmigo tiene derecho a no estarlo y a que yo no le guste.
- Si  acepto que quien amo, tiene derecho a tomar sus propias decisiones, aunque a mí  no me satisfagan.
DEBO APRENDER:
A NO SER POSESIVO.
El que  alguien se vaya no es perder una pertenencia que me gustaba mucho.
Mi  pareja no es mía, es prestada, y "su dueño" tiene derecho a llevárselo cuando  desee.
Y aunque "ser dueño" de alguien brinde más seguridad que tenerlo  pretado, debo entender que eso es una ilusión.
Aunque crea que es mía, no  lo es, por lo tanto...
- No puedo decidir sobre la vida de quien esté  conmigo.
- No puedo esperar que haga sólo lo que yo desee.
- No puedo  controlarle, manipularle, adueñarme de ella, ni controlar su destino.
- No  debo reclamarle a la vida porque me quitó lo que me prestó.
Pero sobre  todo... DEBO APRENDER... QUE NUNCA DEJARE DE APRENDER, y mientras continúo  aprendiendo, debo permitirme vivir y sentir.