CONSECUENCIAS
 
Un niño acaba de ser descubierto en una 
mentira. Su padre, comprensivo y moderno,
 sabe que no es importante esa mentira 
sino el concepto moral del mentir.
 
 Por este motivo el padre deja de hacer lo 
que estaba haciendo, se para frente 
al niño y comienza a explicarle en un 
lenguaje sencillo por qué tiene que decir
 siempre la verdad: -Hijo, no importan la 
consecuencias, las mentiras siempre 
traen problemas y acarrean más mentiras. 
 
Cada vez que mientes la confianza de los 
otros hacia ti se va perdiendo, es como
  un vaso que se va trizando, hasta 
terminar por romperse. 
Después, aunque intentes repararlo, nunca 
quedará igual.
 
 Mientras el padre terminaba su 
explicación suena el teléfono y el niño, como 
una forma de disculparse por el error 
cometido, dice: -¡Yo voy! 
– Y corre a atender. -Es el corredor de 
seguros, papi. 
-¡Ufa!, justo ahora, dile por favor que no 
estoy.
¿¿¿¿.....????