RESUCITAR...

El sentido de la oración, de la meditación, es, precisamente, el

enseñar al hombre a alimentarse de elementos de la naturaleza

espiritual.

Aquellos que no lo han comprendido y que se sienten atraídos

exclusivamente por los placeres, las diversiones y las ocupaciones

prosaícas, descuidan la oración y la meditación; y es una lástima

para ellos, porque interrumpen su trabajo de transnformación,

de resurrección.

Yo lo he observado: la gente se transforma al meditar. lo he observado

en mi mismo y en los demás.

En una verdadera meditación, el rostro se ilumina. Cada meditación

debe hacer aumentar la luz en vosotros.

Gracias a esta luz, que entra en la construcción de vuestro

cuerpo de gloría, un día resucitaréis-

Autor: Omraam Mikhäel Aïvanhov

Ketty