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LA MIRADA
Cruel mirada que jamás creí volver a ver,
has clavado en su pecho la infame daga
de los sentimientos y ahora comienzas a corroer en él,
todo aquello puro de su ser,
sumiéndole en cenizas que el tiempo terminará de consumir.
Creíste con toda esa virtud de una vez primera,
dejaste que el destino te impusiera,
y ahora resquebraja dentro tuyo
todos esos sueños proyectados.
Has conocido el dolor del alma en toda su expresión,
tu corazón a experimentado la frialdad por excelencia,
¿acaso no te advertí de esa mirada,
no te dije que nunca anidaba en la tibieza
del alma ingenua y pura como la nuestra ?.
Que peor remedio ahora que el olvido,
tormentoso camino a seguir de los raídos como tú,
tal ves ahora ya no vuelvas a ver otra mirada igual,
y cuando por si acaso le vieras otra ves,
te ahogarás en una sonrisa comprensiva,
igual a la que hoy me sentenciaras.
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