Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Abuelos Modernos
¡ Feliz Cumpleaños Rebeca Boj !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 AbuelosModernos.com 
 Accesorios p/trabajar y diseñar 
 Clases 
 Imágenes p/Mensajes 
 - JUEGOS - 
 Nuestra Cocina 
 Presentaciones 
 PROGRAMAS UTILES - por MAOM 
 
 
  Herramientas
 
POESIA: ORACION A LA MAESTRA
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: Tatiana  (Mensaje original) Enviado: 29/01/2010 20:43

La Oración de la Maestra

¡Senor! Tú que enseñaste, perdona que yo enseñe; que lleve el
nombre de maestra, que Tú llevaste por la Tierra.

Dame el amor único de mi escuela; que ni la quemadura de la
belleza sea capaz de robarle mi ternura de todos los instantes.

Maestro, hazme perdurable el fervor y pasajero el desencanto.
Arranca de mí este impuro deseo de justicia que aún me turba, la
mezquina insinuación de protesta que sube de mí cuando me hieren.
No me duela la incomprensión ni me entristezca el olvido de las
que enseñe.

Dame el ser más madre que las madres, para poder amar y defender
como ellas lo que no es carne de mis carnes. Dame que alcance
a hacer de una de mis niñas mi verso perfecto y a dejarte en ella
clavada mi más penetrante melodía, para cuando mis labios
no
canten más.

Muéstrame posible tu Evangelio en mi tiempo, para que no renuncie
a la batalla de cada día y de cada hora por él.

Pon en mi escuela democrática el resplandor que se cernía sobre
tu corro de ninos descalzos.

Hazme fuerte, aun en mi desvalimiento de mujer, y de mujer pobre;
hazme despreciadora de todo poder que no sea puro, de toda
presión que no sea la de tu voluntad ardiente sobre mi vida




Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: Tatiana Enviado: 02/01/2013 22:40


Hazme fuerte, aun en mi desvalimiento de mujer, y de mujer pobre;
hazme despreciadora de todo poder que no sea puro, de toda
presión que no sea la de tu voluntad ardiente sobre mi vida



 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados